El documento propone una meditación guiada en la que se imagina entregarle a Dios todos los problemas y preocupaciones, y guardar en el corazón los momentos felices y de gratitud. Luego se agradece a Dios por todo lo bueno y malo, se respira profundamente y se imagina que el ángel lleva las oraciones a Dios. Finalmente se invita a bendecir a otros que puedan necesitar ayuda.