Qué son las barras bravas? Origen y características de los grupos violentos en el fútbol latinoamericano
1. ¿QUÉ SON LAS BARRAS BRAVAS?
El término barra brava se emplea en América Latina para designar a aquellos grupos
organizados dentro de una hinchada que se caracterizan por producir diversos incidentes
violentos, dentro y fuera del estadio, despliegue pirotécnico y cánticos empleados durante el
desarrollo de los partidos.
Originalmente denominados barra fuerte, por el vespertino argentino La Razón en octubre de
1958, a raíz del asesinato policial del joven Mario Linker en el partido entre Vélez Sársfield y
River Plate. El término aparece en Argentina a comienzos de la década de 1960, y luego se fue
extendiendo su uso por toda América Latina. En Brasil se los denomina "torcidas organizadas",
mientras que en otros continentes son conocidos como hooligans o ultras.
Generalmente las barras bravas, también llamadas el grueso de la hinchada, utilizan banderas
(denominadas trapos o lienzos) y diferentes instrumentos musicales. Las barras bravas también
se caracterizan por ubicarse en las tribunas populares, aquellas que frecuentemente carecen de
asientos y donde los espectadores deben ver el partido de pie.
Este fenómeno se ha extendido, en diverso grado, en diferentes países de América.
Generalmente tienen su origen en una subcultura juvenil de carácter urbano, donde se busca la
pertenencia a un grupo determinado. Si bien existe una amplia variedad de estas barras en
América, éstas tienden a presentar ciertos rasgos comunes: exaltación de la fuerza, el
nacionalismo, el sentido del honor asociado con la capacidad de pelear y la necesidad de
reafirmación.
Tradicionalmente, se ha asociado a las barras bravas con la marginalidad urbana, y el consumo
de alcohol y drogas. En general, en la mayor parte de América estas barras están conformadas
por jóvenes entre los 14 y 25 años,[1] mientras que en Argentina es posible encontrar a personas
mayores, pues poseen una tradición más arraigada. En los distintos países de América Latina
estas bravas han adquirido notoriedad progresivamente, al menos desde comienzos de la década
de 1990.
2. BARRAS BRAVAS EN EL PERÚ
Las barras nacen en el Perú a finales de la década de 1960, como una agrupación de
simpatizantes que se organizan para alentar a sus respectivos equipos, por medio de
cánticos.[11] Desde fines de la década de 1980, estas barras comenzaron progresivamente a
transformarse , dando origen a las barras bravas en el Perú, con el nacimiento del Comando Svr
de Alianza Lima en 1986 y la Trinchera Norte del Universitario, en 1988.
A partir del año 2000 los enfrentamientos entre las barras bravas han comenzado a tornarse
más violentos, llegando incluso al uso de armas de fuego y muertes. Inicialmente el fenómeno
apareció en Lima, la capital del país, sin embargo, con los años se expandió a otras provincias
del Perú, como Arequipa y Cusco.
¿Cómo se lucha contra las barras bravas en la
región?
Bryan Huamanlazo es la última víctima de la violencia en nuestro fútbol, lo que aleja al público de
los estadios. ¿Pero es posible erradicar este mal? A continuación le mostramos cómo se lucha
contra este flagelo en algunos países de Sudamérica y qué resultados se ha tenido.
En Colombia se dispuso cerrar las fronteras de cada ciudad a las barras de equipos que llegan
de otras partes del país. Otra norma fue que un club juegue a puertas cerradas si su barra
provoca disturbios.
En Chile, la ANFP y el gobierno impusieron el programa Estadio Seguro, que ha controlado la
violencia con medidas como el registro de cada hincha mediante sus datos personales y
su huella digital antes de entrar a algún recinto. Además, para cada encuentro los clubes
contratan a compañías de seguridad privadas.
En Ecuador se ha instalado cámaras de seguridad en todos los estadios, se juega a puertas
cerradas o en otra cancha si la barra de un club hace problemas. Asimismo, las diferentes
hinchadas que están empadronadas firmaron un pacto de no agresión.
LA OTRA CARA
En Argentina, desde el 2013 en la Primera División se juega solo con hinchada local en los
estadios, esto debido a la muerte de un hincha de Lanús a causa de un disparo hecho por la
policía. Pero ni eso detiene la irracionalidad de los ‘barrabravas’ que luchan por el control de su
propia barra, tal como pasó hace poco cuando hinchas de Quilmes se agarraron a golpes en la
tribuna, en pleno partido con All Boys.
3. En Uruguay se estudia quitar entre 3 y 12 puntos a los equipos cuyas hinchadas causen
desmanes.