El documento describe el arte románico, un movimiento artístico que surgió entre los siglos XI y XII en Europa. El arte románico estuvo fuertemente influenciado por la religión cristiana y se enfocó principalmente en temas religiosos. La arquitectura románica combinó elementos de diferentes culturas. La pintura al fresco también fue común, como se muestra en el ejemplo del Pantócrator de Sant Climent de Taüll.
1. P O R J U A N P A B L O S E P Ú L V E D A P O S S O
I M A G E N I
D O C E N T E : L U I S O R C A S I T A S
U N I V E R S I D A D P O N T I F I C I A B O L I V A R I A N A
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El arte románico
2. ¿Qué fue el arte románico?
El arte románico es considerado el movimiento artístico
por excelencia de la edad media.
Surgido más o menos en el siglo XI, y predominante
hasta el siglo XII, esta corriente románica llevó a la
pintura, a la escultura y principalmente a la
arquitectura a representar los valores y vivencias de la
sociedad feudal. Surgió paulatina y espontáneamente
en Alemania, Italia, Francia y España, y se expandió
por el resto de Europa.
3. Siendo un movimiento que surgió
En plena edad media, el arte románico
estuvo fuertemente influenciado por
la totalidad de los valores caracterís-
ticos de la religión cristiana. Es por
esta razón, que encontraremos que en
este movimiento la mayoría de las
obras están enfocadas en aspectos
religiosos.
El papel cristiano
4. Arquitectura en la época románica
Se llama estilo románico en arquitectura al
resultado de la combinación razonada y
armónica de elementos constructivos y
ornamentales de procedencia latina, oriental
(bizantinos, sirios, persas y árabes) y
septentrional (celtas, germánicos, normandos)
que se formó en la Europa cristiana durante los
primeros siglos de la baja Edad Media.
5. Pintura al fresco en la época románica
Como se mencionó anteriormente, el arte
románico estuvo principalmente enfocado a
la religión, y es muy difícil pensar en una
iglesia de la edad media que no estuviera
pintada, tanto en el interior como, en
ocasiones, también en sus exteriores.
Las paredes en la época románica se
pintaban con la técnica del fresco, mediante
colores acuosos sobre una pared húmeda
preparada con varias capas de cal y arena
fina.
Pintar al fresco exigía una gran rapidez de ejecución y además
no había forma de corregir o de rectificación. Se estima que los
pintores disponían de alrededor de siete horas para poder
realizar un tramo de pintura.
7. Pantócrator de sant Climent de Taüll
Todo el cascarón del ábside central (de 4 m de diámetro) estaba
recubierto de pinturas murales que se conservan en el Museo
Nacional de Arte de Cataluña. Representan el Pantocrátor metido en
una mandorla perlada, sentado en una franja transversal que está
decorada con dibujos vegetales. A la altura de sus hombros están
dibujadas las letras griegas Α y Ω, simbolizando a Cristo como
principio y fin de todas las cosas. El Pantocrátor está en actitud de
juzgar con su mano derecha mientras que en la izquierda sostiene un
libro abierto en que puede leerse: «Ego sum lux mundi», cuyo
significado es “Yo soy la luz del mundo.
Cristo está vestido con una túnica grisácea y envuelto en un manto
azulado. Sus pies desnudos descansan sobre una semiesfera, y a su
alrededor se ven cuatro ángeles. La zona inferior muestra un fondo de
tono azulado. Se reconoce a San Juan Evangelista por ser el único
imberbe. La Virgen está vestida con una toca blanca y un manto azul;
y porta en su mano izquierda el Santo Grial.