2. ¿Qué ES?
Era la plaza principal de algunas
localidades en
el urbanismo castellano e hispano
americano.
En muchos casos,
particularmente en América,
reciben el nombre de plaza de
armas. Las plazas de armas se
encuentran dentro de los castillos
o fuertes de los nobles que
poseían un escudo nobiliario, que
eran sus armas.
3. El término "plaza mayor" se prevé
explícitamente en una Ordenanza de los Reyes
Católicos de 1480 como el que debe llevar el
lugar de una población con suficiente espacio
abierto para celebrar el mercado y en el que
debe instalarse la casa consistorial del
ayuntamiento. Aplicado el urbanismo
castellano durante la conquista de
América para la fundación de ciudades de
nueva planta, se utilizó, además del de "plaza
mayor" el de "plaza de armas", debido a la
prevención de utilizarlas como principal punto
de reunión en caso de un ataque, por lo que,
además de los principales edificios públicos
alojaban arsenales o guarniciones de armas.
4. El nombre oficial de muchas plazas con
estas denominaciones, al igual que el del
resto de la toponimia urbana, ha sufrido
cambios de naturaleza política. Por
ejemplo, en España ha sido corriente que
se sustituyera por Plaza Real o Plaza de la
Constitución alternativamente según
cambiara el gobierno durante los siglos
XIX y XX.
5. Como concepto urbanístico, de espacio abierto que
permite el contacto y la comunicación entre los
ciudadanos y una gran cantidad de funciones
urbanas, nace de las plazas de arrabal o plazas de
mercado a las puertas de las murallas, pero fuera
del recinto amurallado mientras que otras plazas
propias del espacio mediterráneo con las que
comparte la benignidad del clima, como el foro
romano o el ágora griega, estaban en el
mismo centro urbano.
6. Las funciones urbanas que cumplían las plazas
mayores, además de la original de mercado, se
ampliaron a la de espacio político y espacio de
festejos y solemnidades, como corridas de
toros, autos de fe de la Inquisición, ejecuciones
públicas de ámbito civil,4 sin olvidar la función
de espacio de conflicto social, pues las plazas
mayores son el referente de reunión en caso
de motín de subsistencias o de manifestación.
7. En América, las Plazas mayores son
planificadas desde el trazado de las ciudades,
como la Plaza de Mayo de Buenos Aires, o como
en el Zócalo de México, por derribo de edificios
previos.
9. La plaza mayor de Madrid es una de las mas
reconocidas a nivel mundial.
Los orígenes de la plaza se remontan al siglo XVI,
cuando en la confluencia de las calles de Toledo y
Atocha, a las afueras de la villa medieval, se
celebraba en este sitio, conocido como plaza del
Arrabal, el mercado principal de la villa,
construyéndose en esta época una primera casa
porticada, o lonja, para regular el comercio en la
plaza.
En 1580, tras haber trasladado la corte
a Madrid en 1561, Felipe II encargó el proyecto de
remodelación de la plaza a Juan de Herrera,
comenzándose el derribo de las casas de manzanas de
la antigua plaza ese mismo año. La construcción del
primer edificio de la nueva plaza, la Casa de la
Panadería, comenzaría en 1590 a cargo de Diego
Sillero, en el solar de la antigua lonja. En 1617, Felipe
III, encargó la finalización de las obras a Juan Gómez
de Mora, quién concluirá la plaza en 1619.
10. El nombre de la plaza ha variado a lo largo de la historia, del
primigenio nombre de plaza del Arrabal pasó a llamarse plaza
Mayor.
Se llamó plaza del Arrabal cuando, de estar fuera del recinto
amurallado medieval, pasó a constituir el centro de los nuevos
barrios conformados por el ensanchamiento de la villa hacia el
este durante el reinado de Juan II de Castilla, llamados el
Arrabal.
En 1812, cumpliendo el decreto que disponía que todas la
plazas mayores de España pasasen a llamarse plaza de la
Constitución, cambió de nombre, pero solo duraría hasta 1814,
año en que pasó a llamarse plaza Real. Recuperó el nombre de
plaza de la Constitución en los períodos de 1820 a 1823,
de 1833 a 1835y de 1840 a 1843.
En 1873, cambió su nombre por el de plaza de la República, y
otra vez a Plaza de la Constitución desde
la Restauración de Alfonso XII en 1876 hasta la Dictadura de
Primo de Rivera en 1923. Tras la proclamación de la II
República se volvió a cambiar al nombre de plaza de la
Constitución hasta el final de la Guerra Civil española cuando
se recupera el popular nombre de plaza Mayor, nombre que
perdura hasta la actualidad.
11. La plaza mayor tiene una superficie de aproximadamente
una hectárea.
La plaza Mayor ha sufrido tres grandes incendios en su
historia, el primero de ellos en 1631, encargándose el
mismo Juan Gómez de Mora de las obras de
reconstrucción. El segundo de los incendios ocurrió
en 1670 siendo el arquitecto Tomás Román el encargado
de la reconstrucción. El último de los incendios, que
arrasó un tercio de la plaza, tuvo lugar en 1790,
dirigiendo las labores de extinción Sabatii. Se encargó la
reconstrucción a Juan de Villanueva, que rebajó la altura
del caserío que rodea la plaza de cinco a tres plantas y
cerró las esquinas habilitando grandes arcadas para su
acceso. Las obras de reconstrucción se prolongarían
hasta 1854, continuándolas, tras la muerte de Villanueva,
sus discípulos Antonio López Aguado y Custodio Moreno.