La diabetes tipo 2 es una enfermedad crónica caracterizada por altos niveles de azúcar en la sangre. Los síntomas incluyen infecciones que sanan lentamente, fatiga, hambre excesiva, sed frecuente y aumento de la micción. Se diagnostica mediante exámenes de sangre que miden los niveles de glucosa en ayunas, la hemoglobina A1c o la tolerancia a la glucosa después de beber una solución azucarada.