1. El Retorno y la Reafirmación de la Pintura Jorge Alberto Munguia Lee
2. El Fotorrealismo En un panorama que dominado por las manifestaciones muy cercanas de lo conceptual, no fue hasta finales años sesenta cuando el realismo pictórico empezó a tener su lugar propio. Ya con todo, hay que reconocer que en los primeros años de esa década no faltaron opciones realistas alejadas de la pictórica como lo hicieron Jack Beal, Alfred Leslie, Alex Katz y Philip Pearlstein. La principal aportación al reconocimiento del realismo fue su lucha contra los movimientos de la abstracción pospictorica y del minimalismo. Alex y Philip Pearlstein abogaron por un realismo objetivo concebido, por lo común, en gran formato, en el anteponían la lógica a la expresión y la planificación a la improvisación, y en el que aislaron el tema del entorno, tratándolo como el máximo rigor y precisión, casi como la abstracción.
3. La prime ocasión en la que la tendencia foto realista se manifestó como tal fue en 1968 en la exposición de Linda Nochlin. Con todo no fue hasta 1972 cuando las te decías fotorrealistas, que empezaban a difundirse en Europa con el nombre Sharp Realismo, Superrealismo y Radical Realim. El fotorrealismo no solo fue el fenómeno de la costa esta norteamericana, sino que casi al mismo tiempo se forjo en una y otra costa. En California , uno de los primeros artistas que mediados los sesenta se rebelaron contra el expresionismo abstracto y decidieron, primero a través de un realismo que se podría llamar perceptual y luego, casi de inmediato, a través de la cámara fotográfica, plasmar el entorno cotidiano en documentos pictóricos estáticos y de gran neutralidad visual fue Robert Bechtle.
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5. La Pintura reducida a sus componentes materiales La respuesta europea al formalismo derivado de las poéticas minimalistas valoradoras de la pureza y el estilo, y a las manifestaciones de arte procesual que en 1969 recibieron acogida en Europa. Alejándose tanto del objetualismo derivado del Nuevo realismo de principios de los Años sesenta como de las opciones figurativas más recientes que sobrevaloraban el elemento narrativo.
6. En 1967, se comenzó a rechazar los modelos impuestos por la figuración narrativa practicada anteriormente. Este objetivo se concreto en el XVIII salón de la JeunePeinture, con la que se pretendía superar los conceptos que sustentaban la pintura de aquellos momentos, tales como ilusionismo, expresión, subjetividad, oficio, estética, buen gusto y mensaje. En la línea abierta por el colectivo BMPT de reducir la pintura a su soporte y a su realidad material, de liberarla de sus artificios, de limitarla a sus componentes esenciales, hay que inscribir el trabajo de un grupo de pintores franceses que convergieron en su afán de entender la praxis pictórica a partir de su especificidad y en seguir los presupuestos difundidos por el teórico MarcelinPleynet desde las páginas de la revista Les LettresFrancaises.
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8. La pintura norteamericana de los años setenta Según CorinneRobins, tras el periodo conceptual definido por la unidad y la ortodoxia, entre 1977 y 1978, en estados unidos se asistió a la gestación de un nuevo pluralismo entre en el que convivían diferentes vías que tenían en común su disconformidad con el sistema comercial del arte: le de la patternpainting, defensora de una vuelta a cierto procedimientos artesanales de la creación plástica; la de la BadPainting, reivindicadora de una figuración espontanea y propagadora de una imagen pisto rica situada en el filo de la atracción y el realismo, y la de la New imagepainting con su particular imaginería, mezcla de figuración, abstracción y concepto.
9. Uno de los primeros frentes contra las rigideces, la asepsia y la ortodoxia del arte conceptual fue construido por un grupo de artistas que defendieron un arte ecléctico de impulso decorativo y de formas ornamentales relacionadas con labores tenidas tradicionalmente como femeninas. Esta tendencia, impulsada por AmySoldin. Su consolidación se produjo pocos años después en Nueva York. La rebeldía frente el arte purista, aunque sin la componente femenina, fue también uno de los objetos de la llamada badpainting, pintura exaltadora de una figuración mezcla de los icónico, lo abstracto y los conceptual.