2. Hace mucho, pero mucho tiempo, cuando ninguna estación del año había
aparecido en nuestro planeta, el Sr. Invierno ya estaba preparándose para
su llegada.
Es que al Sr. Invierno le gusta llegar contento a todos los rincones de la
Tierra y repartir ricos chocolates y chocolatadas a todos los niños del
mundo.
3. Pero, aunque a él le gustaba repartir alegrías a todos, no tenía a quién
entregarlas, porque aún no había vida en este mundo.
Fue así como el Creador de las estaciones lo vio tan contento que
pensó que sería hora de iniciar el largo viaje de las queridas
estaciones del año...
Para ello, el Creador pensó que primero debía preguntarle a los
amigos: Don Otoño, Doña Primavera y Don Verano si querían
acompañarlo en esta marcha.
4. Como todos eran muy buenos compañeros no tuvieron
problemas y comenzaron a dejar pasar su tiempo para que
Don Invierno apareciera y mientras que las estaciones
pasaban
Don Invierno se ocupaba de preparar una gran fiesta
blanca para todos los habitantes de la Tierra.
Fue entonces que preparó nieve en gran cantidad para
jugar con todos los niños del mundo.
5. Pero como en toda fiesta, no faltaron ni las tortas riquísimas ni
los chocolates de todos los colores.
Además repartió bufandas abrigadas y coloridas; y gorros y
guantes calentitos para todo el mundo
6. Don Invierno también se ocupo de hacerse muy amigo
de Don Sol para que cuando la nieve helada caiga del
cielo, el sol caliente a todos.
Fue entonces que el Creador le dijo: -¡Ahora sí amigo
Invierno, te dejo que vayas al mundo a conocer a todos
los niños y a alegrarlos con tu llegada!
Desde ese día cada año, el 21 de noviembre, nuestro
amigo invierno, llega cargado de frío, nieve, chocolates y
muchas, muchas cosas más...
Disfrútalo!