SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 6
Lectura por palabras                                             Volver

                    6º- Prueba 11
   Emiliano Zapata, un
   soñador con bigotes
          Elije la velocidad de la lectura

    V1                 V2           V3               V4                V5
    185               210            250            300                350
palabras por      palabras por   palabras por   palabras por       palabras por
   minuto            minuto         minuto         minuto             minuto



Martha Laura López Coquis                       ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”
Lectura por palabras                                                                 Volver
       Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 185 ppm
     Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco
tenía respiro.
     Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar en
armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote, consolar a los
pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una siesta.
     Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don
Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían sucedido
muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar.
     Pero vayamos entrando en materia:
     Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la razón a
los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros padres y
abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos saque a bailar
en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y tantísimas cosas.
     Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que salga
un chorro de agua; había que traerla del río o del pozo. Ni imaginarse siquiera oprimir un botoncito y que se
prendiera la lámpara; había que conseguir petróleo para el                o cerillos para las velas. ¿Gas? No había:
fogón para la comida y encomendarse al dios anti catarro al bañarse. Había tanto por hacer que los adultos no se
daban abasto.        que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que, entre
la mala alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla.
                                       Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero ésa no se las
cuento; sólo les digo que se conocieron, se enamoraron, se casaron, tuvieron hijos y una mañana de agosto,
en 1879,        los ojos por primera vez el pequeño Emiliano.
     –¿Ya viste el lunar que tiene encimita del párpado?–             la amorosa y todavía adolorida doña Cleofás.
     –¡Cómo                                                                        –         el orgullosísimo Gabriel
Zapata, quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo.
     Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan de
orgullo.

  Profra. Martha Laura López Coquis                                             ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”
Lectura por palabras                                                                 Volver
        Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 210 ppm
     Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco
tenía respiro.
     Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar en
armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote, consolar a los
pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una siesta.
     Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don
Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían sucedido
muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar.
     Pero vayamos entrando en materia:
     Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la razón a
los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros padres y
abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos saque a bailar
en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y tantísimas cosas.
     Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que salga
un chorro de agua; había que traerla del río o del
                                                                          o cerillos para las velas. ¿Gas? No había:
fogón
                     que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que, entre
la mala alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla.
                                       Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero

               los ojos por primera vez el pequeño Emiliano.
    –                                                   –          la amorosa y todavía adolorida doña Cleofás.
    –                                                                          –          el orgullosísimo Gabriel
Zapata, quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo.
    Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan de
orgullo.

  Profra. Martha Laura López Coquis                                             ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”
Lectura por palabras                                                                Volver
        Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 250ppm
     Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco
tenía respiro.
     Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar
en armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote,
consolar a los pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una
siesta.
     Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don
Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían
sucedido muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar.
     Pero vayamos entrando en materia:
     Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la
razón a los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros
padres y abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos
saque a bailar en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y
tantísimas cosas.
     Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que
salga un chorro de agua; había que traerla del río o del
                                                                         o cerillos para las velas. ¿Gas? No había:
fogón
                      que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que,
entre la mala alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla.
                                      Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero

                   los ojos por primera vez el pequeño Emiliano.
    –                                                       –            la amorosa y todavía adolorida doña
Cleofás.
    –                                                                        –        el orgullosísimo Gabriel
Zapata, quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo.
    Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan
Lectura por palabras                                                                 Volver
        Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 300ppm
     Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco
tenía respiro.
     Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar en
armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote, consolar a los
pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una siesta.
     Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don
Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían sucedido
muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar.
     Pero vayamos entrando en materia:
     Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la razón a
los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros padres y
abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos saque a bailar
en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y tantísimas cosas.
     Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que salga
un chorro de agua; había que traerla del río o del
                                                                          o cerillos para las velas. ¿Gas? No había:
fogón
                     que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que, entre
la mala alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla.
                                       Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero

               los ojos por primera vez el pequeño Emiliano.
    –                                                   –          la amorosa y todavía adolorida doña Cleofás.
    –                                                                          –          el orgullosísimo Gabriel
Zapata, quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo.
    Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan de
orgullo.

    Profra. Martha Laura López Coquis                                         ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”
Lectura por palabras                                                                Volver
         Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 350ppm
     Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco
tenía respiro.
     Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar en
armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote, consolar a los
pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una siesta.
     Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don
Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían sucedido
muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar.
     Pero vayamos entrando en materia:
     Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la razón a
los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros padres y
abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos saque a bailar
en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y tantísimas cosas.
     Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que salga un
chorro de agua; había que traerla del río o del
                                                             o cerillos para las velas. ¿Gas? No había: fogón

    que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que, entre la mala
alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla.
                                      Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero

           los ojos por primera vez el pequeño Emiliano.
    –                                                 –            la amorosa y todavía adolorida doña Cleofás.
    –                                                                    –         el orgullosísimo Gabriel Zapata,
quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo.
    Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan de
orgullo.
     Profra. Martha Laura López Coquis                                         ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

Las guerras del agua cameron stracher
Las guerras del agua  cameron stracherLas guerras del agua  cameron stracher
Las guerras del agua cameron stracherKaryn Anléu Cano
 
guia de alumno charly y la fabrica de chocolate
guia de alumno charly y la fabrica de chocolateguia de alumno charly y la fabrica de chocolate
guia de alumno charly y la fabrica de chocolateJessy Clemente
 
Isabel Allende
Isabel  AllendeIsabel  Allende
Isabel AllendeWagner AC
 
Donald Ray Pollock - El diablo a todas horas
Donald Ray Pollock - El diablo a todas horas Donald Ray Pollock - El diablo a todas horas
Donald Ray Pollock - El diablo a todas horas Antonio J. Rodríguez
 
Elaboracion de historia, charlie y la fabrica de chaocolate
Elaboracion de historia, charlie y la fabrica de chaocolateElaboracion de historia, charlie y la fabrica de chaocolate
Elaboracion de historia, charlie y la fabrica de chaocolateDayan Pickles Ab
 

La actualidad más candente (6)

Guia actividades-noche-muertos
Guia actividades-noche-muertosGuia actividades-noche-muertos
Guia actividades-noche-muertos
 
Las guerras del agua cameron stracher
Las guerras del agua  cameron stracherLas guerras del agua  cameron stracher
Las guerras del agua cameron stracher
 
guia de alumno charly y la fabrica de chocolate
guia de alumno charly y la fabrica de chocolateguia de alumno charly y la fabrica de chocolate
guia de alumno charly y la fabrica de chocolate
 
Isabel Allende
Isabel  AllendeIsabel  Allende
Isabel Allende
 
Donald Ray Pollock - El diablo a todas horas
Donald Ray Pollock - El diablo a todas horas Donald Ray Pollock - El diablo a todas horas
Donald Ray Pollock - El diablo a todas horas
 
Elaboracion de historia, charlie y la fabrica de chaocolate
Elaboracion de historia, charlie y la fabrica de chaocolateElaboracion de historia, charlie y la fabrica de chaocolate
Elaboracion de historia, charlie y la fabrica de chaocolate
 

Similar a 6o. emiliano zapata, un soñador con bigotes

Cronica camino de changos.doc 1005 jm
Cronica camino de changos.doc 1005 jmCronica camino de changos.doc 1005 jm
Cronica camino de changos.doc 1005 jmandres
 
libro.querido-hijo-estamos-en-huelga.pdf
libro.querido-hijo-estamos-en-huelga.pdflibro.querido-hijo-estamos-en-huelga.pdf
libro.querido-hijo-estamos-en-huelga.pdfFotocopiasImpresione1
 
Analisis de la obra el milagro de ana sullivan
Analisis de la obra el milagro de ana sullivanAnalisis de la obra el milagro de ana sullivan
Analisis de la obra el milagro de ana sullivanIrisleiva
 
Frases CéLebres De NiñOs [El Hormiguero]
Frases CéLebres De NiñOs [El Hormiguero]Frases CéLebres De NiñOs [El Hormiguero]
Frases CéLebres De NiñOs [El Hormiguero]ESPEJO 25
 
MI VIDA SIN MÍ
MI VIDA SIN MÍMI VIDA SIN MÍ
MI VIDA SIN MÍcoralrubio
 
Una abundancia de katherines l john green
Una abundancia de katherines l john greenUna abundancia de katherines l john green
Una abundancia de katherines l john greenMaarce Ospina Rodriguez
 
Sueños sin dueños.
Sueños sin dueños.Sueños sin dueños.
Sueños sin dueños.53077214
 
Cr tica a_charlie_y_la_f_brica_de_chocolate_moles
Cr tica a_charlie_y_la_f_brica_de_chocolate_molesCr tica a_charlie_y_la_f_brica_de_chocolate_moles
Cr tica a_charlie_y_la_f_brica_de_chocolate_molesAula Z
 
El eterno optimista
El eterno optimistaEl eterno optimista
El eterno optimistaLuci Zhinín
 
Whitiker Gail Escandalos De Sociedad 11 Una Situacion Comprometida
Whitiker Gail   Escandalos De Sociedad 11   Una Situacion ComprometidaWhitiker Gail   Escandalos De Sociedad 11   Una Situacion Comprometida
Whitiker Gail Escandalos De Sociedad 11 Una Situacion ComprometidaNovelera
 
Descripción y estudio del personaje de Elizabet, de la novela "Buenos días pr...
Descripción y estudio del personaje de Elizabet, de la novela "Buenos días pr...Descripción y estudio del personaje de Elizabet, de la novela "Buenos días pr...
Descripción y estudio del personaje de Elizabet, de la novela "Buenos días pr...kafir14
 
Guia de teatro de ana sullivan
Guia de teatro de ana sullivanGuia de teatro de ana sullivan
Guia de teatro de ana sullivanReina Isabel
 

Similar a 6o. emiliano zapata, un soñador con bigotes (19)

Cronica camino de changos.doc 1005 jm
Cronica camino de changos.doc 1005 jmCronica camino de changos.doc 1005 jm
Cronica camino de changos.doc 1005 jm
 
libro.querido-hijo-estamos-en-huelga.pdf
libro.querido-hijo-estamos-en-huelga.pdflibro.querido-hijo-estamos-en-huelga.pdf
libro.querido-hijo-estamos-en-huelga.pdf
 
La magia de tu ciclo menstrual.
La magia de tu ciclo menstrual.La magia de tu ciclo menstrual.
La magia de tu ciclo menstrual.
 
Analisis de la obra el milagro de ana sullivan
Analisis de la obra el milagro de ana sullivanAnalisis de la obra el milagro de ana sullivan
Analisis de la obra el milagro de ana sullivan
 
Libro - Pequeña
Libro - PequeñaLibro - Pequeña
Libro - Pequeña
 
Nombre de la obra
Nombre de la obraNombre de la obra
Nombre de la obra
 
Frases CéLebres De NiñOs [El Hormiguero]
Frases CéLebres De NiñOs [El Hormiguero]Frases CéLebres De NiñOs [El Hormiguero]
Frases CéLebres De NiñOs [El Hormiguero]
 
MI VIDA SIN MÍ
MI VIDA SIN MÍMI VIDA SIN MÍ
MI VIDA SIN MÍ
 
Una abundancia de katherines - john green
Una abundancia de katherines - john greenUna abundancia de katherines - john green
Una abundancia de katherines - john green
 
Una abundancia de katherines l john green
Una abundancia de katherines l john greenUna abundancia de katherines l john green
Una abundancia de katherines l john green
 
Sueños sin dueños.
Sueños sin dueños.Sueños sin dueños.
Sueños sin dueños.
 
By Isabel Allende
By Isabel AllendeBy Isabel Allende
By Isabel Allende
 
Cr tica a_charlie_y_la_f_brica_de_chocolate_moles
Cr tica a_charlie_y_la_f_brica_de_chocolate_molesCr tica a_charlie_y_la_f_brica_de_chocolate_moles
Cr tica a_charlie_y_la_f_brica_de_chocolate_moles
 
Muerte en el priorato
Muerte en el prioratoMuerte en el priorato
Muerte en el priorato
 
El eterno optimista
El eterno optimistaEl eterno optimista
El eterno optimista
 
Whitiker Gail Escandalos De Sociedad 11 Una Situacion Comprometida
Whitiker Gail   Escandalos De Sociedad 11   Una Situacion ComprometidaWhitiker Gail   Escandalos De Sociedad 11   Una Situacion Comprometida
Whitiker Gail Escandalos De Sociedad 11 Una Situacion Comprometida
 
Discapacitados Catalina
Discapacitados CatalinaDiscapacitados Catalina
Discapacitados Catalina
 
Descripción y estudio del personaje de Elizabet, de la novela "Buenos días pr...
Descripción y estudio del personaje de Elizabet, de la novela "Buenos días pr...Descripción y estudio del personaje de Elizabet, de la novela "Buenos días pr...
Descripción y estudio del personaje de Elizabet, de la novela "Buenos días pr...
 
Guia de teatro de ana sullivan
Guia de teatro de ana sullivanGuia de teatro de ana sullivan
Guia de teatro de ana sullivan
 

Más de Martha Laura López Coquis

Más de Martha Laura López Coquis (20)

Exa3ero b3 2015
Exa3ero b3 2015Exa3ero b3 2015
Exa3ero b3 2015
 
6o. los inventos
6o. los inventos6o. los inventos
6o. los inventos
 
6o. diario de clara
6o. diario de clara6o. diario de clara
6o. diario de clara
 
6o. soy el cero
6o. soy el cero6o. soy el cero
6o. soy el cero
 
6o. amores del toma y dame
6o. amores del toma y dame6o. amores del toma y dame
6o. amores del toma y dame
 
6o. los nombres de los astros
6o. los nombres de los astros6o. los nombres de los astros
6o. los nombres de los astros
 
6o. lucha libre
6o. lucha libre6o. lucha libre
6o. lucha libre
 
6o. me alquilo para soñar
6o. me alquilo para soñar6o. me alquilo para soñar
6o. me alquilo para soñar
 
6o. ¿está bien enemorarse
6o. ¿está bien enemorarse 6o. ¿está bien enemorarse
6o. ¿está bien enemorarse
 
6o. bajo un cielo extraño
6o. bajo un cielo extraño6o. bajo un cielo extraño
6o. bajo un cielo extraño
 
6o. ¡no hay una alma, mi general!
6o. ¡no hay una alma, mi general!6o. ¡no hay una alma, mi general!
6o. ¡no hay una alma, mi general!
 
6o. nueces
6o. nueces6o. nueces
6o. nueces
 
En rescate de xochimilco
En rescate de xochimilcoEn rescate de xochimilco
En rescate de xochimilco
 
19. número de hijos por familia. alumno
19. número de hijos por familia. alumno19. número de hijos por familia. alumno
19. número de hijos por familia. alumno
 
18. la edad más representativa. alumno
18. la edad más representativa. alumno18. la edad más representativa. alumno
18. la edad más representativa. alumno
 
17. promociones. alumno
17. promociones. alumno17. promociones. alumno
17. promociones. alumno
 
16. ¿cuál está más concentrado. alumno
16. ¿cuál está más concentrado. alumno16. ¿cuál está más concentrado. alumno
16. ¿cuál está más concentrado. alumno
 
15. ¿cuál es el mejor precio. alumno
15. ¿cuál es el mejor precio. alumno15. ¿cuál es el mejor precio. alumno
15. ¿cuál es el mejor precio. alumno
 
14. ¿cuál es más grande. alumno
14. ¿cuál es más grande. alumno14. ¿cuál es más grande. alumno
14. ¿cuál es más grande. alumno
 
13. ¿cuántos de éstos. alumno
13. ¿cuántos de éstos. alumno13. ¿cuántos de éstos. alumno
13. ¿cuántos de éstos. alumno
 

6o. emiliano zapata, un soñador con bigotes

  • 1. Lectura por palabras Volver 6º- Prueba 11 Emiliano Zapata, un soñador con bigotes Elije la velocidad de la lectura V1 V2 V3 V4 V5 185 210 250 300 350 palabras por palabras por palabras por palabras por palabras por minuto minuto minuto minuto minuto Martha Laura López Coquis ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”
  • 2. Lectura por palabras Volver Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 185 ppm Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco tenía respiro. Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar en armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote, consolar a los pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una siesta. Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían sucedido muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar. Pero vayamos entrando en materia: Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la razón a los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros padres y abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos saque a bailar en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y tantísimas cosas. Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que salga un chorro de agua; había que traerla del río o del pozo. Ni imaginarse siquiera oprimir un botoncito y que se prendiera la lámpara; había que conseguir petróleo para el o cerillos para las velas. ¿Gas? No había: fogón para la comida y encomendarse al dios anti catarro al bañarse. Había tanto por hacer que los adultos no se daban abasto. que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que, entre la mala alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla. Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero ésa no se las cuento; sólo les digo que se conocieron, se enamoraron, se casaron, tuvieron hijos y una mañana de agosto, en 1879, los ojos por primera vez el pequeño Emiliano. –¿Ya viste el lunar que tiene encimita del párpado?– la amorosa y todavía adolorida doña Cleofás. –¡Cómo – el orgullosísimo Gabriel Zapata, quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo. Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan de orgullo. Profra. Martha Laura López Coquis ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”
  • 3. Lectura por palabras Volver Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 210 ppm Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco tenía respiro. Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar en armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote, consolar a los pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una siesta. Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían sucedido muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar. Pero vayamos entrando en materia: Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la razón a los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros padres y abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos saque a bailar en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y tantísimas cosas. Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que salga un chorro de agua; había que traerla del río o del o cerillos para las velas. ¿Gas? No había: fogón que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que, entre la mala alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla. Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero los ojos por primera vez el pequeño Emiliano. – – la amorosa y todavía adolorida doña Cleofás. – – el orgullosísimo Gabriel Zapata, quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo. Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan de orgullo. Profra. Martha Laura López Coquis ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”
  • 4. Lectura por palabras Volver Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 250ppm Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco tenía respiro. Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar en armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote, consolar a los pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una siesta. Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían sucedido muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar. Pero vayamos entrando en materia: Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la razón a los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros padres y abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos saque a bailar en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y tantísimas cosas. Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que salga un chorro de agua; había que traerla del río o del o cerillos para las velas. ¿Gas? No había: fogón que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que, entre la mala alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla. Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero los ojos por primera vez el pequeño Emiliano. – – la amorosa y todavía adolorida doña Cleofás. – – el orgullosísimo Gabriel Zapata, quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo. Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan
  • 5. Lectura por palabras Volver Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 300ppm Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco tenía respiro. Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar en armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote, consolar a los pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una siesta. Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían sucedido muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar. Pero vayamos entrando en materia: Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la razón a los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros padres y abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos saque a bailar en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y tantísimas cosas. Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que salga un chorro de agua; había que traerla del río o del o cerillos para las velas. ¿Gas? No había: fogón que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que, entre la mala alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla. Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero los ojos por primera vez el pequeño Emiliano. – – la amorosa y todavía adolorida doña Cleofás. – – el orgullosísimo Gabriel Zapata, quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo. Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan de orgullo. Profra. Martha Laura López Coquis ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”
  • 6. Lectura por palabras Volver Curso: 6º Prueba: 11 Título: Emiliano Zapata Velocidad: 350ppm Cuando Emiliano Zapata tenía 11 años y era nada más un niño, no un héroe que sale en los libros, tampoco tenía respiro. Desde antes de que empezara la Revolución no paraba. Se me hace que ni siquiera dormía. Entre levantar en armas a la gente, fusilar federales, pelearse con los presidentes de la república, recortarse el bigote, consolar a los pobres y, finalmente, caer en emboscadas, no creo que le haya dado tiempo de tomar ni una siesta. Ser héroe de tiempo completo debe de ser muy complicado. A lo mejor por eso mueren tan jóvenes. A don Emiliano no le dio tiempo de celebrar su cumpleaños cuarenta cuando ya había fallecido, pero le habían sucedido muchas más cosas que a mi abuelo, quien tiene 72 y ya se le acabaron las historias que contar. Pero vayamos entrando en materia: Lo que quería platicarles es medio complicado, porque los tiempos cambian y en eso hay que darle la razón a los grandes. Los niños de hoy no tenemos tantas responsabilidades como las que tuvieron nuestros padres y abuelos. Nos da tiempo de platicar, pensar en cómo hacer para que el niño más guapo del salón nos saque a bailar en la fiesta, hablar por teléfono, hacer la tarea cuando no hay nada mejor en que ocuparnos y tantísimas cosas. Pero cuando Emiliano era niño la vida era diferente. Todo se hacía a mano: nada de abrir la llave y que salga un chorro de agua; había que traerla del río o del o cerillos para las velas. ¿Gas? No había: fogón que los niños tenían muchas obligaciones, empezando por la de mantenerse vivos, lo que, entre la mala alimentación y la falta de medicinas y médicos, no era cosa sencilla. Gabriel; la madre Cleofás, y también tuvieron su historia, pero los ojos por primera vez el pequeño Emiliano. – – la amorosa y todavía adolorida doña Cleofás. – – el orgullosísimo Gabriel Zapata, quien se sentía como pavorreal porque su hijo le hubiera salido tan guapo. Y no es que fuera tan agraciado, sino que ya se sabe que los padres en cuanto ven a sus retoños se llenan de orgullo. Profra. Martha Laura López Coquis ESCUELA “TEOFILO ALVAREZ BORBOA”