1. Gaceta Médica de México
Volumen Número Enero-Febrero
Volume 137 Number 1 January-February 2001
Artículo:
Epilepsia: ¿enfermedad discapacitante?.
Tema propiciatorio para EPI-G
Derechos reservados, Copyright © 2001:
Academia Nacional de Medicina de México, A.C.
Otras secciones de Others sections in
este sitio: this web site:
☞ Índice de este número ☞ Contents of this number
☞ Más revistas ☞ More journals
☞ Búsqueda ☞ Search
edigraphic.com

2. HISTORIA Y FILOSOFÍA DE LA MEDICINA
Epilepsia: ¿enfermedad discapacitante?. Tema
propiciatorio para EPI-G*,**
Daniel Vasconcelos-Dueñas***
Resumen Summary
Las causas y los motivos que marginan a quienes The facts and causes for the margination of people
padecen epilepsia, sus problemas de adaptación that suffer epilepsy, their problems regards social
social y hasta familiar, circunstancias todas que adaptation and even familiar troubles, all together
ellos cargan desde siempre hasta nuestros días, se circumstances that they are carrying since ever in the
revisan con base en aspectos histórico-sociales y en times until nowadays, are reviewed on the basis of the
la evolución de conceptos acerca de la epileptología. social and historical aspects and the evolution of
Se plantea por qué tales opiniones se deben ideas regards epileptology. It is stated why such
reconsiderar y, en cambio, ofrecer argumentos opinions should be reconsidered and instead of
válidos para contribuir a que esas personas gocen which, to divulge appropriate arguments to realize
de aceptación general y se puedan desenvolver de la that those persons should enjoy general acceptance
manera más adecuada. and achieve the most adequate development.
Palabras clave: epilepsia, historia, problemática Key words: epilepsy, history, social and cultural
sociocultural problematic
Introducción dades vitales, tal cual eran antes de la crisis. El
suceso, por sí mismo, no produce estados lesivos
Para la pregunta: ¿la epilepsia es una enferme- demostrables en el cerebro ni, sobre todo, en las
dad discapacitante? La respuesta debería ser ne- funciones intelectivas de quien lo sufrió.
gativa. En términos generales, esto es verdad. Sin em-
¿Por qué? Porque bajo epilepsia se entiende la bargo, tanto los que atienden a personas con epilep-
aparición repetitiva de crisis o ataques epilépticos, sia como quienes la padecen, saben que no es tan
expresión de alteraciones metabólicas en las célu- cierto. Aun a pesar del impresionante incremento
las cerebrales, capaces de trastornar en forma finisecular del saber y de las posibilidades para
pasajera la armonía característica de la actividad estudiar las neurociencias y, asimismo, para diag-
cerebral. nosticar y tratar los padecimientos neurológicos, lo
Las crisis son eventos breves duran de uno a dicho se debe tomar cum grano salis pues quienes
cuando mucho cinco minutos, en general ocurren tienen crisis epilépticas se saben señalados, sien-
aisladas pero pueden repetir a intervalos imprede- ten que los evitan, no pocas veces sufren agresio-
cibles entre minutos y años, pasan solas, y cuando nes y hasta ellos mismos se pueden llegar a juzgar
terminan, el afectado pronto recupera sus capaci- incapaces.
* Presentado en la IV Reunión Internacional de Neurología y Neurociencias Escuela Militar de Graduados en Salud México D.F., 14 de Julio
de 1998.
** "Programa para Epilépticos Gratis"
*** Neurólogo/epileptólogo.
Correspondencia y solicitud de sobretiros: Ave. Baja California 1801302 México 06760 D.F. Tel.: 55643931 Fax.: 55649606
Gac Méd Méx Vol. 137 No. 1, 2001 73

3. Epilepsia, ¿discapacitante?
En consecuencia, los objetivos de esta presen- consideran tanto las modalidades de las crisis:
tación son, por un lado, comentar acerca de las convulsiones, ausencias, mioclonias, como si apa-
creencias que desde siempre han propiciado las recen a determinadas edades, o si obedecen a
limitantes impuestas a quienes tienen epilepsia trastornos del cerebro ubicados en zonas localiza-
pues, en mayor o menor grado, les han impedido das o en áreas más bien extensas, y si son conse-
desarrollar su vida con plenitud; incluso, en diver- cuencia de un trastorno cerebral identificable
sas épocas la sociedad ha observado conductas (sintomáticas) o obedecen a mecanismos aun no
denostativas, hasta letales en su contra, y por otro del todo aclarados (hidiopáticas).
lado , plantear actitudes en procura de alcanzar la De su estudio y aplicación es posible formular
premisa inicial: la epilepsia, en si misma, no se criterios que, para los fines de esta exposición,
debe considerar como una enfermedad discapa- permiten identificar cuándo las crisis epilépticas son
citante. uno más de los síntomas secundarios a estados
lesivos del cerebro. Este hecho, el daño cerebral, sí
podría implicar un cierto grado de discapacidad para
Consideraciones fisiológicoclínicas la persona enferma.
En cambio, las formas de epilepsias idiopáticas,
La historia natural de la epilepsia va aparejada aquellas donde aún utilizando los recursos más
con el desarrollo hacia el sistema nervioso central modernos para estudiar a los que las padezcan y
que existe en los seres de los niveles superiores en no se logren identificar lesión cerebral ni afeccio-
la escala animal pues, gracias a su evolución se nes sistémicas causales del fenómeno epiléptico,
forma el órgano en donde puede surgir el fenómeno en general no estarán asociadas con estados
epiléptico. Por lo tanto, en cualquier ser que tenga discapacitantes, excepto si se trata de crisis cuya
cerebro es posible generar las llamadas “descar- frecuencia sea muy elevada, la respuesta al trata-
gas paroxísticas” cuya expresión podrían ser crisis miento no sea satisfactoria o las condiciones de
epilépticas. vida del que las sufre resultaran comprometedo-
En vista de la naturaleza del tejido nervioso, ras; éstos sí podrían ser factores limitantes para
cuando éste recibe estímulos normales y apropia- desarrollar ciertas actividades, pero, en términos
dos, ya intrínsecos, fisiológicos, o los generados generales, de ninguna manera serían causa o
desde fuera del organismo, las respuestas son motivo para discapacitar a estas personas.
específicas y reflejan las funciones del área excita- ¿Por qué entonces las actitudes represivas
da. De este conocimiento se originan las ideas para hacia quienes sufren epilepsia?
ubicar, reconocer, diferenciar, entender y repre-
sentar, cual cartografía, una zonificación funcional
del cerebro. En cambio, cuando la excitación no es Reseña histórica
normal y afecta ciertos puntes del órgano, la res-
puesta obedecerá a una descarga neurofisiológica La respuesta se encuentra revisando la historia
alterada, un paroxismo anómalo, que podría gene- de ideas relativas al cerebro y sus funciones; así se
rar un ataque epiléptico. pone de manifiesto cómo la ignorancia es la princi-
Los fenómenos epilépticos tienen muchas ma- pal causa de la estigmatización del epiléptico:
neras de expresión, mismas que dependen del Durante el siglo VI a.C, en la Magna Grecia
nivel que el sujeto involucrado ocupe en la escala floreció la Escuela Itálica.2 Sus integrantes, médi-
evolutiva animal, del tipo de estímulo aplicado y del cos y filósofos, influidos por Pitágoras quien vivió en
área cerebral interesada. De aquí la diversidad de Crotona, y que entre otros pensamientos definió a
crisis epilépticas en los humanos. la filosofía como “el interés en conocer al hombre y
Esta circunstancia permite en 1989 elaborar su mundo con objeto de alcanzar una manera feliz
una propuesta de la Liga Internacional contra la de vivir para todos”, adoptaron conductas con sen-
Epilepsia (ILAE), para la llamada “Clasificación de tido humanístico para la práctica médica, contrapo-
las epilepsias, de los síndromes epilépticos y de la niendo la razón a la magia. Entre otros conceptos,
patología correlativa”.1 Para el ordenamiento se planteaban la disyuntiva salud-enfermedad como
74 Gac Méd Méx Vol. 137 No. 1, 2001

4. Vasconcelos-Dueñas D.
resultante del equilibrio de fuerzas vitales merced a el tratado “Acerca de la enfermedad sagrada”,
la relación entre elementos antagónicos como ca- donde Hipócrates rebate las creencias de conteni-
lor-frío, húmedo y seco etc., cuya observancia do mágico y supersticioso entonces aceptadas
alcanzaría el propósito de mantener la vida saluda- para explicar las crisis epilépticas. La enfermedad
ble, en estado de armonía, al cuidar p. ej. el balance sería “sagrada” por pensarla como consecuencia
entre actividad-descanso o la ingesta mesurada y de castigos impuestos por divinidades a los huma-
regular de alimentos y bebidas. Conocían de los nos, aunque también se la atribuía a ciertos usos y
órganos debido a que practicaban la disección de costumbres, por demás habituales en el ámbito de
animales e inferían para qué estarían allí. Así, la Grecia clásica. Hipócrates expuso y constató
Alcmeón de Crotona, uno de los más notables, dijo una idea genial pues, al observar que los cerebros
del cerebro ser el asiento de las percepciones de las cabras atacadas y muertas con crisis epilép-
sensoriales como la vista y el oído, situación co- ticas “...está alterado, húmedo, maloliente...”, de-
mún a humanos y animales por tener ambos unas dujo que tal estado era consecuencia de que el
cintillas que comunicaban al cerebro con ciertas órgano del pensamiento se había inundado de
estructuras; Alcmeón pudo basar estas suposicio- flema, hecho consecutivo a cambios de los ele-
nes al observar los efectos de lesiones en las mentos del cuerpo, tan natural como otros trastor-
cintillas o en los ojos u oídos; pero, además, al nos propios de diversos padecimientos, que nada
registrar las consecuencias de golpes y otros tenían de divino. Mutatis mutandi, las cabras eran
traumatismos sobre la cabeza, consideró al cere- víctimas de un proceso meningítico. De cualquier
bro como el asiento del pensar y sus expresiones, manera, en su texto Hipócrates también rebate las
aunque la capacidad de razonar sería atributo pri- otras creencias y propone conductas higiénicas y
vativo de los humanos. dietéticas para contribuir a mantener el equilibrio
Otro médico filósofo, Empédocles de Agrigento, armónico del aire con los otros elementos del
propaló la idea de cuatro elementos inalterables: cuerpo para evitar la epilepsia.
agua, tierra, aire y fuego, como los integrantes de Sin embargo, el pensamiento mágico, las su-
todas las cosas, incluso de las partes del cuerpo, persticiones y los prejuicios hacen fácil presa de
que mezclados en ciertas proporciones serían los las conductas humanas, y así la historia de los
responsables de sus texturas, consistencias y posi- epilépticos habría de continuar por caminos un
bles funciones, v.gr. el caso de los huesos y tanto bizarros.
cartílagos. Con base en este planteamiento surgió En la Roma clásica las crisis epilépticas se
en el ambiente de la Escuela Itálica el concepto de contemplaron como signo de mal agüero, y si
cuatro elementos mutantes, integrados al cuerpo, alguien las sufría durante una elección o comicio, el
cuya prevalencia en un momento dado sería deter- acto era anulado, máxime si el afectado era Julio
minante tanto para mantener estable la relación César, quien ciertamente padecía epilepsia; de allí
salud enfermedad como para matizar estados de la denominación de “mal comicial”. A este respecto
ánimo. La flema, la sangre, la bilis blanca y la negra corresponde la relación que se establecía entre
fueron los depositarios y sus efectos tan convincen- epilepsia y melancolía pues se pensaba que am-
tes que hasta la fecha se habla de temperamentos bas situaciones desembocarían una en otra y expli-
flemático, sanguinario, bilioso o melancólico. carían las peculiaridades caracterológicas del Cé-
Estos conceptos abonaron terreno para la Es- sar.4 En esa época Aulo Cornello Celso, un afama-
cuela de Cos, cuyo más insigne representante, do médico romano, planteó algo que hasta tiempos
Hipócrates, la impulsó en el siglo V a.C. Sus ideas recientes tenía cierta aceptación pues, aludiendo a
aparecen en los 72 capítulos del Corpus la supuesta benignidad de la epilepsia, Celso se
hippocraticun,3 de los cuales se piensa que sólo refería a ella como “...de larga duración y, sin
edigraphic.com
algunos, quizá cinco, sean de autoría hipocrática. abreviar la vida, se prolonga hasta la muerte...”;5
Entre ellos alcanzan particular relieve por un lado el con el tiempo, de la vox populi surgiría un “nadie
“Juramento hipocrático” pues asienta las bases muere de epilepsia”, pero las observaciones actua-
éticas para el ejercicio de la medicina que, juzgado les relativas al SUDEP: sudden unexpected dead in
con razón e inteligencia, guarda validez, y por otro, epilepsy,6 han dado lugar a otros conceptos. Por
Gac Méd Méx Vol. 137 No. 1, 2001 75

5. Epilepsia, ¿discapacitante?
otro lado, el mismo Celso preconizaba una cierta tran, primero, que Rafael debe haber tenido frente
relación entre sexualidad y epilepsia diciendo que a si alguna persona atacada de crisis como la
“..la curación del mal en los jóvenes obedecería a representada y, segundo, permiten elucubrar de
los primeros goces amatorios...”;7 esta opinión manera libre acerca del por qué del Maestro para
sigue inexplicablemente vigente y no es raro saber esa Transfigurazione. La visión metafísica de Janz
de recomendaciones para curar de epilepsia me- implica razonar y plantearse consideraciones
diante las prácticas amatorias en boca tanto de antidemoniacas en el sentido más amplio, pues
legos como de algunos facultativos. todavía hoy, contemporáneos aquejados por crisis
La fascinación que los astros celestes ejercen epilépticas, podrían estar expuestos a fetichismos,
sobre los humanos tiene muy variadas expresiones. tal cual ocurrió durante la Edad Media. En esa
De la luna se han dicho enormidades, y por cuanto época los epilépticos vivieron marcados por el
a quienes sufren epilepsia, a las fases lunares se les temor de la gente ante lo sobrenatural, lo demonía-
adjudicaba un efecto propiciatorio de crisis y esto co, la hechicería y la mala suerte. Las mujeres
motivó que a los enfermos se los llamara “lunáticos.” epilépticas serían tachadas de brujas y por eso
Tal se registra en el Evangelio según Mateo,8 capítu- quemadas, se las encerraba y si se llegaban a
lo XVII, donde aparece un hombre que se acercó a embarazar, corrían peligro de que las enterraran
buscar la curación de su hijo quien “...por ser lunático vivas. A los hombres se los expulsaba de las
constantemente se lastima al caer en el fuego, las comunidades, no sin antes castrarlos. En el sur de
piedras y el agua...”. El texto se imbrica en el pasaje Alemania y el norte de Italia se veneró a San
del suceso en lo alto del Monte Tabor, cuando Jesús Valentín como patrono de los epilépticos debido a
les anuncia a cuatro discípulos su destino próximo. que el santo sufría caídas y crisis; su nombre en
Al bajar se encuentra con el hombre, escucha su alemán antiguo era Fallentin del verbo fallen: caer.10
ruego y realiza un exorcismo para sacar al demonio Durante el Renacimiento y, gracias a las inquie-
del cuerpo del chico, curándolo; la expulsión del tudes de Paracelso, comenzaron la búsqueda y el
demonio reaviva la imagen de “enfermedad sagra- ordenamiento más sistemáticos de substancias
da” y su componente demoníaco que, para infortunio para combatir enfermedades. Pero, para los epi-
de los epilépticos, los habría de acompañar mucho lépticos, esta tendencia recién aparece a media-
tiempo. dos del XIX, cuando Lockock propaló el suminis-
La temática del capítulo está plasmada en el trarles sales de bromo, aunque él pretendía ate-
cuadro de Rafael La Transfigurazione, su obra nuarles la libido para curarlos de las crisis.11,12
póstuma, concluida sin conocerse el por qué del El desarrollo de la neurología clínica, la descripción
Maestro para realizarla con esa tónica. Sin embar- de los trastornos del sistema nervioso, la corrobora-
go, el lienzo se utilizó para presidir su velorio ción de sus funciones y las posibilidades para tratar-
cuando fallece el Viernes Santo de 1520, a los 33 los, experimenta una época de sorprendentes avan-
años de edad. ces durante el XIX y principios del XX. En consecuen-
Surgieron conocedores y estudiosos de arte cia, el abordaje de los trastornos epilépticos se modi-
con diversas explicaciones respecto al por qué, fica y los conocimientos se acumulan rápidamente,
incluso hubo quienes ponían en duda la autoría de creándose la necesidad de difundirlos e intercam-
Rafael para el total de la obra, en particular la del biarlos. Esta razón mueve a fundar la International
cuadrante inferior derecho donde aparece el chico League Agaist Epilepsy (ILAE) en el año 1909 en
cayendo en crisis. Pero el hallazgo de bocetos, sin Budapest. Esta organización está integrada por gru-
duda realizados por Rafael, rebate tales argumen- pos médicos llamados Capítulos que, en cada país,
tos. En años recientes, Janz, prestando atención congregan a quienes estudian la neurofisiología de la
precisamente a esa escena, su posible relación epilepsia y a los que la manejan clínicamente. Sus
con la imagen de Jesús levitando y juzgando la obra experiencias se comunican en reuniones locales y
con criterio gestáltico, ofrece una explicación plau- cada determinado tiempo en congresos internacio-
sible en La epilepsia vista metafísicamente.9 Tanto nales. El Capítulo Mexicano (CAMILICE) se funda en
sus razonamientos como la evidente similitud en- 1977, y dado que prácticamente se integró con toda
tre la pintura del chico y las imágenes modernas de la comunidad neurológica, ese mismo año fue reco-
pacientes mediante registros video EEG, demues- nocido de manera oficial por la ILAE
76 Gac Méd Méx Vol. 137 No. 1, 2001

6. Vasconcelos-Dueñas D.
Un punto nodal para el progreso en epileptología dades de éxito muy amplio. En consecuencia, la
lo marca Hans Berger, psiquiatra alemán, quien visión para quienes sufren epilepsias se ofrece con
buscando registrar la actividad cerebral de manera un cúmulo de condiciones para combatirlas de
objetiva, desarrolla la electroencefalografía (EEG) manera efectiva y propiciar cambios en su calidad
durante los años 30. Luego de un arranque dificul- de vida, capaces de incrementar sus oportunidades
toso, el método es reconocido y aceptado mundial- para desarrollarse personal y socialmente.
mente como un recurso indispensable para estu- Luego entonces, por qué ante la situación médi-
diar con bases fisiológicas el sistema nervioso co-científica actual, los aspectos sociales y perso-
central y, en particular, la epileptología. El EEG ha nales de quienes sufren epilepsia siguen, paradó-
resultado decisivo tanto para investigar los aspec- jicamente, en crisis.
tos básicos del fenómeno epiléptico en el laborato-
rio de neurofisiología como para apoyar las prácti-
cas clínica y quirúrgica. Consideraciones sociales13-15
La aportación de Wilhelm Roentgen a fines del
siglo XIX modificó substancialmente el panorama Para sólo mencionar algunos ejemplos, el ser
del quehacer médico. Las imágenes radiológicas epiléptico es excluyente para abrazar la carrera de
dieron explicación a muchos de los trastornos del las armas o de religioso(a); en el Talmud se esta-
sistema nervioso aunque sus alcances, incluso blece la epilepsia como un defecto e incapacidad
utilizando los llamados métodos invasivos, encon- de la mujer para cumplir con sus funciones y, por lo
traron ciertos límites. Sin embargo, el año 1972 tanto, puede dar base para el divorcio;16 obtener
marca un parte aguas para conocer sin compro- licencia para conducir vehículos está bajo reglas y
meter, pues se difunde la tomografía computada condiciones que, en los países donde las reglas
(TC) como un sorprendente primer método del -a valen, los epilépticos están sujetos a ciertas limita-
veintiocho años de distancia- tan dilatado y rico ciones o no pueden acceder a ella; las compañías
horizonte de la neuroimagenología. Por cuanto a la de seguros denegan la póliza de vida y de gastos
epileptología, las imágenes de la TC, por resonan- médicos a quienes tienen epilepsia; los códigos
cia magnética (RM) o las que ofrecen los procedi- civiles en México, si bien no marginan al epiléptico,
mientos de la medicina nuclear (SPECT), demues- tampoco lo protegen; es común que los niños que
tran en una cada vez mayor proporción de casos, convulsionen o tengan alguna otra manifestación
alteraciones intracraneales causales de diversas epiléptica terminen siendo expulsados de los plan-
crisis epilépticas y permiten dar fundamento para teles educativos; etc.
ciertas decisiones terapéuticas. Por estos motivos, y buscando ofrecer apoyo
Por lo que al tratamiento atañe, el panorama social, laboral, legal e interpersonal, en 1961 se
actual es halagüeño. Si, como se dijo antes, primero funda el International Bureau of Epilepsy, una con-
fueron las sales de bromo y luego se buscó adminis- gregación de personas NO médicos, interesados
trar fenobarbital, a fines de los 30 se introdujo la en los epilépticos y su problemática existencial.
difenilhidantoina (DFH) como el primer fármaco Las actividades de esta sociedad se reflejan en una
propositivamente cernido con objeto de usarlo como amplísima labor “pro-epilépticos” merced a sus
antiepiléptico (AE), que-con las salvedades que la ramales en muchos países. Si bien en México no
experiencia dicta, sigue entre los AE de primera existe como tal, su influencia sí se ha dejado sentir
elección. Los avances en la neurofarmacología han en algunos medios. En el CH 20 de Nov. del
generado una cascada de AE cuyo empleo razona- ISSSTE, los integrantes del Servicio de Neurología
do permite alcanzar la curación o, al menos, un impulsaron un proyecto para atender los aspectos
control satisfactorio en porcentajes muy significati- socio-familiares de los derechohabientes atendi-
edigraphic.com
vos de casos. Pero además, los progresos en el dos en él. Del equipo de neurólogos del INNN
campo de la neurocirugía, en combinación con las “Manuel Velasco Suárez” surge un llamado “Pro-
posibilidades para detectar alteraciones suscepti- grama prioritario de epilepsia”, que trabaja en diver-
bles de abordaje quirúrgico, y bajo expectativas de sas entidades tanto los aspectos médicos como
secuelas mínimas, plantean un abanico de posibili- algunos socio-familiares.
Gac Méd Méx Vol. 137 No. 1, 2001 77

7. Epilepsia, ¿discapacitante?
En lo personal, el 7 de mayo del 1997, y en función 3. Capelle W. Hippocrates; fünf auserlesene Schriften.
de los críticos caminos que han de andar quienes Frankfurt am Main und Hamburg: Fisher Bücherei K.G.,
1959.
padeciendo crisis epilépticas, carecen de posibilida- 4. Robertson M. Epilepsy and mood Ch.11. (En) Trimble
des para atenderse, no son derechohabientes del MR and Reynolds EH. Epilepsy, Behavior and Cognitive
IMSS, del ISSSTE o de alguna otra corporación, no Function. Chichister, New York, Brisbane, Toronto,
tienen trabajo, no tienen quién los oriente, se estable- Singapore: John Wiley & Sons Ltd,1988.
5. Canger R. La Epilessie. Roma: La Nuova Italia
ce un programa denominado EPI-G, que significa
Scientifica, 1996.
“para epilépticos gratis”. La idea original es poder 6. Vasconcelos D. Muerte imprevista y repentina en epi-
consultar gratuitamente al epileptólogo para obtener lepsia. Trabajos en cartel (MI-4). VIII Congreso Nacional
apoyo en los aspectos médicos, el programa fue de la Academia Nacional de Medicina. Ciudad de Méxi-
impulsad o y apoyado por los medios de comunica- co, Oct. 18-22,1999.
7. Vasconcelos D. La enfermedad sagrada. Gac Med Méx
ción, primero por la señora Ma. Victoria LLamas, lo 1982;18:35-9.
que generó una gran afluencia de personas con esa 8. De la Peña E. Evangelio según Mateo, Cap XVII. (En) Los
problemática. A la fecha, gracias a ciertas colabora- evangelios según Mateo, Marcos, Lucas y Juan. México
ciones por parte sobre todo de la industria farmacéu- D.F.: Aguilar,1996.
9. Janz D. La epilepsia vista metafísicamente: una inter-
tica, sigue funcionando y se lo pretende involucrar
pretación de la historia del muchacho epiléptico y La
con organismos que tengan capacidad para ayudar Transfigurazione de Rafael. Gac Med Méx 1994;130:44-
a resolver la problemática existencial de quienes 49.
sufren epilepsias en forma más amplia, buscando 10. Canger R. Le Epilessie: Queste Sconociute. Nifiano.
atender también los aspectos sociales. Pragma Editrice S.r.L, 1993.
11. Turner WA. Epilepsy: a study of the idiopathic disease.
En conclusión, cuando el quehacer médico se Facsimile edition. New York: Raven Press, 1973.
basa en el conocimiento adquirido merced al pen- 12. Canger R. La Epilepssie. Roma: La Nuova Italia
samiento racional que imbuye a la cultura científica, Scientifica,1996.
se alcanza la posibilidad de resolver problemas de 13. Bialik Perel R. Aspectos sociales de la epilepsia, Cap XVIII.
salud adecuadamente. En particular, por cuanto a (En) Feria Velasco A, Martínez de Muñoz D, Rubio Donnadieu
F, ed. Epilepsia; aspectos neurobiológicos, médicos y
epilepsia se refiere, esta postura da lugar para sociales. México D.F. Departamento de publicaciones
explicar lo que existe, reconocer las limitaciones, científicas, Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía,
buscar nuevas respuestas y evitar informaciones u 1997.
opiniones equívocas, avalando el enunciado inicial. 14. García Pedroza F. La epilepsia como problema de
salud pública, Cap XIX, (en) Feria Velazco A, Martínez de
La epilepsia, como tal, no se debe considerar una Muñoz D, Rubio Donnadieu D, Ed. Epilepsia; aspectos
enfermedad discapacitante. neurobiológicos, médicos y sociales. México D.F.: De-
partamento de publicaciones científicas, Instituto Na-
cional de Neurología y Neurocirugía, 1977.
Referencias 15. Olmos G de A G, Rivera Olmos V. Aspectos legales de
la epilepsia, Cap XX, (en) .Feria Velazco A, Martínez de
Muñoz D, Rubio Donnadieu D, Ed. Epilepsia; aspectos
1. Proposal for Revised Classification of Epilepsy and neurobiológicos, médicos y sociales. México D.F.: De-
Epileptic Sindromes. Epilepsia 1989, 30:4;389-99. partamento de publicaciones científicas, Instituto Na-
2. Margotta R. An Illustrated History of Medicine. Feltham, cional de Neurología y Neurocirugía, 1977.
Middlesex, Arnoldo Mondatori –Ceam- Milano, 1967. 16. Enciclopedia judaica Jerusalén, 1972;6:126-29.
78 Gac Méd Méx Vol. 137 No. 1, 2001