El documento contrasta las características de una mujer fuerte con las de una mujer de fortaleza. Mientras una mujer fuerte se enfoca en su propia confianza y seguridad, una mujer de fortaleza demuestra valor a través de su fe en Dios, da lo mejor de sí misma a los demás, y aprende de sus errores. El documento concluye orando para que Dios les enseñe a ser mujeres de bendición para los demás y de fortaleza a través de su sabiduría y gracia.