1. Antonio Maura (1853-1925)
Natural de Palma de Mallorca. Estudio Derecho e inició
su actividad política vinculado al Partido Liberal, con el
que ocupó cargos de importancia, como el de
Ultramar (1892) y de Gracia y Justicia (1895).
Pero en 1902 se incorporó al Partido Conservador,
tras un acuerdo con Silvela, bajo cuya presidencia
fue ministro de Gobernación. Tras la dimisión de
Silvela como jefe del Partido Conservador, le sucedió
en el cargo y presidió dos gobiernos (1903-1904 y
1907-1909). Los sucesos de la Semana Trágica le
obligaron a dimitir, y se retiró del poder durante largo
tiempo. Antes de la dictadura de Primo de Rivera
volvió a presidir tres breves gobiernos (1918, 1919
y 1921-1922) Se dedicó en sus últimos años de vida
a redactar sus memorias y al placer de la pintura,
muriendo en Torrelodones el 13 de diciembre de 1925.
Estuvo plenamente identificado con el ambiente
regeneracionista imperante a comienzos de siglo,
su proyecto político de “revolución desde arriba”
partía de la necesidad de reformas urgentes en un
sistema político y una administración desvencijada y corrupta.