La magnetoterapia utiliza campos magnéticos de baja intensidad para mejorar la calidad de las células y combatir el dolor. Alivia problemas en la piel, sistema nervioso, aparato respiratorio y articulaciones. No se recomienda para personas con hipotensión, hemorragias, marcapasos o enfermedades virales. Se aplica mediante dispositivos magnéticos y está respaldada por estudios de expertos en biomagnetismo y la NASA.