Ebook el amor y tus enredos mentales

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El Amor y otros enredos emocionales
Dr. Rafael Ramos
El Amor y tus
enredos mentales
Dr. Rafael Ramos
Guía práctica para ser feliz en el amor.

Dr. Rafael Ramos
TABLA DE CONTENIDOS
Primera parte: Conocerse a sí mismo.
• Paso 01. Amar o estar solo para no salir lastimado.
• Paso 02. Bienvenida la soledad.
• Paso 03. Es necesario amarse a uno mismo.
Segunda parte: Cerrar ciclos.
• Paso 04. Volver a creer en el amor después de una mala historia.
• Paso 05. ¿Cómo quiero ser amada o amado?
• Paso 06. ¿Cómo se puede diferenciar el estar enamorado/a de la atracción?
• Paso 07. Añorar un amor perdido
• Paso 08. Te amo, pero no sé…
Tercera parte: Reconocer nuestra dignidad.
• Paso 09. Resignarse o realizarse en el amor.
• Paso 10. ¿Se puede salvar una relación, cualquiera que sea?
• Paso 11. El apego y la dependencia nunca serán amor.
Cuarta parte: Si no sirve, se deja; si vale la pena, se nutre.
• Paso 12. Relaciones tóxicas.
• Paso 13. Si me diera la oportunidad de demostrarle todo mi amor…
• Paso 14. Las dictaduras emocionales en las relaciones de pareja.
• Paso 15. Te dejé de amar porque:
• Paso 16. ¿Perdón y segundas oportunidades?
• Paso 17. En el amor, ¿busco lo que yo quiero?, ¿acepto lo que me ofrecen?
• Paso 18. Fastidiar o construir en una relación.

Dr. Rafael Ramos
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NOTA PRELIMINAR
¡Hola! Gracias por descargar este pequeño e-book. En mi sitio podrán buscar una serie de
artículos y temas relacionados con el desarrollo emocional, todo lo cual estará orientado a:
• Comprender el origen de nuestras emociones.
• Descubrir cómo sanar nuestra historia.
• Desarrollar un sentido práctico hacia la vida.
• Aprender a soltar y ver la vida como un proceso que podemos moldear, no como la suma de
una serie de acontecimientos que nos determina limitando nuestras opciones.
El amor y otros enredos emocionales es una compilación de pequeñas reflexiones que he or-
ganizado como pasos fundamentales que necesitamos tener claros en el juego del amor para
desarrollar emociones y relaciones sanas; espero que les guste.
Me gustaría conocer sus opiniones y sugerencias, por lo que los invito a revisar y comentar lo
que leerán.
¡Muchas gracias y reciban una cordial bienvenida a mi blog!

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PRIMERA PARTE:
CONOCERSE ASÍ MISMO.
Caminar por la vida sin una visión clara de nosotros mismos nunca nos va a acercar al camino cor-
recto porque caminamos sin la claridad de nuestra luz interior
¿Cómo amar a otros si nos sos capaz de definir cuánto te amas a vos mismo?
Paso 01.
Amar o estar solo para no salir lastimado
Amar a otro es básico y bello en la vida, pero el amor maduro requiere autoconocimiento, es decir,
saber cómo soy yo, cuáles son mis miedos y si hay historias que no he resuelto del pasado.
Si una persona entra en una relación esperando que el otro la salve, la haga feliz, llene sus vacíos y
la compense, está depositando en ese otro un peso que quizá no pueda cargar:
• Amar con libertad implica hacer un reconocimiento de las fortalezas y de las cosas que
tienen que sanar.
– ¿Tiene usted esto claro? ¿Sabe lo que tiene que mejorar? Este paso es básico.
• Amar con madurez es reconocer qué puede usted aportar al otro, no qué le puede dar el otro a
usted.
– Si una persona entra en una relación con usted ¿Qué gana esta persona? ¿Qué le
aporta usted a la vida de los demás?
• Amar con consciencia implica tener claro qué es lo que se desea más que lo que no se quiere,
pues a veces las personas buscan a otros completamente distintos a lo que creen que les hace
sufrir, pero no se fijan en lo que desean o en quién es el otro realmente.
– ¿Qué busca en la otra persona? Cuando usted dice que ama a otro ser humano,
¿cuál es el origen de esos sentimientos?, ¿qué lo motiva a establecer esta relación?,
¿es la convicción o la necesidad de estar con alguien?
• Amar con transparencia es ser honesto, claro y directo sin que el otro tenga que adivinar qué es
lo que usted espera, siente y desea con respecto a la relación.
– Para ello es fundamental que usted tenga claro qué va a aportar. ¿Se considera una
persona sana para poder amar?

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Sí se puede amar, pero se tienen que hacer buenas elecciones y, sobre todo, sanar emociones.
Cuando una persona contempla la posibilidad de amar a otra persona, tiene que trabajar mucho en
resolver estos temas:
• Miedo, que paraliza: solo nos hace perder tiempo o crear problemas sin sentido.
• Dudas, que crean fantasmas: cargan las interpretaciones con reacciones insanas, como
berrinch es y reclamos absurdos.
• Ideas, que ponen a la defensiva todo el tiempo: tan solo porque usted es portador de una serie de
recuerdos y experiencias que le hacen ver la vida en grises.
• Dolores, que no supera: son su responsabilidad, nadie puede sanarlos por usted.
• Tristezas, que llegan todo el tiempo: la tristeza tiene que ser reflexiva y creativa para movernos
del dolor a la esperanza; ha de implicar acciones concretas para sanarse; si no es así, lo que
usted hace, cargar ese dolor, no tiene sentido.
• Ansiedad, que crea patrones de control: esto lo lleva a ser una persona tensa, cargada y
problemática.
- Celos, que se usan como mecanismo de protección: solo cargan la relación de tensión y de
cosas absurdas y sin sentido.
Frente a todo esto, el tema no es pensar si se puede amar otra vez, porque esto, claro, es posible;
pero se debe sanar el corazón para ver la vida desde una óptica más equilibrada.
Si usted quiere recomenzar una relación, primero tenga una relación sana con su historia, porque si
no, es probable que se repitan las malas vivencias.
Ejercicio de reflexión: analice sus miedos
1. ¿Adónde lo llevan?
2. Estos son tan grandes como usted lo permita.
3. Nada se vuelve realidad a no ser que nosotros mismos lo alimentemos.
4 ¿Se va a quedar ahí esperando que algo mágico le resuelva la vida?
5. ¿Cree que viendo la vida con reparos, estando a la defensiva, va a llegar a la montaña de la satis-
facción personal?
Paso 02.
Bienvenida la soledad
Un elemento central del desarrollo personal es llevar una vida que tenga sentido para cada uno de
nosotros, es decir, que sea significativa, que tenga un color agradable y que huela a paz; esto no es
el resultado de adaptarse a las circunstancias, sino de moldear nuestras actitudes dándole forma a

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nuestra vida, otorgándole forma, sentido y contenido creados por nosotros mismos.
Yo invito a ver la vida como un lienzo, una hoja de papel sobre la cual usted puede hacer el diseño
que desea; habrá momentos en los que tendrá que replantearse las cosas una y otra vez, pero
eso no significa que vaya por el mal camino o que este perdido, siempre y cuando su centro sea la
búsqueda de la paz y la realización.
Es por ello que en el amor tenemos que abrazar la soledad como un proceso de crecimiento person-
al, sobre todo cuando hemos tenido una o varias historias cuyos resultados no han sido positivos.
No le tenga miedo a la soledad, este proceso es uno que tiene mucho que aportarnos cuando es
leído con realismo y sin miedos. Los invito a tomar los siguientes ejes como un guion de vida, como
un reto reflexivo que nos tiene que conectar con nuestro ser interior:
1. Bienvenida la soledad que frente a una crisis nos hace revisar lo que realmente es
importante en la vida.
2. Bienvenida la soledad que nos hace ver nuestros apegos y dependencias como retos para
ser superados.
3. Bienvenida la soledad que nos hace darnos cuenta de que estábamos perdiendo el tiempo
con una persona incorrecta.
4. Bienvenida la soledad que nos libera de una idea que no existe y nos confronta con una
realidad que duele, pero no mata.
5. Bienvenida la soledad que nos hace darnos cuenta de lo testarudos que somos, por lo que
no podemos abrirnos a la vida.
6. Bienvenida la soledad que nos hace creer que lo mejor está por venir toda vez que
trabajemos por ello.
7. Bienvenida la soledad que nos hace creer que la vida está en nuestras manos y no en las de
otros.
8. Bienvenida la soledad que nos recuerda que antes de este apego, esas personas no existían
en nuestra vida, tienen el papel que nosotros les queremos dar.
9. Bienvenida la soledad que nos hace darnos cuenta de que de amor uno no se muere, solo
pasa una mala temporada.
10. Bienvenida la soledad que nos pone de frente a la inmadurez e impulsividad de nuestras
decisiones.
11. Bienvenida la soledad que nos lleva a revisar hacia adentro y no buscar culpables más allá
de nosotros.
12. Bienvenida la soledad que nos hace creer en la vida cuando nos permitimos observar que
somos nosotros los que construimos lo que sucede, que somos responsables de lo que está
por venir.

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Ejercicio de reflexión
¿Estás listo para darle la bienvenida a la soledad?
• ¿Por qué te asusta?
• ¿Por qué huís de la soledad?
• ¿Qué beneficios te puede aportar?
• ¿Por qué te decís a vos mismo que necesitás estar con alguien?
• ¿Quién dice que si no estás con otro ser humano la vida tiene que ser oscura y gris?
• Cuando te has dicho “sin él o ella me muero”, ¿realmente lo decís en serio?, ¿cómo sobre
viviste tantos años antes de conocer o estar con esta persona?
Paso 03.
Es necesario amarse a uno mismo
Hemos revisado dos pasos previos:
1. Comprender que amar no tiene por qué implicar dolor
2. Aprender a ver la soledad como un proceso sano de crecimiento personal.
Estos dos pasos tienen como propósito ponernos frente a un reto emocional central en la vida, el
cual es amarla. Las razones:
• Porque nos amamos a nosotros mismos.
• Porque es única e irrepetible.
• Porque solo tenemos el presente.
• Porque tenemos que hacer que cada minuto cuente.
Vivir sin miedos y sin dependencias emocionales que nos atrapen en procesos de tristeza, dolor,
dudas e incertidumbre es central en la vida; este proceso nace en la “Autoestima”.
Autoestima. Tema muy sonado en nuestros tiempos, para muchos ya agotado y trillado. No obstan-
te, a mi criterio no es tema acabado, pues constantemente me toca ver personas que se paralizan
frente a su propia vida:
• Temen al fracaso.
• Son dependientes.
• Se sienten menos que los demás.
• Piensan que les falta algo.
• Se especializan en verse defectos.
• Sueñan con una vida que no tienen.
• Sus palabras expresan negatividad.
• Sus acciones solo los paralizan.

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En fin, razones hay muchas, lo que quiero plantear es que es necesario aprender a amarse a uno
mismo, como la base de cualquier proceso de crecimiento personal y de desarrollo de vínculos sanos
a nivel interpersonal.
• Solo cuando reconocemos nuestro valor, nos damos cuenta de aquello que merecemos
• Solo cuando somos capaces de ver la vida como un proceso de toma de decisiones y acciones es
que le podemos dar un nuevo curso a la historia, que podemos llevar a cabo acciones con sentido.
• Solo cuando reconocemos nuestro valor le ponemos límites a todo aquello que nos lastima, nos
estanca o no nos hace crecer.
Una persona con una pobre autoestima, es una persona que puede llegar a ser celosa o dependi-
ente, agresora, sumisa, pasiva, poco proactiva, negativa, etc.
La importancia de este proceso radica en que la autoestima no puede verse solo como
un proceso que resultante de una serie de estímulos a lo largo de la vida, sino todo lo
contrario; lo que quiero plantear, es que es necesario ver la autoestima como un
proceso de responsabilidad personal.
Puede que algunos no estén de acuerdo, pero creo que si cambiamos la concepción y empezamos a
ver la autoestima como un proceso de desarrollo personal, quizá se rompan las cadenas de justifica-
ciones que atan a muchos:
• “Es que como a mí no me chinearon, yo no sé querer”.
• “No quiero tener pareja porque me ha ido mal en la vida, mejor me hago a un lado”.
“Me gustaría ir a la U, pero yo soy el lento de la familia”.
• “Quiero, pero no sé si puedo”
En fin, una y mil frases como estas rondan en nuestra cabeza, tristemente desde nuestras primeras
etapas en la vida. Ciertamente la influencia negativa de los otros en la vida personal deja huellas,
heridas que a veces nos cargan de desconfianza, temor, angustia y desmotivación, pero:
• ¿Qué pasaría, si cada uno de nosotros se preocupara por desarrollar un proceso de perdón para
con su vida y los demás?
• ¿Qué pasaría si dejamos de pensar en lo que salió mal?
• ¿Qué pasaría si dejáramos de pensar en lo que nos enseñaron mal?
• ¿Qué pasaría si le damos la espalda a lo negativo y nos abrimos a disfrutar más de lo bueno que
cada uno posee?
Claro, responder esta pregunta implica:
1. Dejar de ver la vida como una recopilación de dolor, vacíos y carencias.

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2. Dejar atrás lo malo, el dolor, la angustia; no significa que debemos olvidar, sino todo lo contrario:
hay que recordar sin dolor, teniendo claro no lo que paso, sino cómo sobrevivimos a ello.
3. Abrirse, a partir de la conciencia de necesidad, a definir lo que quiero y no lo que no quiero. Hay
muchas personas que tienen claro en la vida qué no desean, pero no le dan importancia a la búsque-
da de lo que realmente anhelan, es decir, se cae en un círculo de autojustificaciones que es engaño-
so y a la vez paralizante.
4. Aprender a quererse uno mismo no es un acto egoísta, que nos debe llevar a ponernos encima de
los demás.
a. Es darle valor a mi sentir, a mi historia, a mis habilidades, destrezas, gustos y preferencias.
b. Es poner límites, tener claro lo que me voy a permitir y lo que no, a nivel interpersonal e
intrapersonal.
c. Es darse una posición en la vida que me permita poner a producir los denarios, no enterrar
los y conservarlos por miedo.
5. Esto implica sentir respeto por mi cuerpo, mi mente y mi alma, más allá de solo pensar en ellos,
pues se trata de un llamado a cambiar de vida cuando en ella haya hábitos insanos, es abrirse a
hacer deporte, cuidar la alimentación, es elegir sanamente y en función de nosotros mismos.
6. Amarse a sí mismo plenifica las relaciones sociales, familiares y de pareja, pues se comparte des-
de la sensación de tener claro un valor, una identidad que está en equilibrio en el tanto la persona se
permite desarrollar su potencial.
Cada uno es responsable de identificar, discriminar y entender cuáles son sus emociones, así como
desde dónde y por qué se siente de una forma u otra; de esta forma se empieza a pensar diferente,
una cosa es entender por qué tiene uno un vacío, una cicatriz emocional, y otra es pensar que por
eso quedamos mutilados. Hay situaciones duras, que arrastran consecuencias, pero eso no significa
que estas van a estar ahí siempre; estas situaciones serán grandes o pequeñas de acuerdo con la
forma en que cada uno las alimente.
En suma, amarse a uno mismo es importante porque nos hace capaces de amar con libertad, sin
ataduras ni vacíos que nos esclavizan y paralizan.
• ¿Cómo sos vos realmente?
• ¿Cuántas veces has actuado para complacer a los demás?
• ¿Estás seguro de que no sos capaz de hacer algo? ¿O es que tenés un “no” programado en la
cabeza? O sea, ¿estás lleno de excusas?
• Si no te gusta lo que sentís por vos mismo, ¿por qué buscás afuera lo que sabés que has cultivado
por años en tu interior?

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SEGUNDA PARTE
CERRAR CICLOS.
“Cuando dejamos las puertas entreabiertas para la ilusión perdida, solo avivamos el fuego de los
dolores del pasado”
¿No estas harto de tus lamentaciones?
Si no funciono, ¿por qué paralizarme en el presente por algo que no era sano?
Paso 04
Volver a creer en el amor después de una mala historia
Este es un reto personal:
• ¿Te ha ido mal una y otra vez?
• ¿La historia de amor siempre termina mal?
• ¿Se mueren las ilusiones y nace el dolor?
• Después de la fase inicial, ¿no queda claro por qué tenés que seguir ahí?
Estas son tan solo 4 preguntas de las decenas que podríamos hacer. ¿Te fue mal? Básicamente hay
dos opciones:
1. Supera, aprende y toma nuevos riegos.
2. Llorá, amargate, victimizate, y seguí igual, repitiendo el mismo ciclo una y otra vez.
Pobre sea el amor, pobre este sentimiento a la vez anhelado y odiado, pobre el amor al que se le cul-
pa como si actuara solo, como si robara nuestra voluntad, como si fuera un karma negativo asociado
al dolor.
Al amor lo culpamos de tantas cosas… como si fuera un personaje, como si fuera una persona; en
realidad todos tendríamos una deuda enorme con dicha persona, pues a veces le decimos que es
imposible, dejamos de creer en ella, le ponemos los apellidos de traición, mentira o angustia y le
adjudicamos características de tensión, estrés, desconfianza, control, celos, inestabilidad, molestias
recurrentes… en fin, pobrecito el amor. Algo que debería ser muy bueno, lo asociamos, muchas
veces de forma distorsionada, a cosas tristes que nos dejan huellas de angustia.

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1. Volver a creer en el amor es un proceso de responsabilidad personal, un reto constante en la vida,
sobre todo cuando nuestras historias afectivas han tenido capítulos de terror, finales de suspenso
y ciencia-ficción.
a. Si usted mete cabeza en el mismo estilo de relaciones disfuncionales ¿por qué culpa al
amor?
2 Volver a creer en el amor implica comprender la situación, el contexto y las elecciones que le han
dado forma a nuestros estilos de ser y estar en nuestras relaciones.
a. ¿Es sencillo darse cuenta? Claro que sí, usted sabe que le fue mal ayer, le fue mal hoy, hace
una semana estaba mal, hace un año igual, los problemas se repiten una y otra vez, ni vos ni
tu pareja resuelven el tema, es más, lo agravan, lo hacen más grande y más complejo, pero
claro, es más fácil decir que es culpa del amor, en lugar de decir que somos nosotros, usted y
yo, los que hacemos que el amor se enferme, se muera y a veces tenga matices de película de
ciencia ficción.
3. Volver a creer en el amor implica reconocer que muchas veces nuestra dependencia nos hace
aceptar condiciones que no son dignas de un ser humano, pasamos rogando o recibimos
humillaciones, y por todo eso culpamos al amor.
a ¿Duele? ¿Huele mal? ¿Hay paciencia – prudencia – racionalidad? ¿De verdad no sabe por
qué no está funcionando? Hay preguntas clave:
i. ¿Disfruta su relación todo el tiempo?
ii. ¿La relación es buena siempre o solo a veces?
iii. ¿Cree usted que vale la pena?
iv. Si cree que vale la pena, ¿por qué duda todo el tiempo?
b Parece que no es tan difícil asumir que las cosas van mal. Si no se visualizan soluciones,
todo lo contrario, solo complicaciones, ¿por qué tantas dudas?
4. Volver a creer en el amor implica reconocer cómo se construyó ese amor. Hay amores que se
construyen en segundos: las personas no se conocen, todo lo fundamentan de forma precipitada
y aún así ya proyectan una vida juntos. Las esperanzas crecen como la espuma y todo para luego
culpar al amor.
5. Volver a creer en el amor exige, aceptar que hemos llamado amor a cosas que no lo son, por
ejemplo:
a. Amor no es atracción.
b. Amor no es encontrar a alguien que nos saque de la rutina.
c. Amor no significa tener buen sexo.
d. Amor no significa estar simplemente porque he construido una visión pobre de mi vida con
miedo a la soledad y muchos otros fantasmas.

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El amor no nos hace nada:
1. El amor no es el que miente.
2. El amor no es el que traiciona.
3. El amor no es quien irrespeta.
4. El amor no es el que nos causa una vida llena de tensiones, conflictos y malos tratos, son
las personas con las que hemos intentado construir una relación las que no saben amar.
Volver a creer en el amor requiere un ejercicio de autoanálisis y una crítica personal orientada a no a
crear culpas, sino reconocer nuestros patrones de conducta que construyen malas relaciones.
1. Nos peleamos con el amor porque nos resulta más fácil aceptar esto que reconocer que es nues-
tra vida la que está mal; los hechos nos lo dicen, entonces ¿por qué te peleás con el amor?
2. Volver a creer en el amor implica:
a. Tener la capacidad de ponerle nombre a cada problema.
b. Implica tener la capacidad de comprender el origen de cada situación difícil, observar y analizar
con mucha agudeza si nos hemos enfocado en resolver o le hemos dado cabida al sufrimiento y el
pensamiento mágico, que desde la ilusión absurda nos hace pensar que un día vamos a estar mejor.
Deje de pelear:
1. No se pelee con la vida.
2. No se pelee con usted mismo.
3. No se pelee con las personas con las que ha tenido una mala historia.
4. No se pelee con su historia de vida o con las circunstancias que lo han
llevado a construir un modelo de relación insano.
5. No se pelee con su historia para nada, observe, analice y tome decisiones.
Solo cuando somos capaces de llamar a las cosas por su nombre podemos establecer oportuni-
dades de crecimiento para reconstruir la confianza en nosotros mismos y la confianza en las rela-
ciones afectivas.
• De verdad, con la mano en el corazón, ¿le sorprendió todo ese sufrimiento? o ¿prefirió hacerse el
de la vista gorda?
– Usted lo sabe, ¿verdad?
– ¿Usted le conto a todo el mundo lo mal que estaba, pero quiso seguir ahí?
– Si es así, ¿por qué se queja?
– Aprenda, asuma y resuelva.

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Paso 05.
¿Cómo quiero ser amada o amado?
Esto es una pregunta que normalmente no se hace al inicio de una relación, sino que se hace frente
a la frustración de los problemas que se presentan una vez que se ha establecido el vínculo. Esta es
una pregunta realmente importante. Veámoslo de esta forma: cuando usted va al supermercado sin
una lista, ¿qué pasa?
• Se llena de cosas que no necesita.
• Gasta de más, muchas veces en tonterías.
• Da vueltas por los pasillos de forma desordenada, pensando una y otra vez en lo que no quiere
olvidar, pero ni siquiera ha definido realmente qué precisa.
• Pierde el tiempo, da muchas vueltas.
• Se permite ver cosas una y otra vez hasta convencerse de que sí las necesita.
• Sigue en ese proceso, gasta dinero y tiempo, se torna impulsiva… usted lo sabe y sigue haciendo
lo mismo.
• Al llegar a casa y ver lo que compró, se da cuenta de que le faltan cosas, y de que muchas de las
que compró no tienen sentido
• Pero cuidado: ya gastó el dinero en todo esto.
Bueno, hay muchos que inician proyectos afectivos sin darse cuenta realmente de qué desean y de
cómo quieren ser amados, pero aun así entran en relaciones donde:
• Lo dan todo… ¡suave!, ¿quién le pidió eso?
• Lo entregan todo, se quedan sin nada, ¿por qué culpa a la otra persona?
Esta fue su elección.
• Construyen castillos de fantasía, aun cuando la realidad dice otra cosa.
Entonces, ¿por qué se queja cuando decide abrir los ojos?
Lamentablemente, la atracción o el evadir la soledad, por citar solo dos de las diversas causas que
pueden motivar una relación, muchas veces son la norma sobre la cuales se construye una relación:
Encontramos a alguien, nos cambia un poco la agenda, o nos parece bonito/bonita y entonces
invertimos tiempo involucrándonos con esta persona, nos abrimos a una sexualidad activa,
hacemos todos lo posible para estar con esa persona, pero no nos preguntamos cómo
queremos ser amados.
Esto va más allá del simple decir “me gusta que sea lindo, buena gente, atractiva, que estudie y tra-
baje”. No, eso es parte del modelo básico, que no podríamos negociar para establecer una relación.
¿Cómo quiero ser amado? Hay que tener las cosas muy claras. ¡Qué bonito sería que podamos
definir sin culpas y sin dependencias un amor sano!, así no habría tanto cabo suelto en la mente y el
corazón de muchos

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1. Quiero un amor sin miedos, sin tonterías de “te amo pero no estoy listo”.
2. Quiero un amor alegre, no un amor con una persona irritable, caprichosa molesta y complicada.
3. Quiero un amor bonito, que le aporte brillo y color cálido a mi vida, un amor de colores de vera
no, no un amor de colores de invierno frío, triste y oscuro.
4. Quiero un amor que sepa a dulce, no que me dé tragos amargos, sencillamente porque la
persona se especializa en molestar y fastidiar.
5. Quiero un amor espontáneo, que haga de nuestra rutina algo agradable y constructivo.
6. Quiero un amor que se siente orgulloso de mí, no que me esconda.
7. Quiero un amor de verdad, que no se avergüence de todo lo que he sido. Póngale nombre a la
relación, no busque un amor confuso y cargado de inseguridades.
8. Quiero un amor de esos que hacen planes, tienen agenda y construyen posibilidades.
9. Quiero un amor de verdad, que diga “perdón me equivoqué” y que con humildad se pueda
corregir y hacer crecer.
10. Quiero un amor de esos con los que se puede soñar y planear, porque se tiene certeza de
por qué está en nuestra vida.
Ejercicio de reflexión.
• Si ya le ha ido mal antes, ¿por qué no responde esta pregunta antes de empezar de nuevo?
• Si lo que le ofrecen no es lo que quiere, ¿por qué insiste en seguir en lo mismo?
• Si lo que usted añora cada día está más lejos, ¿por qué corre de rodillas a buscarlo?
• Si lo que usted busca no lo encuentra en esa relación tortuosa y sin sentido, ¿por qué sigue ahí?
Paso 06.
¿Cómo se puede diferenciar el enamoramiento de la atracción?
Este binomio “atracción versus enamoramiento”… ¿Cómo entenderlo?, ¿cómo resolverlo?,
¿cómo asumirlo? Debería ser un concepto muy simple, tendríamos que tenerlo muy claro. Bueno,
vamos a tratar de explicarlo.
1. Atracción tiene que ver con “me gusta”, “me encanta” “me atrae” “se ve bien”, podemos agregarle
“me divierte”, “me hace reír”; esto va a implicar una serie de emociones positivas y, ¿por qué no?,
hasta algunas ilusiones que nos pueden hacer pensar y creer que la relación con esta persona po-
dría funcionar.
a. En la atracción se ve lo rico, se omiten los defectos.
b. En la atracción se justifica lo complicado, pues se espera que a partir de la ilusión las
cosas sean maravillosas
c En la atracción, como el estuche es agradable, se cree que viene con garantías.

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2. A partir de este primer impulso que nace en la atracción, toda persona debería permitirse un acer-
camiento paulatino, progresivo, pausado, para verificar si aquello que le atrae es lo suficientemente
bueno para poder establecer una relación. ¿Cómo determinamos esto?
No basta la atracción; tenemos que evaluar si esta persona, aparte de resultarnos atractiva, es una
persona estable, con valores y principios similares a los nuestros, si tiene una historia emocional
que ayude al establecimiento de una nueva relación, si está en la misma frecuencia, es decir, no se
puede establecer una relación si uno va para el norte y el otro para el sur:
En la atracción es difícil pensar con claridad, normalmente nos exponemos a situaciones tan absur-
das como estas:
a. “Yo quiero una pareja, pero esta persona dice que no quiero nada serio”.
b. ¿Quiere hacer el amor, él quiere tener sexo? Si no hay una relación afectiva, siempre va a
ser sexo.
c. “Me gusta mucho, pero dice que no sabe qué quiere”.
d “Me encanta, pero él o ella dice que me quiere solo para sí, que no le gustan mis amigos”.
Estas cosas parecen muy claras, ¿verdad? Usted las sabe, las vio, las palpó, entonces, ¿por qué
duda entre la atracción y el enamoramiento? Un momento, ¿de verdad usted se convence al decirse
“Es que no sabía” o “yo me imaginé otra cosa”? Usted se niega a aceptar que este proyecto de amor
que nació desde el primer contacto no haya funcionado. Si esto es así:
• Deje de llorar, aprenda.
• Deje de renegar, aprenda.
• Deje de maldecir, aprenda.
• Deje de autoengañarse, aprenda.
• Deje de esconderse en el hueco de sus miedos y tristezas, aprenda.
• Deje de construir castillos en el aire, aprenda.
En la etapa de atracción, es decir las fases iniciales, se debe observar y evaluar muy bien a la otra
persona.
Si lo que se ve no es lo que se quiere, cuidado con llamar a esto amor.
El enamoramiento es un enorme conjunto de emociones que tiene que ver con sentimientos de:
• Bienestar.
• Alegría.
• Deseos.
• Motivaciones.
• Ilusiones.
• La lista es enorme, cabe todo lo que la mente pueda imaginar.

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Las emociones iniciales, son el motor impulsor para poder estar con otra persona, pero esto no de-
bería estar asociado a esta primera etapa de atracción, sino que debería surgir con posterioridad a la
evaluación de la persona. Recordemos:
• Algo bonito no necesariamente es bueno.
• Algo que nos guste no necesariamente es algo que tenemos que tener en la vida.
• Algo que nos haga reír no significa que nos va a hacer felices, pues puede ser que esta per-
sona tan solo nos ofrezca momentos y una relación no es de momentos.
Creo que a partir de la atracción las personas construyen con mucha frecuencia ilusiones que están
ahí pero que no pasan por el filtro de la razón y se permiten enamorarse, pues como dice un princip-
io “a mayor frecuencia de contacto mayor probabilidad de vinculación afectiva”; esto definitivamente
no ayuda.
La emoción tiene que estar ligada a la razón, a los hechos, al conocimiento que se ve en la conducta
y forma de ser del otro y la otra, cuando dejamos que sea la emoción la que nos guíe establecemos
relaciones impulsivas, que no son para nada constructivas; involucrar el afecto sin evaluar puede ser
un proceso muy riesgoso
Ejercicio de reflexión:
¿Qué opina?
• Quizá usted ha llorado por amor, pero si lo analiza a fondo, quizá era pura atracción, quizá fueron
emociones que no llegaron a ser maduras, tan solo se volvieron importantes porque con ellas usted:
– Llenó sus vacíos.
– Llenó sus carencias y frustraciones.
– Llenó su agenda.
– Llenó sus fines de semana.
– Llenó unos años, meses o semanas de su vida.
• Véalo a fondo, sin miedo, sin tapujos: ¿de verdad su relación valía tanto la pena?
Paso 07.
Añorar un amor perdido
Esta expresión es más frecuente de lo que nos imaginamos, pero ¿por qué tiene que ser así? En
temas de afecto, estamos programados para vivir en el drama, en la lucha, en la esperanza de la
resurrección de los muertos y, hasta dónde yo sé, esto solo lo hace Dios, no otro ser humano. Pero
resulta que usted, después de una mala relación donde quizá hubo algunos buenos momentos, se
estanca:

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• Recuerda aquella canción y aquel beso que supo a miel, pero ¿por qué, si los demás
sabían a hiel?
• Recuerda los primeros meses, pero ¿por qué, si los siguientes años fueron un tormento?
• Usted dejó de ir al cine porque sin él o ella, nada tiene sentido.
• Dejó de bailar, porque para usted nadie baila como su expareja, ¿tiene sentido todo esto?
• Dejó de hacer cosas que a usted le encantaban, porque ahora cree que si no las hace con su
ex, no será igual.
• Dejó de crecer, porque usted es de los que ha creído que todo era para su pareja.
Cuando se ha construido una historia de amor en la que se ha tenido múltiples capítulos hermosos,
comprender la ruptura y asimilar que ya no se va estar juntos no es un tema de sencilla resolución,
porque ante el dolor de la pérdida en nuestra imagen mental quedan los buenos momentos y esto
con frecuencia nos afecta para ver la realidad.
Ante esto, es importante recordar que hay razones que nos llevaron a la ruptura. Pueden ser múl-
tiples razones que de una u otra forma le dieron sustento a nuestra actual situación: nuevamente
estamos solos. Si la ruptura es definitiva ha quedado claro que no se va a continuar, por lo que hay
que procurar tener en nuestra mente y nuestro corazón lo siguiente
1. Pretender regresar porque los buenos momentos hacen falta es solo una visión parcial de lo que
fue la relación, este es el momento de tomar papel y lápiz y hacer un balance real.
a. No se trata de hacer daño recordando lo malo, es tener muy claro todo lo que sufrimos. Si no
sirvió en el pasado y en el presente, añorar un amor sano con la misma persona en
un futuro es casi como esperar que la luna algún día se case con el sol.
2. Con frecuencia se desea regresar a la relación porque administrar el dolor supera nuestras fuerzas
y pretendemos, desde la imaginación, que va a funcionar el retorno, olvidando de esta forma todas
las dificultades que motivaron la actual situación.
a. Pero volver sin resolver los temas de fondo, tan solo porque creemos que es mejor añorar la
recuperación que emprender nuevos caminos, nos va a llevar al abismo de nuestras malas
decisiones.
3. Creer que va a funcionar porque lo deseamos de esta forma es muchas veces un acto
irresponsable:
a. Porque olvidamos toda la problemática que motivó la ruptura y la separación. Este es el mo
mento para ser conscientes de todas las estructuras que motivaron el fin de la relación, la
gran mayoría de ellas está ligada a una comunicación negativa e improductiva que no logró
construir puentes para las soluciones.
b. Una relación no funciona diciéndose a sí mismo “esta vez sí”. ¿Se acuerdan del colegio? Uno
decía “no, ahora sí, es en serio, voy a estudiar desde el primer día”. La idea era muy buena,
la decíamos con convicción, pero se nos olvidaba algo: cambiar los hábitos que nos hacían
perder el tiempo por hábitos que nos ayudaran a mejorar el tiempo.

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4. Hay que analizar si usted fue una pareja problemática o si usted fue una pareja con capacidad
de resolver; por otro lado, si estaba con una persona que facilitaba los procesos de comunicación o
estaba con una difícil y complacida; también pudo ser usted el que problematizó la relación.
a. Solo cuando somos capaces de asumir responsabilidades y analizar con objetividad nuestro
proceder en una relación es que podemos a comprender plenamente el porqué de que ya no
estemos juntos.
5. Mirar hacia atrás solo es una opción válida para sacar el aprendizaje y crecer, pero mirar hacia
atrás pretendiendo construir una nueva historia muchas veces sujeta a las personas a procesos hu-
millantes donde se ruega y las personas se anulan en aras de una compañía disfuncional ya que la
soledad parece insoportable.
La soledad tiene que ser un proceso de reencuentro, de reconciliación interna, de crecimiento per-
sonal para poder establecer una vida emocional más sana. Recordemos los primeros tres pasos de
este E-book.
• ¿De verdad quiere regresar o es miedo a lo nuevo?
• ¿De verdad quiere regresar o es que su orgullo no le deja aceptar que perdió?
• ¿De verdad quiere regresar o es que usa la lógica de mejor viejo conocido que nuevo por conocer?
• ¿De verdad quiere regresar o es que no sabe qué hacer sin esa relación tóxica en su vida?
• ¿De verdad quiere regresar o es que no tiene ni la menor idea de qué hacer con su vida si no está
con alguien?
Paso 08.
Te amo… pero no sé.
Que pereza me da a mí esta frase, en el amor “no sé” es un NO enorme; si alguien no sabe qué qui-
ere, no sabe para dónde va, así de simple; para mí, te amo pero no sé:
• Es falta de carácter, esto cabe en la adolescencia, no en la adultez.
• Es aburrido, porque después del sexo, no se sabe si se hizo el amor.
• Es complicado, porque ante la pregunta “¿nosotros qué?” te van a decir “te amo… pero no sé”,
¿qué significa esto?
• Es una afirmación, definida a partir de una expresión de confusión; es una estupidez emocional, no
tiene otro nombre.
Es una expresión muy frecuente en algunas historias de amor. Frente a ella estamos en una relación
que es como un campo minado: en cualquier momento, si se da un mal paso, puede haber una ex-
plosión emocional de consecuencias graves.

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1. En el amor no caben las dudas, “te amo… pero no sé” no sirve, pues el amor se sostiene en
las convicciones. Cuando una persona dice amar, tiene que tener claro el por qué desea estar con la
otra persona. De lo contrario puede ser solo atracción, emociones vacías sin sentido.
a. ¿De verdad esto te gusta?
b. ¿Vas a darlo todo desde esta perspectiva?
c. ¿Estás seguro de invertir en estas circunstancias?
Si lo hacés, después no te quejés, no llorés, no culpés a tu madre y no te pelées con Dios.
2. El amor que se expresa a través de bellas palabras, grandes y apasionados besos, pero que
luego de una noche o un momento de placer desaparece en el silencio y la evasión no es amor, es
impulso, es sexo.
Si una persona dice amar antes y durante el sexo, pero después del orgasmo te dice que está con-
fundido, se trata de un caza-genitales.
El amor exige respeto, compromiso, convicción, claridad; todo lo demás es placer, es darle gusto al
cuerpo, es enterrar el corazón.
3. Cuando nos dicen “lo que he sentido por vos nunca lo había sentido por alguien, pero no
sos vos, soy yo”, solo hay algo real:
a. Es una enorme carga de palabrería romántica, copiada de los libros o de los memes de
Facebook que no sirven para nada.
b. La traducción de esto es “lo que he sentido por vos es ganas de salir corriendo”, pero no se
tiene el carácter para ser claro y directo, esto es lo que significa, porque prometer y hablar
de amor para terminar una relación es un absurdo emocional sin fundamento, por tanto no
sirve para nada.
El amor que dice, “necesito tiempo, te amo demasiado, sos lo mejor de mi vida, pero necesito un es-
pacio para rencontrarme a mí mismo con mis amigos en un bar” no es amor, es cualquier otra emo-
ción, es paja, es una real y auténtica pérdida de tiempo.
El amor, cuando tiene problemas, los pone sobre la mesa, les pone nombre, distribuye respons
abilidades, traza caminos, define acciones, busca soluciones, no huye para estar en el bar, para
esconderse en las faldas de la mamá, no necesita ir a probar otros labios, lo que necesita es
asumir retos, compromisos y soluciones para poder llamarse amor.
Entonces, cuando estas cosas pasen, no cabe decirse “estoy confundida”, “no tengo claro que pasó”,
“no sé si estamos o no, solo se fue, pero me escribe y dice que quiere hacerme el amor, pero no me
busca”, nada de esto cabe pensarlo:

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• Si el amor no es comprometido, claro, directo, sincero, transparente, no es amor.
– Corra, no se haga preguntas, tome decisiones, solo vea los hechos.
– La realidad mata las falsas ilusiones y nos da las razones para quedarnos o irnos.
• Si el amor no es estable, si es una montaña rusa, no es amor, es inestabilidad.
– Corra, no se quede subiendo y bajando la montaña hasta un punto en el que ya no le
queden fuerzas para rescatarse a sí mismo.
– La realidad se impone, las huellas negativas en el alma van sumando, así que no me salga
con que está esperando el momento para salir de algo que le hace sufrir, vea las cosas
como son; sí, no es sencillo, duele, pero ¿para qué se queda si sabe que no lo quieren?
• Si el amor no es definido, es una novela de terror cargada de drama. El amor tiene momentos
duros, pero no duda de las bases de la relación.
– Corra si las bases no están claras, no importa que no sepa para dónde correr, al menos
tenga claro que se debe alejar de estos amores sin convicción que son un fracaso total
desde el día uno.
– La realidad se impone, si usted quiere estabilidad constrúyala, hágalo con lo que le ofrecen,
si lo que le dan es como la casa de paja de los tres cerditos, cuando llegue el lobo ya usted
sabe lo que va a pasar.
• Si el amor es como un juego de azar, no es amor, es cabezonada, es desgastarse en convencer a
otro o a otra de que haga algo por nosotros, esto no tiene sentido alguno.
– Corra, no se quede esperando ganar el premio mayor, en esto no hay garantías, en las
relaciones hay conductas que nos hacen creer que vamos bien o mal, estas se pueden
medir, son tangibles, no se engañe.
– La realidad se impone, si usted lleva años apostándole a la lotería para poder ganar y pagar
deudas, quizá solo está botando la plata.
Ejercicio de reflexión.
Como dice Bucay “Si no talla, no es de tu talla”, entonces:
• ¿De verdad tenés dudas?
• ¿Es más fácil construir una fantasía que ver la realidad?
• Usted decide.

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TERCERA PARTE:
RECONOCER NUESTRA DIGNIDAD
“¿Por qué merecemos amor del bueno? Tan solo porque somos humanos y el tiempo es único,
irrepetible y se agota”.
Paso 09.
Resignarse o Realizarse en el amor.
La vida en general no puede ser llevada bajo la premisa de “ni modo” o que simplemente se diga
asimismo:
• “Esto fue lo que me tocó”.
• “No veo que las cosas puedan cambiar, por tanto toca acomodarse”.
• “No soy de tomar riesgos, en el fondo, no me falta nada, yo con el amor de los hijos tengo”.
• “No quiero andar por la vida dudando, yo me metí en esto, así que ni modo, para adelante”.
• “Yo no tengo tiempo para andar pensado o buscando lo que no se me ha perdido”.
Creer que porque hay tristeza la vida tiene que ser así, que porque no hay alegría lo que resta es
acostumbrarse, asumir que como hay dolor, no se puede aspirar a otra cosa… para muchos esto no
es una forma de pensar, es un estilo de vida. Desde esta premisa, no cabe estar en una relación, no
es sano desde ninguna perspectiva:
• Si vas a estar en una relación, es para dar lo mejor de vos mismo, el criterio es que vos estés bien
y que la otra persona también lo esté. Si el resultado de tus acciones es el fastidio, y además insistís
en lo mismo una y otra vez, ¿por qué no considerás seriamente quedarte solo o sola?
• Si vas a estar en una relación, entonces lo que se requiere es sencillo:
– Apertura al cambio, para que el bienestar se convierta en algo constante.
– Conciencia de humildad para aprender de nuestra pareja.
– Capacidad de aceptar a la otra persona tal y como es, toda vez que esto no implique ningún tipo
de anulación o pérdida de la dignidad.
– Escuchar para comunicarse con claridad.
– Libertad para poder ser auténticos, sin miedo a la aprobación o la evaluación de tu pareja.
– Respeto al pasado, al presente y al futuro de la persona. Nada de reclamos tontos.
–Si te equivocás, pedí perdón, pero hagás cambios radicales.

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• Si vas a estar en una relación, es vital que comprendás que una relación es para:
– Crecer, estar mejor.
– Reír, pasarla bien, no para vivir en un eterno sufrimiento.
– Construir seguridad, no para vivir cargado de miedos y dudas por caprichos y actitudes
emocionales no resueltas.
– Establecer una vida sana, con sentido y con contenido, en el aquí y en el ahora.
– Tener paz, no angustia.
–Tener un proyecto de vida real, no un proyecto imaginario que se fortalece en la fantasía por la
negación de la realidad.
Las palabras RESIGNARSE y REALIZARSE con frecuencia trazan un norte en nuestras relaciones
de pareja, hay que balancearlas muy bien porque no se puede cargar una relación hacia la resig-
nación, toda relación debe estar orientada a la realización.
Este eje no es negociable; les propongo lo siguiente:
Resignarse es una palabra que implica ajustarse, acomodarse a una situación porque no hay sal-
ida, no hay alternativa, nos sentimos atrapados en medio de ella, limita nuestras posibilidades de
crecimiento, no nos cuestionamos otras opciones, simplemente decimos “esto es lo que toca” y nos
quedamos ahí.
• En la resignación se corre el riesgo de simplemente aceptar sin cuestionar, lo cual no es una
actitud natural en nuestra vida, pues en la esencia de todo ser humano está el cuestionarse para
crecer.
• En la resignación puede haber un ajuste sano a situaciones que tienen que ver con salud, de-
sempleo, edad, ajustes en cambios de vida por situaciones que vienen de fuera de nosotros pues no
están dentro de nuestro control y toca adaptarse.
Pero en el amor no cabe la resignación a hábitos, actitudes o conductas que no propicien un
clima agradable en la relación y mucho menos cuando se da una sensación de pérdida de la paz y la
serenidad. Resignarse a lo negativo es:
• Un autoengaño.
• Una enorme estupidez, aceptar algo tan solo porque creemos que la otra persona no puede
cambiar, y terminamos aceptándolo porque es mejor el sufrimiento diario que mata nuestras fuerzas
que enfrentar el dolor agudo de una separación para construir paz.
En el amor cabe la realización que nos permite sentirnos libres y auténticos, que nos da una
motivación para permanecer en la relación desde la salud emocional.
Realizarse significa apreciar lo bueno, modificar lo que no nos hace bien, tomar acuerdos para

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crecer, aceptar la crítica como un proceso de transparencia que nos forma y nos educa para
fortalecer el vínculo.
Realizarse significa:
• Vivir sin miedo.
• Vivir sin estrés.
• Vivir sin angustia.
• Vivir sin dolor.
• Vivir sin mala crianza.
• Vivir sin irrespetos.
• Vivir con compromiso.
• Vivir con capacidad de hacer acuerdos para el bienestar.
Todo esto nos da un sentido de plenitud que fortalece la motivación, pues cuando una pareja se
siente realizada se reinventa, se vuelve creativa, se torna propositiva e inyecta a la relación la mejor
versión de cada uno para la construcción de un nosotros que tenga sentido y contenido.
• ¿Por qué insiste en hacer lo que no deja un suave aroma?
• ¿Por qué si usted ve el dolor crecer y los problemas aumentarse, insiste en lo mismo?
• ¿De verdad usted cree que se merece estar mal todo el tiempo?
• ¿Usted cree que es sano estar por estar en la relación?, ¿qué pasa con su sentido de realización?
• Si su pareja no ayuda a crecer, si su pareja no aporta cosas sanas en su vida, ¿va a resignarse?
• ¿Por qué no se enfoca en lo positivo para que su pareja tenga una versión suya que valga la pena
y que vivir con usted no solo dé pena?
Paso 10.
¿Se puede salvar una relación, cualquiera que sea?
Llegamos al paso número 10 en nuestra ruta de comprensión del amor desde una óptica real y sen-
cilla, pero no por ello menos romántica. Llegamos hasta acá y espero que haya ido quedando clara
la propuesta que lleva como propósito que usted:
1. Crezca en amor propio.
2. Desde el amor propio reconozca su valor.
3. Desde el reconocimiento de su valor defina qué quiere.
4. Cuando sepa lo que quiere, elija todo lo que le hace bien.
5. Al reconocer que algo no le hace bien, lo cambie a nivel personal para crear una mejor versión de

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usted mismo o lo sustituya para poder dejar de ser esa persona cansada y fea.
6. Hasta ahora el reto es que usted reconozca su valor, su esencia, que se valore a tal punto que
en el amor no ruegue, no se humille, no se arrastre, que opte solo por lo que le hace bien a su vida
hoy.
7. El reto que tenemos por delante es que usted valore con objetividad sus relaciones y emociones:
a. Para ello revise desde adentro, quizá si usted trabaja en sanarse, crecer y aprender,
no tenga que terminar su relación, si no cambiar para que esta funcione, este es un reto vital
para la realización en la vida.
b. El otro reto, es que usted se dé cuenta de si está o no en una relación sana, si esta tiene
potencia real de estar mejor porque las dos personas lo reconocen y, por tanto, trabajan para
estar bien, si su relación es una configuración de problemas que, lejos de resolverse crecen,
volviéndose cada vez más pesados y complejos. Si usted se da cuenta de que esta solo ante
el reto de sanar, usted debería valorar si vale la pena seguir ahí.
8. Hasta acá les he propuesto:
a. Seamos personas felices para aportarle a los demás lago bueno, en lugar de llegar a
amargarles la vida.
b. Orientemos a resolver, no a pelear o molestar: porque para estar mal, es mejor seguir solo.
c. Seamos sencillos en nuestros análisis, sin propuestas no hay cambio, sin acciones solo hay
reflexiones estúpidas y sin sentido.
d. Sin perdón no se puede vivir.
e. Sin compromiso no vale la pena
f. Con arrogancia no se puede.
g. Con hábitos tóxicos todo es lo mismo.
h. Sin una sensación de tranquilidad no se puede.
Claro, yo creo profundamente en el cambio, en las posibilidades de crecimiento, en que todos po-
demos estar mejor a partir de nuestras decisiones. Creo en esto como psicólogo y como persona,
pero hay quienes a veces abandonan las terapias, se enojan con el terapeuta, con la familia, con los
amigos, porque encuentran más fácil proyectar el problema que asumir en el fondo que:
1. Muchas veces se hacen malas elecciones. Meten cabeza y hacen lo mismo una y otra vez.
2. Se quiere un cambio emocional, pero no se cambian las actitudes, por tanto todo sigue igual, el
cambio es cosmético. Aun así algunos se atreven a andar por la vida preguntándose
¿Qué fue lo que pasó?
3. Se quiere un cambio, pero no se renuncia al orgullo, a los celos, a la desconfianza, a la
indiferencia, por tanto los ciclos de terror no van a cambiar, pueden entrar en pausa, pero no van
a cambiar. El asunto es sencillo: o asumís el reto de ver la vida como el resultado de tus acciones o
nada tiene sentido.
4. Se quiere un cambio, pero no se hace nada esperando que el otro u otra lo hagan. Mientras
la otra persona sigue pensando igual, entonces no pasa nada, porque cuando los patrones
de pensamiento son los mismos, las percepciones y las interacciones son las mismas. Si estás en
esta posición:

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a. ¿Por qué tanta frustración, si esto fue lo que vos hiciste?
b. ¿Por qué tanto dolor, si al final es un reflejo de tus acciones?
c. ¿Por qué tanto enojo o resentimiento, si ante las señales no hiciste nada?
5. Se quiere un cambio, pero se insiste en justificar los malos hábitos en lugar de cambiarlos de una
vez por todas, porque no nos gusta dar el brazo a torcer, usted dice amar:
a. Pero ama más no perder, imponerse y sentir que gana sobre su pareja, a la cuál dice amar,
pero no puede soltar su patanería ni arrogancia, entonces díganme ¿cómo se salva así una
relación?
6. Se quiere un cambio, pero se pierde mucho tiempo dándole vuelta al problema en lugar de
buscar la solución. Este es un contrasentido del crecimiento personal, es como decir “si yo sé que
comer ácido me cae mal, pero me encanta, cada vez que lo hago me enfermo, pero esos dos
minutos en el paladar son maravillosos”. Pensar de este modo es un tributo a la estupidez.
7. Se quiere un cambio, pero no se acepta que se están cometiendo los mismos errores una y otra
vez, se especializan en sufrir, soñar y esperar, pero esto no los lleva a ninguna parte.
8. Se quiere un cambio y algunos dicen “nosotros no ocupamos ayuda”, pero llevan un año… diez
años peleando por lo mismo.
a. ¿Será que no ocupan ayuda?
b. ¿Por qué perder tanto tiempo?
c. ¿Acaso no se dan cuenta de que las cosas no están bien?
d. ¿Acaso no se dan cuenta de que no son felices?
e. ¿Acaso no se dan cuenta de que están optando por la tristeza profunda?
9. Se quiere un cambio, pero no se acepta que viven en el pasado todos los días, cada vez que
pasa algo bonito en el presente se dicen así mismos:
a. ¿Esta vez cuánto va a durar?
b. ¿Seguro esta vez va a ser lo mismo?
c. Sin fe en el cambio de los demás, ¿para qué meternos en un proyecto, si esta es la actitud, el
proyecto de cambio está muerto?
10. Se quiere un cambio, pero no se acepta que el resentimiento puede más que los nuevos
proyectos.
11. Se quiere un cambio, pero no se acepta que decimos confiar, cuando lo que hacemos es super
visar y revisar. Entonces, ¿para dónde vamos?
12. Se quiere un cambio, pero de su boca salen palabras ofensivas: estúpida, cállese, largo,
muérase, te odio, te detesto, para un momento después decir “Te amo con todo mi corazón.
a. ¿De verdad cree que así va a lograr algo?
b. Es claro el tema, ¿por qué no hace algo ya?
¿Para qué quiere el cambio, si no es para amar de forma plena? Esto pasa por encima de todo libro,
charla, taller o retiro:
El cambio nace cuando se abre el corazón a Dios, cuando se toman las decisiones correctas y
se es humilde para aceptar las cosas que hay que cambiar, pero de una vez, sin tanta majad-
ería emocional sin sentido.

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¿Usted de verdad quiere salvar esta relación? ¿Usted ve en esta relación un sano proyecto de vida?
Entonces:
• Si llevan tiempo sin resolver, no hagan lo mismo. ¿Por qué no buscar ayuda?
• Si llevan tiempo cargando un gran dolor, comprendan algo: no es suficiente querer cambiar, hay
que hacerlo ¿Por qué no lo hacen ya?
– Sin discutir.
– Sin luchas de poder.
– Sin presiones.
– Sin complicaciones emocionales.
• Si lo van hacer, si van a regresar, o si van a tratar de que funcione, háganlo bien, pero tienen que
cambiar la ruta, las expresiones, las interpretaciones, las actitudes, las formas de actuar y de ser en
la relación para poder desarrollar un amor sano y estable.
Paso 11
El apego y la dependencia nunca serán amor
El amor tiene una serie de premisas básicas que involucran la libertad para:
• Ser nosotros mismos.
• Crecer sin miedos.
• Desarrollar nuestro potencial.
• Dejar de tenerle miedo al rechazo
• Dejar de tenerle miedo a la aprobación.
• Ser aceptados tal y como somos.
• Cambiar todo lo que no nos haga crecer, no para transformarnos en lo que nuestra pareja quiere.
• Disfrutar el tiempo juntos.
• Confiar.
• Ver la vida como un sueño posible.
• Desarrollar nuestra esencia, nuestra autoestima y nuestra vida.
Cuando se ama desde la dependencia y el apego, estamos amando desde nuestras carencias,
vacíos y complejos, los cuales nos llevan a desarrollar patrones tóxicos, que todos conocemos:
• Celos tontos, que nos hacen controladores.
• Aprensión que limita el espacio emocional y social de nuestra pareja.
• Demandas de atención que no tienen sentido.
• Anulamos el crecimiento de nuestra pareja, porque nos sentimos poca cosa.
• Creamos grilletes emocionales que atrapan a nuestra pareja en nuestra conflictiva interna.

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• Creemos en que siempre nos van a dejar, por eso nos volvemos pegas, es decir, cansamos a nues-
tra pareja.
En el fondo, estar con alguien de esta forma, es posible, pero ¿A qué costo emocional? Es muy alto,
pues la tónica y el color de este proceso es el desgaste emocional, porque se vive en un mundo car-
gado de parodias, tristeza y dolor.
Hay quienes lo logran, aferrados a una imagen que no existe, a un deseo que nunca se logra contro-
lar, a un proceso que solo funciona en la cabeza, pues el amor no es real.
¿Querés saber cómo opera este proceso de amor distorsionado? Acá te lo describo. Una persona en
una relación de dependencia piensa desde el apego, y tiene ideas como las siguientes:
Me apegué a tu amor:
1. Porque aún hoy, después de varios años, sigo deseando la imagen de un ayer que pasó.
2. Porque en tu mirada quiero descubrir que aún me amas, me es más fácil esto que aceptar que
estás por que no sabés irte o yo no sé cómo irme.
3. Porque después de un tiempo me da miedo volver a comenzar.
4. Porque creo que la vida se me ha pasado esperando y me niego a perder.
5. Porque creo que podés amarme como yo te amo, no entiendo por qué no lo hacés.
6. Porque creo que en el fondo esto va a funcionar, sé que todo está en contra, pero no soy de los
que se van.
7. Porque tengo mil preguntas, miedos, dudas y dolores, pero prefiero esto que volver a empezar.
8. Porque creo que sí se puede, aunque vos no querás, yo sé que sí se puede.
9. Porque creo que no tengo fuerzas para construir mi vida de forma independiente. Desde hace
mucho solo sé vivir a la sombra de tu amor, que me deja un sabor amargo.
10. Porque no sé en qué momento dije que sin ti me muero, pero hoy me doy cuenta de que compar
timos un techo, que jamás he logrado entrar a tu corazón, esto solo me deja frustración.
¿Vas a seguir ahí? ¿De verdad necesitás más explicaciones?
• Sin seguridad interna las relaciones no sirven, se cargan de complicaciones.
• Sin confianza en nosotros mismos, todo nos parece rechazo.
• Sin certeza en nuestro valor, todo se ve oscuro y gris.
Vos, como persona, sos un ser humano valioso, no cabe el apego y la dependencia en el amor, no
son compatibles, porque hacen que la persona esté siempre en estado de alerta, en el fondo tienen
miedo a ser anadis con libertad, porque se ven a sí mismos como poca cosa.

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• ¿Estás consiente de tu valor como persona?
• ¿Te has dado cuenta de que tu pareja sigue ahí? Entonces ¿por qué tanto miedo?
• ¿Por qué tantos celos?
• ¿Por qué tantos problemas, angustias y dolores?
• El reto que usted tiene por delante es sentirse:
– Suficiente para ser elegido.
– Capaz para ser admirado
– Agradable para ser siempre aceptado.
– Brillante para saberse capaz de opinar y proponer.
– Sensual para saberse objeto de las fantasías y el deseo de su pareja.
Si usted no trabaja en verse a sí mismo en todas sus dimensiones, difícilmente podrá sentirse seguro
en una relación.
CUARTA PARTE:
SI NO SIRVE, SE DEJA,
SI VALE LA PENA SE NUTRE
¿Te comerías una comida que evidentemente está mala? Si hacés algo así:
• ¿Será lógico esperar no enfermarse?
• Será lógico decirle a la vida o a los demás que a vos todo te sale mal?
El amor funciona o no.
El amor lo hacemos funcionar o se muere.
El amor no es un “todo incluido”, es un proceso de construcción.

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Paso 12
Relaciones Tóxicas.
Les propongo 6 ejes que no se pueden negociar al establecer una relación. Si esto no se respeta, si
su relación tiene problemas en estas áreas, es muy probable que sea tóxica.
Con esto no quiero decir que no se pueda seguir, creo que toda vez que ambos quieran trabajar,
toda relación se puede sanar, pero tiene que ser un tema de dos, pues si solo uno cree que se puede
estar mejor, ya esa es una premisa que da un pronóstico muy reservado.
01. Libertad en nuestras relaciones:
Una persona debe entender que las relaciones interpersonales son libres, es válido que a otros no
les agrade lo que yo pienso y siento, pero que no necesariamente eso va a suponer rechazo o afec-
tar la calidad del amor. La persona dependiente debe hacer un esfuerzo para llegar amar con liber-
tad, es decir amar porque no se necesita al otro:
• Se ama para compartir.
• Se ama para disfrutar.
• Se ama para crecer juntos como pareja y no para esperar ser salvado por otros.
El amor maduro exige comprensión, respeto, tolerancia, aún en los momentos en los que no hay
acuerdo, por tanto:
• Si abre la boca que sea para construir.
• Si propone que sea para trazar puentes.
• Si hace algo que sea para estar mejor.
• Si las emociones lo hacen ser una persona complicada y difícil, o trabaja en esto,
o ya sabe para dónde va.
Solo cuando somos capaces de disfrutar el desarrollo personal de nuestra pareja y el desarrollo per-
sonal, es que podemos darnos cuenta de que dicho proceso es beneficioso para ambos si los dos lo
hacen bien.
02. Buscamos parches para nuestros problemas.
Si una persona entra en una relación:
• Esperando que el otro la salve.
• Que el otro la haga feliz.

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• Que la otra persona llene sus vacíos.
• Que su pareja compense los dolores de su pasado.
Con todo esto, lo único que está haciendo es depositarle al otro una carga difícil de llevar, que muy
probablemente no pueda cumplir porque no es su responsabilidad procurar su salud emocional, es a
usted al que le toca este proceso.
Cuando las personas andan por la vida esperando que otros sean sus médicos del alma, se empieza
mal, se crece mal y se camina mal, no hay opción.
El reto que usted tiene es trabajarse, cuidarse, nutrirse, hágalo por usted, pues en la medida en que
usted se sana y se fortalece, establece relaciones con sentido y con contenidos que valen la pena.
03. Cuidado con ser dependientes por nuestros miedos:
La persona dependiente debe abrirse hacia sí misma:
• Para aprender a reconocer sus emociones, temores, angustias y miedos.
• Debe reconocer sus habilidades, destrezas, fortalezas y virtudes.
• Debe aprender a confiar en sí misma.
• Debe llegar a creer que, tan solo por ser como es, merece ser amada, no se le ama por lo que
hace, sino por lo que es como persona.
Este proceso es básico, ¡cuántos problemas nos evitaríamos si dejáramos de exigirle a nuestra pare-
ja que haga lo que es nuestra responsabilidad!
• ¿Cuántas discusiones sin sentido nos evitaríamos?
• ¿Cuántas horas de silencios fríos?
• ¿Cuántos buenos momentos dejaríamos de arruinar?
• ¿Cuántos detalles podrían aflorar?
• ¿Cuántos sueños se podrían cumplir?
Mucho de esto dejaría de ocurrir si, como personas, nos diéramos a la tarea de reconocer que a
veces entramos a nuestras relaciones de pareja enfermos, esperando estar mejor, buscando afuera
lo que sabemos que va por dentro, y que solo vos y yo desde adentro podemos sanar.
04. Respete, negocie, no imponga:
Este paso es tan sencillo como responder las siguientes preguntas:
• ¿Quién es usted para imponerse desde la intransigencia, desde el grito o la agresión?

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• ¿Quién es usted para creer que siempre va a tener la razón, que siempre va tener que ser es-
cuchado?
• ¿Quién es usted para asumir que tienen que decirle que sí, darle siempre la razón?
Sin respeto el amor no sirve, se enferma. Además, actuar de esta manera lo único que crea es que
usted sea una persona detestable y cansada a la que uno quiere lejos de su vida siempre. Si va a
amar a alguien, entonces respete:
• Su forma de ser.
• Sus opiniones.
• Su familia.
• Su tiempo.
• Su espacio.
No sea de esas personas que andan manipulando todo el tiempo para tener la pareja a mecate cor-
to; sí es así, no le haga perder el tiempo a nadie, mejor quédese solo.
Negocie tiempos, espacios, responsabilidades, la negociación es el único camino para tener
relaciones justas, sanas y equilibradas.
05. Celos y control:
Deje de andar ahogando, asfixiando y limitando a su pareja, comprenda algo: si usted es celoso o
celosa, el problema lo tiene usted, vaya revise qué es lo que lleva por dentro que no ha logrado su-
perar para que pueda estar sereno y tranquilo.
Estar al lado de una persona celosa siempre va a ser cansado y tedioso, además de que es
tierra fértil para el desamor.
Los celos no son algo que nace de un momento a otro, ciertamente pueden pasar cosas en una rel-
ación que llevan a alguno de los dos a un patrón más controlador, asfixiante, apegado y manipulador;
en este caso podríamos hablar de una situación de mejor pronóstico, pero si este patrón se combina
con un mal manejo de la ira, quizá consumo de alcohol y otras drogas, puede ser igualmente com-
plejo que la persona que ha desarrollado dentro de un perfil de celos como parte de su forma de ser,
actuar y proceder en relación con la pareja.
Si una persona muestra progresivamente:
• Expresiones manipuladoras que le hacen sentir culpa, que le cargan y no le dejan ser ella misma,
esto es de consideración.
• Si como consecuencia de la relación, ha roto o al menos creado distanciamientos de amigos,

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familia y compañeros de trabajo, de tal forma que ya no los ve tanto como antes porque su pare-
ja prefiere que no los vea, porque se puede dar un grave problema, esto es para prestarle mucha
atención.
• Si con frecuencia su pareja le cuestiona porqué se viste de determinada forma, se enoja si usa cier-
tas blusas, le interroga cuando va a salir, le pregunta a quién va a ver, le hace sentir que solo se viste
así cuándo no va sola o solo para algún lado, esto es una señal de alerta.
• Si se presenta de forma recurrente en un lugar para verificar con quién usted salió, o si mientras
usted está ahí recibe llamadas y mensajes constantes, si le exigen que se comunique cada cierto
tiempo o que envíe fotos para ver con quién está, esto es una situación que no sugiere preocupación
hacia usted, sino todo lo contrario: se trata de una anulación del espacio.
• Si le supervisan el celular, le exigen las claves de sus redes sociales, si le molesta que reciba
llamadas, le pregunta constantemente quién es, para qué la llaman… ¡cuidado!, no es este un buen
síntoma.
• Si la persona constantemente le hace sentir culpable de lo que pasa, se irrita, se enoja, usa vocab-
ulario soez, ofensivo o descalificante, si hay forcejeos, empujones, maltrato físico a cualquier nivel,
es momento de busca ayudar de forma inmediata.
Estos son solo algunos de los comportamientos que usted puede notar para saber si su relación se
está transformando o es ya una relación de riesgo, que puede suponer una amenaza real a su salud
física o emocional. Frente a estas conductas se requiere buscar ayuda, no se pueden resolver por sí
solas, pues esto es lo que crea la espiral de la violencia: un día pasan pleitos horribles, luego viene
el momento del arrepentimiento, del perdón, de las promesas de que esto no va a volver a pasar, del
amor eterno, deja de pasar hasta que la persona vuelve a perder el control, de esta forma se inicia
un ciclo de idas y venidas complicadas que en algunos casos pueden crear situaciones que compro-
meten la seguridad.
Toda persona, tanto el celoso como el celado, requieren asumir y darse cuenta de que están frente a
un tema complejo, que afecta muchas dimensiones de la relación y que no solo abre paso al control
y a los celos, sino que además inicia ciclos de depresividad, agresividad, ansiedad, dolor, miedo y
angustia que podrían tratarse si ambos trabajan por resolver el tema de fondo.
• ¿Usted cree que con sus celos va para algún lado?
• ¿Usted cree que con sus berrinches e inseguridades cada día su pareja lo quiere más?
• ¿Usted cree que celando y limitando el espacio de su pareja la felicidad va a ser eterna?
• ¿Usted cree que desde sus temores va a poder desarrollar un amor maduro?

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06. Cuide sus palabras:
En el amor son importantes los detalles, a todos y todas les gusta:
• Una flor.
• Un peluche.
• Una tarjeta.
• Un oso del tamaño del clóset.
• Unas flores.
• Un chocolate.
• Una cena.
• Que nos ayuden a lavar el carro.
La lista de detalles es infinita, bonita, deseable, importante, pero un gran detalle, que no sustituye
claro, todos estos, pero que vale por mil tarjetas, es:
• Conectar la lengua con el cerebro.
• Dejar los silencios tontos y sin sentido.
• Hablar con prudencia.
• Hablar con paciencia.
• Hablar para acercarse no para alejarse.
Todo esto es vital. Piense:
• Lo que va decir.
• Cómo lo va a decir.
• En qué momento lo va a decir.
Las palabras a veces tienen el poder de crear muros o puentes, usted no puede decir que no sabe
esto, si afirma que no lo sabe, no está listo para estar en una relación de pareja:
• Cuando usted abre la boca, piense que le va hablar a una persona que usted dice amar.
• No maltrate.
• No lastime.
• No sea impulsivo.
• No se deje llevar por tanto capricho y rollo emocional,
• Con la boca se conquista y se gana el corazón de otro ser humano.
• Con la boca se construyen historias de dolor, pues la boca expresa lo que pensamos y sentimos, es
decir, es usted el que la administra.

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Estar en pareja:
• Es para estar bien.
• Es para crecer.
• Es para disfrutar la vida.
• Es para caminar al lado de alguien que nos hace sentir que la vida vale la pena.
Si no es para estar bien, si no hay disfrute, si no es así ¿para qué estar al lado de alguien?, esto
sería perder el tiempo, pues para mí uno no puede amar a una persona que lo hace infeliz, esto es
incompatible.
Mucho de este proceso nace, crece y se nutre en nuestro lenguaje, en nuestras expresiones, los
cuales a su vez se nutren de nosotros mismos, de acá la insistencia de que seas la mejor versión
que podás, pues si no es así, sos un mal negocio. Veámoslo así:
Una persona que habla feo:
• Lastima y da pereza.
• Aburre y causa dolor.
• Se proyecta inmaduro, explosivo, cruel.
• Crea desconfianza.
• Crea ganas de salir corriendo.
• Borra los sentimientos que dejan sus detalles materiales.
¿Es sencillo de entender? ¿Por qué no ponerlo en práctica ya?
• Cuando usted se enoja, ¿sabe controlarse?
• Cuando usted hace bromas, ¿está seguro de que no son burlas?
• Cuando usted se dirige a su pareja ¿lo hace con respeto?
• Cuando usted abre la boca, ¿sus palabras dejan un agradable sabor, o son un rato amargo para los
demás?
• Cuando usted se permite expresar lo que siente y piensa, ¿lo hace para construir puentes o
levantar muros?

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Paso 13.
Si me diera la oportunidad de demostrarle todo mi amor…
Estamos cerca del final de este recorrido de pasos que pueden ayudarnos a construir una guía prác-
tica para desarrollar el amor, pero como hay reglas, espero que hasta este momento usted ya tenga
sus propias conclusiones.
Un reto en la vida afectiva es liberarse de muchas cosas, acá tan solo algunos ejemplos:
• Hay quienes creen que si su pareja no es feliz es por su culpa.
• Algunos piensan que terminar es un fracaso, por tanto luchan sin cesar, sin analizar si la tarea
vale la pena.
• Algunos creen que si la otra persona reacciona mal, es porque nosotros lo llevamos a ese extremo.
• Hay quienes creen que si no logran que su pareja dé lo mejor de sí, es porque ellos no lo motivan.
• Creen que si algo falla es porque no logran que el otro se entregue lo suficiente.
• Si algo sale mal es porque no han logrado convencer a la otra persona de que dé lo mejor.
• Se sienten responsables de la apatía, la manipulación y la falta de compromiso.
Frente a esto, ¿cabe en el amor convencer a la otra persona de que debe amarnos? ¿Es parte del
amor rogar una y otra vez esperando la misericordia de nuestra pareja?
• ¿Es así como te ves en una relación?
• Luchar siempre, ¿es razonable?
• El juego del amor desde esta perspectiva no es algo sencillo de asumir, pues implica anularse de
forma constante y frecuente.
Hay quienes frente a la indiferencia de otra persona, hacen todo lo posible por abrir un espacio en
el corazón del otro u otra; no digo que esté mal tratar de ganar algunos puntos, pero obligar a otra
persona a querernos puede ser un juego complicado:
Si vas a darte la oportunidad con una persona, es importante tomar en cuenta que:
• Vos tenés que sentirte pleno o plena con tu ser, es decir, lo primero que debemos hacer antes de
amar a otros, es reconocer que tenemos un valor, una forma de ser y de estar en este mundo que
nos hace elegibles, el problema se da cuando por nuestros problemas afectivos aceptamos cualquier
cosa a cambio de formar parte en la vida de otro ser humano.
– Por amor no se ruega, pues al rogar deja de ser amor.
– Por amor no dejamos de ser nosotros mismos, esto no es parte del amor, esto es parte de la
necedad emocional.
– Por amor uno no se arrastra esperando la benevolencia del amado, esto es autoagresión.

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• Rogar no es parte del proceso de conquista, esto es un acto que refleja el poco amor que nos tene-
mos a nosotros mismos.
– Todo ser humano debe saber que cuando se quiere estar con otra persona es vital darle la
posibilidad ser libre en su ser para que podamos descubrir razones para amar, es dejarla fluir
con autenticidad.
• Pretender saber qué desea la otra persona para modificar nuestra esencia en aras de un amor que
no te acepta tal y como sos, es una actitud enferma y sin sentido.
• Creer que estamos en la obligación de llenar las expectativas de los otros como requisito para ser
elegibles puede ser un juego doloroso para nuestra dignidad.
• Antes de creer que la otra persona es lo mejor que nos ha pasado, es vital hacerse estas
preguntas:
– ¿Por qué si es un ser humano tan maravilloso tenés que rogar por una mirada y un espacio en
su corazón?
– Quizá la visión esté distorsionada.
• Hay quienes ruegan como si la otra persona fuera un ser divino. Los demás son personas tal y
como nosotros, iguales, con defectos y virtudes, cuando se comete el error de la idealización, nos
ponemos una soga en nuestro cuello.
• Tratar de hacer méritos para que la otra persona sea feliz y nos acepte, no es válido para ningún
ser humano.
Si la opción y la elección de otra persona en nuestra vida surge a partir de la idea de que tenemos
que cambiar porque somos poca cosa y el otro es demasiado, podemos tener la certeza de que va-
mos por muy mal camino.
• ¿Por qué tenés que rogar?
• ¿No te gustaría que lo aceptaran tal y como sos?
• ¿Por qué creés que la otra persona tiene el poder de decir si tenés o no valor para ser elegido?
• ¿Por qué creer que somos poca cosa?
• ¿Por qué no verse en una relación con igualdad de derechos y deberes?

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Paso 14.
Las dictaduras emocionales en las relaciones de pareja
Un elemento central en una relación de pareja, en realidad en cualquier relación interpersonal, es la
igualdad, pero hay quienes están con personas que aman desde un estilo afectivo imponente, dicta-
torial, evidentemente la persona que ama desde esta óptica está mal, pero vos:
• ¿Por qué te permitís este estilo afectivo en tu vida?
• ¿Por qué creés que esto es sano para vos?
• ¿Creés que en la imposición el amor crece y florece?
Todos nos hemos topado en nuestra experiencia personal, o en la de personas cercanas a nosotros,
este tipo de situaciones en las que uno de los grandes problemas es cuando con razones válidas o
no, se dan procesos de imposición de uno sobre la voluntad del otro, siendo este el estilo normal de
este tipo de relaciones, lo cual no está del todo bien porque simplemente uno calla y el otro se im-
pone, uno se anula y el otro crece a partir del dolor de su pareja.
Ahora, ¿cómo nos damos cuenta de que estamos frente a una dictadura emocional? Les trazo acá
algunos ejes sencillos, que son fácilmente identificables:
• “Es así y punto”:
a. Cuando alguno de los dos se impone desde esta lógica, lo único que logra es que el problema
se haga más grande, o que el otro u otra termine cediendo con tal de llevar la fiesta en
paz, pero por dentro se va gestando un fuerte dolor emocional que puede ser la antesala de
un franco proceso de frustración y enojo, susceptible de llevar al fin de la relación.
• No hay escucha:
a. Otras veces la persona abiertamente no escucha, cierra las posibilidades de comunicarse de
forma directa:
i. Se levanta y no escucha, no presta atención.
ii. Sutilmente nos hace creer que está de acuerdo y termina haciendo lo que le da la gana.
iii. Esto tarde o temprano lleva al otro u otra a sentir que no vale la pena estar con alguien que
no escucha, pues sin escucha no hay acuerdos, y sin acuerdos, uno de los dos se va a
sentir siempre irrespetado.
• Se hace lo que a mí me da la gana:
a. Otras veces alguno de los dos se siente el gerente, el director de la familia y, lo que es peor,
se siente en la capacidad y autoridad de decirle a la pareja y la familia qué es lo que pueden
hacer, qué les está permitido, simplemente porque él o ella cree que es así.

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i. Este nivel de imposición no solo crea sentimientos de dolor y frustración, sino que además
es un franco proceso de agresión que anula de forma progresiva la forma de ser de los demás
y transforma el amor en miedo con el paso del tiempo.
• Poseedores de la verdad:
a. Algunas personas en la vida de la pareja suelen adjudicarse el poder de la verdad, es más,
defienden su punto de vista a capa y espada, simplemente porque ellos o ellas ven las cosas
de esta forma; usan argumentos tales como “en mi casa se hacía así”, “a mí me gusta de esta
forma y punto”, es decir, no tienen argumento.
i. Detrás de esto se esconde una persona caprichosa, probablemente inmadura, que quiere
ver en su familia una réplica de su familia de origen o, lo que quizá sea peor, quiere las
cosas tan diferentes a su familia de origen que solo se impone en función de lo que quiere
sin considerar qué quieren los demás.
• Sus argumentos no tienen sentido, tienen emociones:
a. Nunca van a perder, porque cuando son cuestionados o cuestionadas recurren al enojo, a la
forma de ser grosera, tosca, descalificante, manipuladora, para imponerse por el simple hecho
de que ven las cosas de determinada manera.
i. Esto los hace ser cerrados, no aceptan la crítica, se resienten fácilmente, cuando están acor
ralados(as) levantan la voz, su argumento es crear imposición, es decir cultivan el miedo o el
cansancio emocional.
Vivir en una dictadura emocional, no solo no tiene sentido, sino que es un proceso de relación que
tiene alto riesgo de incursionar en diferentes niveles de agresión que van a terminar creando lesiones
emocionales y, lamentablemente en algunos casos, lesiones físicas.
En aras del amor no se puede estar con un dictador o dictadora, pues esto refleja una pobre visión
de sí mismo que debe ser tratada, pues el amor es dignificante, no es para anularse o aceptar vivir
bajo el yugo opresor de una persona cuya forma de amar es enferma y errada, por tanto esto puede
ser cualquier cosa menos amor.
• ¿Es usted un dictador(a)?
– Si es así, busque ayuda para convertirse en una persona más sana y flexible, pues es mejor
que estén con uno por amor y no por miedo.
• ¿Está usted en una dictadura emocional?
– Busque ayuda, porque es muy probable que su desarrollo emocional requiera apoyo; no se
puede amar en la toxicidad afectiva, esto siempre va a ser nocivo

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Paso 15.
Te dejé de amar porque…
El amor y el desamor son un reflejo de nuestras acciones, tanto de lo que hacemos, como de lo que
dejamos de hacer. Muchos se preguntan qué fue lo que nos pasó; la respuesta es sencilla de
encontrar:
• Vea la historia, vea los hechos, usted sabe qué hizo mal, ¿por qué culpar a la vida?
• Recuerde lo que dijo, si sembró dolor, ¿por qué se extraña hoy de la soledad?
• Dejó de tener detalles, entonces no se queje del distanciamiento de la persona que estuvo
a su lado.
• Actúo de forma grosera, con esto la respuesta está clara.
• Fue una persona explosiva, de esta forma solo deja lesiones.
• Nunca puso atención, la persona dejó de creer en usted, si alguien no escucha, seguir es una
pérdida de tiempo. ¿De verdad tiene dudas?
No hay que buscar afuera lo que sabemos que está dentro de nosotros:
La historia, cada día, cada semana, cada mes de una relación, nos da los datos para saber qué fue
lo que se hizo mal. Empezar a pensar sin reconocer esto es una gran pérdida de tiempo.
Todo está en la cotidianidad, en la forma de ser y estar en la relación. La premisa es sencilla: si usted
sembró malestar:
1. No hay frutos.
2. Hay dolor.
3. Hay miedo.
4. La relación fue agotadora.
5. La frustración mato el amor.
6. El desencanto fue progresivo.
7. Las motivaciones se murieron.
8. Dejó vacíos que ya no pueden llenarse.
9. Causó rechazo, a veces repulsión.
10. Dejó una carga de tristeza profunda.
Todo suma y hace que un día nuestra pareja, cansada y frustrada, diga:
1. Te dejé de amar porque tu forma de amar es inmadura, cambiante, inestable y dolorosa.
2. Porque me cansé de tus silencios fríos y tus caras largas.

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3. Porque ya no quiero sentir miedo de tus reacciones.
4. Porque no estás abierto(a) a escuchar explicaciones, siempre me topo con tus justificaciones.
5. Porque estoy agotado(a) de esperar cambios, esto no va a pasar, el error fue pensar que esto iba
a suceder.
6. Porque dejaste de sonreír, dejaste tus detalles, los perdí, me topé con tu enojo.
7. Porque la indiferencia me hace sentir que me arrastro, no vale la pena seguir de rodillas rogando
amor.
8. Porque al final me he sentido un objeto sexual, siento que querés mi cuerpo, pero que no respetas
mi corazón.
9. Porque te hice mil propuestas, me topé con tu falta de motivación, de compromiso y acción.
10. Porque me di cuenta de que en medio de todo esto me dejé de amar a mí mismo.
No podemos culpar a la vida, a nuestra historia, cada uno gesta sus palabras y expresiones, esto es
vital para mantener el amor sano, solo la buena semilla da buen fruto.
Te dejé de amar porque estar a tu lado es cansado, nuestra relación se convirtió en tierra infértil,
llegó el momento de comenzar de nuevo en otros prados, ahora lo que te pido es que me dejés en
paz, no hay marcha atrás, el amor se murió y nació el AUTORESPETO.
• ¿Por qué insistir en lo mismo?
• ¿No ve los cambios hacia la frialdad?
• ¿No ve el dolor que está causando?
• ¿No se ha dado cuenta de que ya no es igual, ya no fluye?
• ¿No ve lo evidente?
El desamor nunca nos toma por sorpresa.

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Paso 16.
¿Perdón y segundas oportunidades?
Este es un enorme reto, yo creo que todo proceso afectivo se puede sanar, pero para ello:
• No espere la gran crisis, pues puede que ya sea tarde.
• No deje que pase el tiempo: mientras en el silencio de su corazón toma el valor para irse, esto no
los va a llevar a ningún lado.
• No espere que la otra persona ya no quiera, pues puede que ya la otra persona vea la soledad
como un proceso más sano y agradable.
• No deje que el orgullo los sostenga en los círculos de malestar.
Todos y todas hemos experimentando el dolor de una relación que se rompe, se daña o se fracciona
de forma permanente; cuando menos hemos pasado un mal rato que puede durar días o semanas,
sea con la pareja, un amigo o amiga, un compañero de trabajo, en fin… estilos y formas de relación
hay muchos.
En toda relación existe la posibilidad de tener problemas, diferencias y fricciones que pueden causar
la ruptura de una relación. Creo que es importante tener claros algunos tipos de problemas:
• Problemas por diferencias:
a. Es normal que en toda relación haya diferencias, pues todos y todas vemos las cosas
desde nuestra visión de mundo, pero si dos personas son capaces de ver el problema
asociado al contenido de las ideas sin faltarse el respeto, sin descalificar o minimizar a la otra
persona, acá el tema no es problema, es decir, tan solo se ven las cosas de forma diferente y
toca respetar, pero no hay maltrato.
b. De esta forma se puede resolver, pero el cambio es ya, hoy, no es para mañana.
• Problemas por temas complejos:
a. A veces hay situaciones, temas, circunstancias que no son fáciles de digerir por lo que
implican en sí mismos, no es sencillo ponerse de acuerdo.
b. Pero las personas que se permiten un acercamiento progresivo y ordenado, que se toman
el ema con calma, lo van resolviendo poco a poco a poco bajo la premisa del respeto y no
lastimar al otro o la otra.
c. Así quizá sea más fácil ponerle nombre a las cosas y trazar un camino.

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• Problemas por falta de acuerdos:
a. Los desacuerdos son normales, el reto es tomar la posición más razonable, probar y
experimentar; si no sale bien, se toma la otra opción sin caer en el error de sacar trapos
sucios o caer en señalamientos o críticas severas, para nada productivas.
b. Solo orientados a la solución es que podemos crecer.
• Problemas por torpeza:
a. Es decir se comete un error, se causa dolor o molestias, pero no hay una mala intención,
la persona actuó de buena fe, pero sin la intención de lastimar o hacerle daño al otro; si se
reconoce el error, lo que procede es pasar la página.
b. El perdón y la corrección inmediata son centrales en este proceso para poder crecer.
• Problemas por mala y consiente intención:
a. Este nivel es inaceptable, no es propio del afecto sano; si usted es de las personas que
actúan mal tan solo porque no les da la gana cambiar o quieren lastimar, usted no sabe ser
amigo, quizá sea una mala pareja y un mal compañero o compañera de trabajo; si usted sabe
que va a lastimar, mejor se va, porque esto no es propio de personas equilibradas.
Errores, dolores, frustración y tensión todos vamos a vivirlos en un momento en cualquier tipo de rel-
ación humana. Esto no significa que tengamos que aguantar todo, pero estamos llamados al perdón.
Sin embargo, para que el perdón vaya más allá de solo sanar el dolor y se pueda mantener la rel-
ación, es necesario que la persona que causó el daño:
1. Reconozca que él o ella es el único responsable de lo que ha sucedido.
2. Asuma que no es suficiente pedir perdón, hay que cambiar ya para empezar una nueva etapa de
la relación.
3. Debe reconocer que la otra persona necesita tiempo para volver a creer y sanar el corazón.
4. Debe ejecutar acciones reales de cambio, no solo palabras bonitas.
Claro que se pueden dar segundas oportunidades, pero estas no deben estar fundamentadas en la
dependencia, en la anulación, en la negación de la realidad, sino en la transformación real del otro u
otra, de lo contrario se va a seguir en el mismo círculo vicioso que para nada es productivo.
• Te vas a dar una segunda oportunidad:
– ¿Qué cambios vas a asumir?
– ¿Qué acuerdos van a trazar?
– ¿Qué heridas emocionales tienen que sanar?
– ¿Qué es lo permitido, lo no permitido y lo negociable?
• No basta con volver y decir te amo. Sin acciones el cambio nunca llega, es más, se retorna al
problema cada vez con más fuerza porque se sigue un enorme cúmulo de frustraciones.

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Paso 17.
En el amor ¿busco lo que yo quiero?, ¿acepto lo que me ofrecen?
“Ni mucho que queme al santo, ni tampoco que no lo alumbre” dice el dicho popular, la clave es bal-
ance entre realidad y expectativas, solo en el balance se construye el amor.
¿Cómo quiere ser amada(o)?
Este fue uno de nuestros primeros pasos, lo retomamos, porque es central para la compren-
sión sana del amor.
• Muchas veces las personas construimos modelos afectivos que responden a criterios muy per-
sonales, cosa que no está del todo mal, pues cada uno tiene que entrar con mucha claridad a una
relación respecto a lo que quiere o no, o qué desea o no de una relación.
– Pero este querer tiene que ser flexible, adaptable, negociable, pues no podemos esperar que
el otro sea una copia al carbón de mis deseos.
• Esto no quiere decir que tengamos que renunciar a nuestros deseos, pero estos tienen que ser
realistas. Con frecuencia, en las relaciones de pareja uno de los dos espera que el otro le llene una
serie de necesidades o que le compense sus vacíos.
– Esto es algo que debe ser resuelto en lo individual, para no arrastrar al otro dentro de prob
lemas emocionales muy personales.
• Es sano en una relación decirle al otro:
– Cómo me gusta el sexo.
– Cómo espero que sea la comunicación.
– Cómo quiero construir el proyecto financiero.
– Cómo queremos que sean educados los hijos.
– Cada uno en su posición debe ser claro, firme y decidido, pero sin caer en procesos inflexibles
de imposición o justificaciones.
¿Cómo es capaz de amar el otro?
• Es bueno saber cómo es capaz de amar el otro, cómo expresa su forma de ser y de amar, para
aprender a apreciar lo que el otro es, lo que nos aporta.
– Muchas veces, por modelos inflexibles, alguno de los dos siente que nunca queda bien, pues
no importa lo que el otro haga, va a quedar mal, las expectativas son muchas o están fuera de
realidad.
• Aprender a negociar entre lo que quiero y lo que el otro es capaz de dar, nos lleva a un punto sano

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de equilibrio en el que ambos dan lo mejor de sí. Se hace un esfuerzo por llenar las expectativas,
pero el otro le da valor positivo a lo que el otro aporta, esto es sano, así se construye el amor.
Ahora, ¿qué pasa si uno, como miembro de una pareja, respeta la forma de ser del otro, habla abi-
ertamente de qué es lo que se espera y además respeta el ritmo del otro, se dan espacios para que
cada uno aporte su 100% con naturalidad, pero frente a esto, nos topamos con caprichos, testaru-
dez, inflexibilidad, imposición, falta de compromiso, creatividad, solidaridad, comprensión, calidez y
cercanía? Frente a esto:
• Es poco lo que se puede hacer, pues una relación es dinámica, cambia con el tiempo, cambia con
la edad, pero debe cambiar para bien, no para aguantarse.
• Es mentira que uno es como es y punto.
• Todo ser humano tiene la capacidad de crecer, adaptarse y cambiar. Por ejemplo, si uno no hace
cambios en el trabajo, queda fuera.
• Detrás de la resistencia al cambio hay patrones de conducta que hacen las cosas más complejas y
difíciles.
• Creo que usted debe revisar en cuál de los dos ejes se ubica, pero si usted cree que objetivamente
está bien, es su pareja la que no le ayuda y debe buscar ayuda profesional así sea para salvar y
mejorar la relación o para analizar otros escenarios para crecer como persona.
• No se puede vivir en el capricho emocional de los demás, pues esto puede ser una cárcel para el
alma.
Paso 18.
Fastidiar o construir en una relación.
Nuestro último paso: en términos muy sencillos, usted está en un proyecto afectivo para:
• Abrazar la vida con disfrute.
• Creer que va a estar mejor.
• Sentir paz.
• Reír, soñar y trabajar por sus metas.
• Recibir besos y abrazos profundos.
• Dar lo mejor de sí mismo.

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• Pasarla bien en todo momento.
• Resolver las diferencias.
• Proponer acuerdos.
• Trazar metas.
• Formar una familia.
• Tener un lugar de encuentro.
• Para estar tranquilo (a).
• En fin, para estar bien aun cuando haya problemas.
El tema de las relaciones, son interpretadas con frecuencia como algo difícil. En alguna medida es
así: toda relación humana tiene que pasar por el plano de la negociación, la escucha, la compren-
sión, el ceder y aportar, cosa que a veces no es sencilla porque esto se suele filtrar desde el capricho
y el orgullo, desde la defensividad o las ideas fijas. Al final esto no suma, más bien resta toda
posibilidad de crecimiento cuando queremos ver las cosas desde estos filtros improductivos.
Usted y yo podemos fastidiar nuestras relaciones. ¿Cómo se da este proceso?
• Cuando usted dice No, tan solo porque no está de acuerdo pero no tiene un argumento válido, es
decir, puede más el capricho.
• Cuando usted, no escucha, se le habla una y otra vez, pero usted insiste en hacer caso omiso de
lo que su pareja propone, le pregunto ¿Qué espera que pase si mantiene esta actitud?
• Cuando usted se enoja, tan solo porque le cuesta aceptar que está en un error, pero para usted
es más importante ganar la decisión, basada en argumentos vacíos y sin sentido, que dar el brazo a
torcer.
• Cuando a usted no le da la gana, por esto mismo, porque no le da la gana, porque no hace un
cambio, no le costaría nada, le traería paz a usted y su pareja, pero puede más el orgullo ciego.
• Cuando usted explota y pega gritos, ¿De verdad usted cree que esto ayuda?
• Cuando usted omite su responsabilidad, le echa toda la culpa a su pareja, ¿qué responsabilidad
tienen los demás de sus malas actitudes? ¿Será que no se da cuenta?
Con todo esto, el resultado es claro: la peor consecuencia del fastidio emocional, es que crea can-
sancio progresivo, desilusión crónica, tensión desgastante, desmotivación frecuente ¿Usted sabe lo
que va a pasar? Entonces, ¿por qué no hacer un cambio ya?
Se construye una relación cuando aplicamos los antídotos del fastidio emocional:
• Paciencia para escuchar.
• Prudencia para hablar.

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• Apertura para aceptar.
• Motivación para cambiar y actuar.
• Perdón para poder avanzar.
• Transformación para poder crecer como personas.
• Creatividad para buscar soluciones.
• Humildad para aceptar errores.
• Compromiso para crecer mutuamente.
No se quede con el cuento de que “el amor es difícil”, las relaciones son difíciles si somos personas
complicadas, pero si trabajamos en el crecimiento individual, la historia puede ser otra.
Ejercicio final de reflexión:
• ¿Cómo quiere que sean sus relaciones? Piénselo ya.
• ¿Quiere estar bien? No salga con que no sabe.
• El amor va a ser un reflejo de su actuar y su proceder.
• Está en sus manos, no en las de los demás.
Un abrazo, gracias por leer estas reflexiones, espero sus comentarios y nos vemos pronto.

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