Mo Yan es un escritor chino nacido en 1955 que se hizo conocido por sus novelas como Sorgo rojo. Fue influido por autores occidentales como García Márquez y Tolstoi. En 2012 recibió el Premio Nobel de Literatura, convirtiéndose en el primer autor chino en obtener este galardón. Algunas de sus obras más destacadas son Sorgo rojo, Las baladas del ajo y Grandes pechos, amplias caderas.
2. BIOGRAFIA
Mo Yan, cuyo nombre real es Guan Moye, es un escritor chino que
nació en Gaomi, en 1955. Su seudónimo significa “no hables”, en
recuerdo a su infancia y a la Revolución Cultural maoísta, durante la
que sus padres le dijeron constantemente que no hablara para no decir
nada inconveniente.
Tras trabajar en una fábrica de petróleo, Mo Yan consiguió entrar en el
Ejército Popular de Liberación chino. Siendo soldado, empezó a escribir
y al conseguir un puesto en la Escuela de Arte y Literatura del Ejército,
pudo dedicarse por completo a esta afición.
Se hizo conocido en occidente gracias a la adaptación de dos de sus
novelas a la película Sorgo rojo, dirigida por Zhang Yimou.
Este autor reconoce estar influido por escritores occidentales como
Gabriel García Márquez, Tolstói y Faulkner, aunque se le conoce sobre
todo como “el Kafka chino”.
3. PREMIOS
Fue candidato:
● Premio Neustadt de 1988
● Premio Man Asian en 2007.
En 2009 obtuvo el Premio Newman de Literatura China. Varias de sus obras
fueron prohibidas en su país natal, de entre las que destaca Grandes pechos,
amplias caderas.
En 2012 recibió el máximo galardón de la Academia Sueca, el Premio Nobel de
Literatura.
4. OBRAS
● Sorgo rojo (1987)
● Las baladas del ajo (1988)
● Trece pasos (1989)
● La república del vino (1992)
● Grandes pechos, amplias caderas (1996)
● Shifu, harías cualquier cosa por divertirte (1999)
● El manglar (1999)
● El suplicio del aroma de sándalo (2001)
● La vida y la muerte me están desgastando (2006)
● Cambios (2010)
● Rana (2011)
● ¡Boom! (2013)
5.
6. Cuando Xuan´er se casa con el herrero, se convierte en Shangguan Lu. Presionada por
su insoportable suegra, la joven recién casada se siente con la obligación de quedarse
embarazada. Aunque lo intenta una y otra vez sus esfuerzos resultan del todo baldíos ya
que su marido, Shangguan Shouxi es estéril. Sin embargo, Lu consigue dar a luz a ocho
hijas y a un niño, sin que su esposo intervenga para nada en el asunto. De sus relaciones
con su tío el Gran Zarpa nacen las dos primeras (Laidi y Zhaodi). El resto de hermanas son
producto de sus breves encuentros con un buhonero (Lingdi, la tercera), con un curandero
ambulante (la cuarta, Xiangdi), con un carnicero de perros (la quinta, Pandi), con un monje
(la sexta, Niandi), con cuatro soldados desertores (la séptima, Qiudi) y con el Pastor Malory,
un misionero sueco (la octava, Yunü y Jintong, su único hijo; ambos nacieron a la vez). Cada
una de estas mujeres resultan ser muy diferentes en carácter y en personalidad, en
inquietudes, en pensamiento político, en suerte o destino. En lo único que las ocho hermanas
parecen coincidir es en que todas tienen grandes pechos y amplias caderas.
Jintong es también un chico bastante peculiar. Toda su existencia está marcada por una
extraña e inexplicable adicción por la leche materna y cualquier otro alimento le causa
repugnancia y nada consigue excitarle o motivarle más que la visión del pecho de una
mujer, pero no sólo por puro morbo sino por que inmediatamente desea chuparlo.
Además será quien nos narre la historia de supervivencia de su madre, de sus ochos
hermanas y de él mismo, a través de un largo periodo que comienza con la caída de la
dinastía Ming (pasando por la invasión japonesa, la guerra civil, la instauración y
desarrollo del régimen comunista…) hasta los años 90.
7. Lugar geográfico: Gaomi del Noreste: tierra natal del autor, Pcia. de Shandong, este de
China.
Época: Verano de 1939 LECTURA
La luz tenue de una inmunda lámpara de aceite de haba que descansaba sobre una piedra de
molino en el establo parpadeaba nerviosamente, dejando escapar desde la punta de su llama
ráfagas de un humo negro que ascendían dibujando tirabuzones. El olor de la lámpara de aceite se
combinaba con el hedor de las deposiciones y los orines de la burra. El aire estaba totalmente
viciado. El negro animal yacía en el suelo, entre la piedra de molino y una artesa de piedra de color
verde. Lo único que vio Shangguan Lü al entrar fue la temblorosa luz de la lámpara, pero escuchó la
voz ansiosa de Shangguan Fulu preguntando:
-¿Qué ha sido?
Se giró hacia ese sonido y frunció los labios, después atravesó la habitación pasando junto a la
burra y a Shangguan Shouxi, que estaba dándole un masaje en el vientre al animal; caminó hasta la
ventana y arrancó la cortina de papel. Una docena de dorados rayos de sol iluminaron la pared
opuesta . Entonces fue hasta la piedra de molino y apagó la lámpara de un soplido. La cara oscura y
aceitosa de Shangguan Shouxi adquirió un brillo dorado; sus minúsculos ojos negros brillaron como
dos pedazos de carbón ardiendo.
-Madre – dijo con temor-, vámonos. Todo el mundo de la Casa Solariega de la Felicidad ya se ha ido,
y los japoneses llegarán en cualquier momento...