El documento habla sobre la creencia popular de que los duendes roban niños pequeños sin aviso y los llevan a los montes. Según la descripción, los duendes son malos espíritus enanos con la piel plateada que visten de rojo, caminan en fila e viven en grupos de cinco en los montes. Se cree que solo los niños y mudos pueden verlos y que secuestran niños no bautizados para convertirlos en duendes. Por lo tanto, nunca se debe dejar a un niño solo.