Este documento resume un sermón bíblico sobre Jeremías 30:18-20. Habla de cómo este pasaje profetiza el fin de la cautividad, un tiempo de misericordia y arrepentimiento, y el crecimiento de la iglesia como una ciudad edificada sobre una colina y un templo asentado según su forma, con una nación que está en regocijo y no en angustia, que Dios multiplicará y confirmará.