Ezequiel fue un profeta que tuvo visiones de Dios y recibió mensajes para transmitir al pueblo de Israel. Dios le mostró visiones extrañas como comer un rollo, acostarse de costado por años, y cortarse el cabello para advertir al pueblo sobre el castigo divino por su desobediencia. A través de Ezequiel, Dios también dio un mensaje de esperanza prometiendo restaurar a Israel a su tierra.