El documento trata sobre el impacto ambiental de los desechos electrónicos. Generamos entre 20 y 50 millones de toneladas de basura electrónica al año, que contiene componentes tóxicos como plomo, cadmio y mercurio. China recibe gran parte de estos desechos y los procesa de forma insegura, exponiendo a las personas a altos niveles de contaminación. Se necesitan soluciones como la reducción de sustancias peligrosas, el reciclaje responsable y la donación o venta de equipos usados.