Un día típico en la escuela secundaria comienza con la llegada de los estudiantes entre las 7:30 y 7:00 am, donde algunos compran útiles de última hora mientras que otros se quitan sus chamarras de marca. Dentro de la escuela, los estudiantes son revisados por los profesores para verificar que cumplan con el código de vestimenta y no traigan objetos prohibidos. Las clases transcurren con diferentes niveles de atención de los estudiantes dependiendo de la materia y el profesor. Finalmente, los recreos están
Act. 2 una jornada de trabajo en la escuela secundaria
1. Una jornada escolar es de lo más movida, al menos en la secundaria, este
equipo recoge las siguientes experiencias observadas:
Nosotros llegamos a las 7:30 am, o a las 7:00 si no hay horario de verano
y suceden varias cosas. Algunos pubertos corren a la papelería de
enfrente a comprar esa biografía o ese pliego de bond para esa tarea de
última hora. Mientras eso sucede, vemos venir a las compañeras que con
cara quejumbrosa se quitan esa chamarra rosa de marca de moda y la
hacen cinturón antes de entrar al cerco de vigilancia de prefectos en la
entrada. Se empiezan a formar los grupitos desde la entrada, son pocos
los que están solos, y algunos andan callados como en procesión
religiosa y otros hablan a grito cantado de lo chévere del día anterior, de
la reta a la hora del recreo o de la forma en la que le van a romper la
ma%&%# a un pu#$#&% a la hora de la salida.
Todos van pasando a la mira inquisitiva de los profesores o
prefectos que revisan uñas, que no estén pintadas o largas o filosas,
uniformes que estén limpios y completos; pelo que esté peinado y sin
piojos; y hoy hasta revisan la lengua, ya que esta es buena para
esconder piercings, y dientes, de paso, solo por si es necesario. A
los ya conocidos mal portados les revisan la mochila en busca de
navajas, cigarros, balones o revistas porno que pararán en un estante
de las casa del profe de educación física.
UNA JORNADA DE TRABAJO EN LA ESCUELA
SECUNDARIA
2. Algunas escuelas tienen formación cívica antes de entrar a clases, entonces los chavos deben
formarse con su grupo, escuchar el choro semanal de la o el director y pasar en marcha modo
zombie a sus salones.
Una vez dentro, la personalidad y atención de cada uno depende de la materia, el profe y la
hora. Si la maestra está sabrosa o el profe es un galán eso ya es un plus que merece la atención
a todo menos a la clase.
Dependiendo desde donde de clases el profe dependerá su campo de
visión así que algunos chicos del frente fingirán poner atención, otros de
verdad la pondrán y otros desearán estar atrás. los de atrás son otro
rollo, unos buscarán escuchar y ver mejor, otros dormirán, echarán relajo
o buscarán la forma de andar de sexosos en público sin ser sobre
notados y aun así habrá el que quiera estar al frente.
En clase habrá entre 4 y 6 líderes, un nerd entre ellos que facilitan el
desaburrimiento entre grupitos.
la hora del recreo y la de la salida no difieren de una aventura en un
centro comercial. unos niños intentan ocultar su torta de huevo con
frijoles cuando ven a otros correr por la de milanesa a la ya bien
socorrida cooperativa. Todos gritan de un lado a otro, se empujan, le
bajan los pantalones al desprevenido y juegan futbol. hacen planes para
el siguiente día mientras son observados por adultos que hacen lo mismo
pero como adultos.