El documento describe la celebración del Día de los Muertos en Ecuador, en el que se combinan tradiciones indígenas y católicas para honrar a los muertos con "guaguas de pan", "colada morada", y otros símbolos que demuestran el sincretismo cultural en el país. El feriado rinde homenaje a la vida después de la muerte y muestra cómo la fe y la religión toman vida durante estas fechas significativas.