Este libro describe el Área Natural Protegida Reserva de Usos Múltiples Estancia "El Carayá" en siete capítulos. Describe el medio natural y socioeconómico, la vegetación y unidades ambientales, la fauna asociada y sus corredores, el impacto de las hormigas cortadoras de hojas, y el manejo ganadero sustentable del bosque nativo. El objetivo es comunicar la importancia de la conservación y el uso sustentable de los recursos naturales en el marco de la producción agropecuaria.
1. See discussions, stats, and author profiles for this publication at: https://www.researchgate.net/publication/337632259
Área Natural Protegida Reserva de Usos Múltiples Estancia El Carayá
Producción, conservación y recuperación de ecosistemas en el Espinal
Argentina
Book · November 2019
CITATIONS
0
READS
237
2 authors:
Some of the authors of this publication are also working on these related projects:
PID NOVEL 2197 - CHARACTERIZATION OF SOILS MODIFIED BY LEAFCUTTING ANTS IN ENTRE RIOS (ARGENTINA) View project
Cambio Climático Delta del Río Paraná View project
Julian Sabattini
National University of Entre Rios
43 PUBLICATIONS 44 CITATIONS
SEE PROFILE
Rafael Alberto Sabattini
National University of Entre Rios
105 PUBLICATIONS 216 CITATIONS
SEE PROFILE
All content following this page was uploaded by Julian Sabattini on 29 November 2019.
The user has requested enhancement of the downloaded file.
2.
3. Área Natural Protegida
Reserva de Usos Múltiples
Estancia El Carayá
Sabattini, Julián Alberto.
Sabattini, Rafael Alberto.
Área Natural Protegida Reserva de Usos Múltiples Estancia El Carayá.
Producción, conservación y recuperación de ecosistemas en el Espinal Ar-
gentino.
1° Edición. Rafaela, 214 páginas, 25 x 20 cm.
Todos los derechos reservados.
Esta publicación no puede ser reproducida, ni en todo ni en parte, ni registrada
en, o transmitida por, un sistema de recuperación de información, en ninguna
forma ni por ningún medio, sea mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético,
electroóptico, por fotocopia o cualquier otro, sin permiso previo por escrito de
los autores.
IMPRESO EN ARGENTINA
Esta edición de 1000 ejemplares se terminó de imprimir en Borsellino Impre-
sos SRL, Rosario, Santa Fe, Argentina, en el mes de octubre de 2019.
ISBN 978-987-47393-0-8
Distribución gratuita
4. C O L A B O R A N
Alvarado, Mariela. Alumna de Ingeniería Agronómica. Cátedra de Ecología de los
Sistemas Agropecuarios. Facultad de Ciencias Agropecuarias. Universidad Nacional
de Entre Ríos. — e-mail: mariealvarado26@hotmail.com
Befani, Romina. Ingeniera Agrónoma. Doctora en Ingeniería Mención Cs. Agro-
pecuarias. Cátedra de Edafología. Facultad de Ciencias Agropecuarias. Universidad
Nacional de Entre Ríos. — e-mail: romina.befani@fca.uner.edu.ar
Bollazzi, Martín. Licenciado en Cs. Biológicas. Doctor en Ciencias. Departamento
de Entomología. Facultad de Agronomía. Universidad de la República.
— e-mail:bollazzi@fagro.edu.uy
Bongiovanni, Susana Nélida. Ingeniera Agrónoma. Asesora Privada, Responsable
Técnica ANP E° “El Carayá”. — e-mail:bongio.susy@hotmail.com
Bortolini, Schaiani Vanessa. Licenciada en Cs. Biológicas. Máster en Ciencias.
Grupo de Biodiversidad y Ecología de la Conservación, IECA.
Facultad de Ciencias. Universidad de la República.
Boschetti, Norma Graciela. Licenciada en Edafología. Doctora en Ciencias de la
Tierra. Cátedra de Edafología. Facultad de Ciencias Agropecuarias. Universidad Na-
cional de Entre Ríos. — e-mail: graciela.boschetti@fca.uner.edu.ar
Brazeiro, Alejandro. Licenciado en Cs. Biológicas. Doctor en Ecología. Grupo de
Biodiversidad y Ecología de la Conservación, IECA. Facultad de Ciencias. Universi-
dad de la República. — e-mail: brazeiro@fcien.edu.uy
Brussa, Patricia. Licenciada en Cs. Biológicas. Grupo de Biodiversidad y Ecología de
la Conservación, IECA. Facultad de Ciencias. Universidad de la República. — e-mail:
patriciabrussa@gmail.com
Cian, Juan Carlos. Ingeniero Agrónomo. Asesor Privado.
— e-mail: juancarloscian@hotmail.com
Cravino Mol, Alexandra. Licenciada en Cs. Biológicas. Grupo de Biodiversidad y
Ecología de la Conservación, IECA. Facultad de Ciencias. Universidad de la Repúbli-
ca. — e-mail: alecravino@gmail.com
Dopazo, Víctor Manuel. Técnico Agropecuario. Coordinador Estancia El Carayá.
Las Taperitas SA. — e-mail: vdopazo@lastaperitas.com.ar
Haretche, Federico. Licenciado en Cs. Biológicas. Grupo de Biodiversidad y Eco-
logía de la Conservación, IECA. Facultad de Ciencias. Universidad de la República.
— e-mail: fharetche@gmail.com
Hernandez, Juan Pablo. Ingeniero Agrónomo. Cátedra de Edafología. Facultad de
Ciencias Agropecuarias. Universidad Nacional de Entre Ríos.
— e-mail: juanp.hernandez@fca.uner.edu.ar
Muzzachiodi, Norberto. Licenciado en Edafología. Especialista en Educación Am-
biental. Máster en Evaluación de Impacto Ambiental. Cátedra de Gestión Ambien-
tal, Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas. Universidad Nacional del Litoral.
— e-mail:nmuzzachiodi@hotmail.com
Quintero, César Eugenio. Ingeniero Agrónomo. Doctor en Ciencias de la Tierra.
Cátedra de Edafología. Facultad de Ciencias Agropecuarias. Universidad Nacional
de Entre Ríos. — e-mail: cesar.quintero@fca.uner.edu.ar
Sabattini, Iván Alberto. Ingeniero Agrónomo. Asesor Privado.
— e-mail:ivanagro@live.com.ar
Sabattini, Julián Alberto. Ingeniero Agrónomo. Doctor en Ingeniería Mención Cs.
Agropecuarias. Cátedra Ecología de los Sistemas Agropecuarios, Facultad de Cien-
cias Agropecuarias. Universidad Nacional de Entre Ríos.
— e-mail: julian.sabattini@fca.uner.edu.ar, juliansabattini@hotmail.com
Sabattini, Rafael Alberto. Ingeniero Agrónomo. Cátedra Ecología de los Sistemas
Agropecuarios, Facultad de Ciencias Agropecuarias. Universidad Nacional de Entre
Ríos. — e-mail: rafael.sabattini@fca.uner.edu.ar, rsabatti@outlook.com
Sandobal, Lautaro Lucas. Médico Veterinario. Las Taperitas S.A.
— e-mail:lsandobal@lastaperitas.com.ar
Urteaga Omar, Florencia. Ingeniera Agrónoma. Doctora en Ingeniería Mención
Cs. Agropecuarias. Cátedra de Estadística y Diseño Experimental. Facultad de Cien-
cias Agropecuarias. Universidad Nacional de Entre Ríos.
— e-mail: florencia.urteaga@fca.uner.edu.ar
Williner, Javier. Ingeniero Agrónomo. Las Taperitas S.A.
— e-mail: jawilliner1@lastaperitas.com.ar
5. Índice
Prólogo
CAPÍTULO I | Área Natural Protegida “El Carayá”: introducción.
1.1. Presentación de la empresa
1.2. Historia de la región y el campo
1.2.1 Los aborígenes
1.2.2 Los Conquistadores
1.2.3 Los Jesuitas
1.2.4 Organización Nacional y de la Provincia
1.2.5 Siglo XIX - XX Destino final de las propiedades
1.3. Fundamentación del ANP “El Carayá”
1.4. Antecedentes de importancia
08
10
12
18
18
19
19
20
20
24
26
CAPÍTULO II | Caracterización del medio natural y socioeconómico.
2.1. Descripción del entorno socioeconómico
2.1.1. Personal del establecimiento
2.2. Caracterización climática
2.3. Geomorfología, topografía y suelos
2.4. Hidrología
30
32
33
35
38
47
CAPÍTULO III | Caracterización de la vegetación, unidades ambientales
y asociaciones edáficas.
3.1. Descripción de la vegetación y su entorno
3.2. Unidades ambientales y asociaciones vegetales
3.3. Sucesión Ecológica: dinámica espacial de la arbustización
50
52
81
86
CAPÍTULO IV | Descripción de la fauna asociada y su nivel de
conservación. Corredores faunísticos.
4.1 Caracterización faunística de la región
4.1.1. Peces
4.1.2. Anfibios
4.1.3. Reptiles
4.1.4. Mamíferos
4.1.5. Avifauna
4.2. Corredores de vegetación y avistaje de fauna. Unidades de control
92
94
94
97
101
105
108
117
CAPÍTULO V | Hormigas cortadoras de hojas: impactos sobre
el bosque nativo.
5.1. Generalidades de las hormigas cortadoras de hojas
5.2. Las cortadoras del ANP “El Carayá”
5.2.1. Características morfológicas de Atta vollenweideri
5.2.2. Descripción de la estructura externa de los nidos
5.2.3. Distribución espacial de las colonias
5.3. Atta vollenweideri como ingeniera del ecosistema
5.3.1. Modificaciones sobre las condiciones edáficas
5.3.2. Modificaciones e impactos sobre la vegetación
130
132
136
137
141
146
149
150
154
CAPÍTULO VI | Manejo ganadero en el bosque nativo: implementa-
ción de técnicas y criterios de sustentabilidad.
6.1. Introducción
6.2. Receptividad y estimación de carga animal por potrero
6.3. Recuperación de áreas degradadas y esquemas de manejo
6.3.1. Recuperación áreas degradadas: manejo y control de arbustivas
6.3.2. Implementación y evaluación de los sistemas de pastoreo:
caso de estudio
6.4. Conclusiones generales del manejo de bosques protegidos
6.5. Criterios de sustentabilidad del bosque nativo
162
164
168
172
173
178
183
187
CAPÍTULO VII | Los Palmares de Butia yatay (Mart.) Becc en Améri-
ca del Sur: contribución a la evaluación de su estado de conservación.
7.1.Introducción
7.2. La palmera Butia yatay
7.3. Los palmares de Yatay como ecosistema
7.4. Distribución histórica y actual de los palmares de Yatay
7.5. Estado de conservación y principales amenazas
7.6. Principales iniciativas de conservación
7.7. Consideraciones finales
194
196
198
200
202
207
208
210
6. 8 9
Ing. Rafael A. Sabattini
— Profesor Titular
Ecología de los Sistemas Agropecuarios
Facultad de Ciencias Agropecuarias
Universidad Nacional de Entre Ríos
la carga animal que soportarían del sistema productivo.
Otros estudios ligados a la realización de inventarios en 2004 fueron el punto de partida para abordar
la conservación de la fauna, especialmente en mamíferos, anfibios y aves, trabajos dirigidos por el Dr.
Hernán Povedano y la UNC (Universidad Nacional de Córdoba). Además, la ubicación de Estancia
“El Carayá” coincide con parte del Área Nº 8 del AICA (Áreas Importantes para la Conservación de
las Aves), según Di Giacomo (2007).
Entre los años 2012 y 2019 se realizó una serie de estudios pioneros sobre la base de la sustentabilidad
y producción del bosque nativo con la asistencia técnica de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de
la UNER. Esta estrategia basada en la conservación de dichos bosques y, a la vez, en la recuperación
de las áreas degradadas, planteó la posibilidad de integrar la producción pecuaria y el cuidado de los
recursos naturales, a partir de cinco unidades de ambiente y vegetación conformadas por la dominan-
cia de tipos de bosques nativos y el suelo asociado.
Todos estos aspectos, lineamientos y la posibilidad de preservar las unidades de ambiente y vegetación
típicos del centro norte de Entre Ríos están detallados y descriptos para que el lector pueda apreciar
la importancia del bosque nativo en un Área Natural Protegida Reserva de Usos Múltiples que forma
parte de la Ecorregión del Espinal. El libro muestra las posibilidades de producción y conservación
de los bosques nativos de “El Carayá” y la importancia de conocer la flora y fauna para el desarrollo de
un manejo eco-productivo basado en la sustentabilidad y mantenimiento de los recursos naturales,
tal como se detalla en el Proyecto de Manejo de Áreas Naturales Protegidas con Usos Múltiples del
año 2014 y ratificado a través de la Ley Provincial Nº10534 en 2017.
El compromiso de Las Taperitas S.A. con los valores ambientales y la preservación de los recursos
naturales fue el eje para la creación del ANP y, a la vez, el punto de partida para comunicar con esta
obra aspectos de educación ambiental a estudiantes de nivel medio y universitario con orientación
agropecuaria y en las ciencias biológicas. Además, se persigue el objetivo de concientizar a producto-
res y profesionales afines al sector agropecuario, para profundizar esquemas de manejos productivos
armónicos y compatibles con el ecosistema del bosque nativo, vital como valor ecosistémico y necesa-
rio para contrarrestar y atenuar los efectos del cambio climático global.
Esperamos que este libro despierte el interés por conocer los recursos naturales que utilizamos, en
nuestro caso el bosque nativo y la importancia de su conservación y su utilización como sistema agro-
pecuario productivo, en el marco de los ejes que regulan la sustentabilidad ecológica, productiva y
social.
El libro aborda, a través de siete capítulos, los aspectos más salientes vinculados al Área Natural Protegida
(ANP) Reserva de Usos Múltiples Estancia “El Carayá”, destacando la visión de conservación y el cuidado
del medio ambiente por parte de la empresa Las Taperitas S.A. En tal sentido, se realiza una descripción
del medio natural y socioeconómico, su vegetación, unidades ambientales y asociaciones edáficas, la fau-
na asociada, su nivel de conservación, con sus corredores faunísticos típicos. Por último, la obra destaca
cuatro aspectos básicos y relevantes representativos del territorio: las hormigas cortadoras de hojas y su
impacto sobre el bosque nativo, el manejo ganadero en el bosque nativo, la implementación de técnicas y
criterios de sustentabilidad y la conservación de la palmera yatay y su estado actual.
Es importante destacar que la Estancia “El Carayá” estuvo dedicada siempre a la actividad pecuaria, bá-
sicamente a la cría de bovinos de carne. Pero, desde la adquisición del campo por parte de Las Taperitas
S.A. en 1983, ha centrado su atención en la recuperación del bosque nativo y el manejo ganadero. Otras
acciones en 1990, en el área adyacente al Arroyo Puerto -límite Sur- de “El Carayá”, permitieron clausurar
al pastoreo una superficie de aproximadamente 250 ha paralelas al arroyo, con el objeto de proteger la
cuenca.
Con la finalidad de revertir esta situación, se plantearon numerosas estrategias de recuperación, y entre
los años 2002 y 2003, se incluyeron prácticas de manejo basadas en el conocimiento ecológico am-
biental y productivo del bosque nativo para detener los procesos de arbustización, bajo la asistencia
técnica de la Cátedra de Ecología de los Sistemas Agropecuarios de la Facultad de Ciencias Agropecua-
rias de la UNER (Universidad Nacional de Entre Ríos). Bajo los mismos principios rectores, en 2012 se
plantearon otros esquemas de manejo basados en el ordenamiento territorial de bosques nativos a nivel
predial, efectuándose la zonificación del campo y estableciendo los tipos de bosques nativos asociados a
las series de suelo. Estos estudios permitieron comprender cuáles eran los tipos de bosques presentes y
cuál era su estado, caracterizando a los potreros según su nivel de arbustización y permitiendo evaluar
Producción, conservación y recuperación de ecosistemas en el Espinal Argentino
Área Natural Protegida Reserva de
Usos Múltiples Estancia “El Carayá”
Prólogo
7. 10 11
/1: Técnico Agropecuario, Encargado Estancia El Carayá, Las Taperitas S.A.
e-mail: vdopazo@lastaperitas.com.ar
/2: Médico Veterinario, Apoderado Las Taperitas S.A.
e-mail: lsandobal@lastaperitas.com.ar
/3: Ingeniero Agrónomo, Las Taperitas S.A.
e-mail: jawilliner1@lastaperitas.com.ar
/4: Cátedra Ecología de los Sistemas Agropecuarios, Facultad de Ciencias Agropecuarias.
Responsable Técnico del ANP El Carayá.
e-mail: julian.sabattini@fca.uner.edu.ar, juliansabattini@hotmail.com
Área Natural Protegida
“El Carayá”: introducción
Dopazo Víctor Manuel 1} / Sandobal Lautaro 2} / Williner Javier 3} / Sabattini Julián Alberto 4}
CAPÍTULO 1
/1: Técnico Agropecuario, Encargado Estancia El Carayá, Las Taperitas S.A.
e-mail: vdopazo@lastaperitas.com.ar
/2: Médico Veterinario, Apoderado Las Taperitas S.A.
e-mail: lsandobal@lastaperitas.com.ar
/3: Ingeniero Agrónomo, Las Taperitas S.A.
e-mail: jawilliner1@lastaperitas.com.ar
/4: Cátedra Ecología de los Sistemas Agropecuarios, Facultad de Ciencias Agropecuarias.
Responsable Técnico del ANP El Carayá.
e-mail: julian.sabattini@fca.uner.edu.ar, juliansabattini@hotmail.com
Área Natural Protegida
“El Carayá”: introducción
Dopazo Víctor Manuel 1} / Sandobal Lautaro 2} / Williner Javier 3} / Sabattini Julián Alberto 4}
11. 18 19
1.2.2 Los Conquistadores
Juan de Garay llamó al territorio “La Otra Banda” cuando, luego de
fundar Santa Fe en 1573, ingresó a las tierras para explorarlas, y al
considerarlas una extensión de Santa Fe las entregó a sus acompa-
ñantes en reconocimiento por la labor realizada y a los efectos de que
iniciaran su poblamiento. De esa manera, ocupado el territorio y ase-
gurada la defensa y dependencia de Santa Fe, se comenzaría a poblar
estableciéndose estancias para la cría de ganado.
Don Juan de Garay llegó a la región alrededor del año 1573. Poco
después se trasladó a este nuevo territorio su yerno Hernando Arias
de Saavedra (Hernandarias). Este conquistador organizó expedicio-
nes al interior de la provincia y no tardó en librar combates con los
indígenas, a quienes venció y redujo. (3)
El actual departamento donde se encuentra Estancia “El Carayá”
debe su nombre a Feliciano Rodríguez, quien acompañó a Juan de
Garay en la fundación de Santa Fe y que, alrededor de 1606, obtuvo
tierras para establecer una reducción de mepenes en la zona.
Hernandarias, como gobernador de Asunción y luego de Buenos Ai-
res, condujo varias expediciones a Entre Ríos, la primera de las cuales
fue en 1607. En esa expedición cruzó el río Paraná por el paso Cabayú
(de los Caballos) y atravesó la provincia desde la actual localidad de
Hernandarias hasta Salto Grande, desde donde cruzó el río Uruguay.
Realizó campamento en la zona de Rincón de Montiel -hoy Sauce de
Luna- donde encontró guaraníes que vaqueaban para los jesuitas del
colegio de la ciudad de Corrientes y que entendían el idioma español.
El sacerdote Policarpo Dufó creó en 1730 una misión en la zona de
Feliciano.
1.2.3 Los Jesuitas
A mediados del siglo XVIII, el principal terrateniente de lo que hoy es
Entre Ríos era la Compañía de Jesús. A mediados de 1768 los jesuitas
fueron expulsados del Imperio español y sus tierras en esta provincia
pasaron a ser administradas por la Junta de Temporalidades de Santa
Fe hasta su remate público. Alrededor de 1771 los pobladores de Fe-
liciano, a instancias de los misioneros, pidieron a las autoridades que
se les dotara de una capilla.
Entre 1776 y 1777 el teniente gobernador del departamento de Yapeyú
en la gobernación de las Misiones Guaraníes, Juan de San Martín,
padre del Gral. José de San Martín, mandó a ocupar las tierras vacías
hasta el arroyo Yeruá y fundó las estancias ganaderas comunitarias
(o tupambaé) de Concepción de Mandisoví (en julio de 1777, en las
cercanías de la actual ciudad de Federación) y Jesús del Yeruá (al sur
de Concordia) (4) en el norte de la actual provincia de Entre Ríos. (5)
1.2.
Historia de la
región y el campo
1.2.1 Los Aborígenes
El actual territorio entrerriano estaba habitado por poblacio-
nes aborígenes que desarrollaron culturas particulares y defi-
nidas: guaraníes, chanás, charrúas, caingang, entre otros, divididos,
a su vez, en subgrupos culturales. Los guayquirarós eran una fracción
de los caingang y desde tiempos muy remotos deambularon por Entre
Ríos. Por otro lado, los originarios precharrúas, también llamados cai-
naroes y chanás salvajes por los cronistas, venían desde Brasil. De este
modo, la Mesopotamia estaba muy transitada y en estado de agitación
constante.
A comienzos de la invasión europea, tenían por enemigos y vecinos a
los mocoretás -ribereños del Paraná- entre el norte del río Guayquira-
ró y el sur del Feliciano. En el mapa de distribución de los antiguos ha-
bitantes de Entre Ríos, Antonio Serrano localiza en el año 1650 a los
mepenes y caxas en la desembocadura del río Guayquiraró; a los to-
caguas y mocoretás, en el tramo final del Feliciano, mientras que en el
centro del departamento, a los yaros en 1726. En cambio, al sur posi-
ciona a los charrúas entre 1706 y 1749, hábiles cazadores y pescadores
nómades provenientes de la Banda Oriental, con una aguerrida forma
de combate. Éstos compitieron por la posesión de montes y arroyos
durante dos siglos, terminando con la desaparición de los rebeldes.
Los enfrentamientos por el dominio del territorio culminaron en es-
clavitud; en cualquier caso, con el consecuente mestizaje que fue for-
jando rostros e identidades. A medida que buscaban alimento y refu-
gio, fueron colonizando otros lugares como San José de Feliciano.
Así, se alcanza a consignar sintéticamente a los primeros cainaroes,
chanás salvajes y guayquirarós, descendientes de los caingang, hasta
los grupos charrúas y yaros, pasando por los mocoretás, mepenes y
caletones. Probablemente, dice Miguel Ángel Fernandez (1), los últi-
mos en llegar fueron los guaraníes, como trabajadores en las misiones
jesuíticas primero y escapando de los esclavistas portugueses en los
finales del siglo XVIII. (2)
12. 20 21
Además, era inexorable con los pillos. De allí surge la historia de que,
en San Diego, tenía una jaula de postes de ñandubay con una “tigra”.
La misma fue contada por Don Ramón Gamarra (quien comentaba
haberla visto ya abandonada), donde los malvivientes o gauchos al-
zados eran arrojados a ella como castigo, lo cual permitiría afirmar
que la Estancia San Diego fue un reducto y prisión de rebeldes en el
marco de las disputas entre unitarios y federales.
Los tiempos de la modernización llegaron entre 1870 y 1890 donde se
fueron definiendo las “Estancias” y se dieron cambios en las organiza-
ciones del trabajo, apareciendo nuevas formas de producción acordes
a los movimientos comerciales internacionales. En 1879 la familia Sti-
venson funda “Santa María del Carallá”, tomando el nombre del Arroyo
Caralla derivando en el actual nombre “El Carayá”. Para 1893 contaba
con 10.300 ha, y entre los adelantos que se incorporaron, se encuentran
bañaderos para vacunos y lanares, 10 molinos, 8 tanques australianos
y bebederos de hierro galvanizado en 7 potreros. Además, tenían 5400
vacunos de los cuales 2400 eran de la raza Hereford y 3700 ovinos de
la raza Romney Marsh. Posteriormente, a partir de 1950, la familia Ac-
quarone unifica San Diego y Carayá en una sola unidad, llegando de este
modo a 1983 a manos de sus actuales propietarios.
Referencias
(1)
Fernández, Miguel Ángel. “San José de Feliciano, un pago con historia 1”. Buenos Aires: De los cuatro vientos, 2006.
(2)
regionlitoral.net/2012/07/feliciano-origenes.html
(3)
turismoentrerios.com/provincia/historia.htm
(4)
es.wikipedia.org/wiki/Historia_de_la_Iglesia_cat%C3%B3lica_en_Entre_R%C3%ADos_hasta_1810
(5)
es.wikipedia.org/wiki/San_Jos%C3%A9_de_Feliciano
(6)
turismoentrerios.com/provincia/historia.htm
(7)
elhistoriador.com.ar/los-caudillos/
(8)
presidentesargentinos.com/487/justo-jose-de-urquiza-caudillo-y-gobernador-entrerriano-empresario-y-estanciero-primer-presidente-constitucional/
(9)
Lisardo Sierra (El Litoral - 1/3/1926)
1.2.4 Organización Nacional y de la Provincia
El rápido progreso económico, basado principalmente en el ganado
existente, permitió que hacia fines del siglo XVIII y comienzos del XIX,
se embarcaran grandes cantidades de cuero, se pusieran en marcha
fábricas para el procesamiento de carne y cebo y se utilizaran las reser-
vas de madera de ñandubay para la producción de postes y las piedras
calizas de buena calidad con que se contaba para la construcción. (6)
Entre Ríos se plegó inmediatamente a la causa de la Revolución de
Mayo y las ciudades de la costa del Paraná abastecieron a la expedición
de Belgrano al Paraguay. (7)
El auge del caudillismo fue un fenómeno social de la América Latina
posterior a la Independencia. Durante el período 1820 - 1835, frente a
la crisis del Estado y a la ausencia durante muchos años de un gobierno
central fuerte, los caudillos se transformaron, en muchos casos, en el
único poder real en sus zonas de influencia. Los caudillos surgen como
una forma de autoridad más cercana a los problemas de la gente. Los
ejércitos gauchos no eran hordas predatorias como las de Atila, sino
que estaban estrechamente vinculados a la institución que les había
dado origen y que se fortalecía cada vez más: la estancia. (8) Hay pocos
personajes como el entrerriano Justo José de Urquiza en la historia
argentina, de carácter egocéntrico, magnánimo y multifacético. Fue
empresario, estanciero, militar, gobernador y primer presidente cons-
titucional, padre de ni más ni menos que 23 hijos reconocidos y un
visionario para su época, revolucionario en sus ideas y acciones. Fue
odiado y amado, hizo evolucionar a su provincia desde lo económico
y social, impulsor de la escuela primaria gratuita construyó innume-
rables establecimientos en su provincia, trajo caudales de inmigrantes
y creó de una forma muy peculiar colonias, constituyéndose durante
más de una década en el hombre más poderoso, desde lo político y
económico, de toda la Argentina. (8)
1.2.5 Siglo XIX - XX Destino final de las propiedades
Pasando por diferentes propietarios, Don Carlos Anderson fue cono-
cido por la fundación de la Estancia San Diego en 1860. Anderson es
considerado el último caudillo entrerriano, quien fue testigo presen-
cial de la muerte del Gral. Urquiza. Carlos Anderson, cuando osten-
taba el grado militar de teniente, se encontraba al lado de uno de sus
hermanos que estaba enfermo en su cama cuando el 11 de abril de
1870 caía asesinado en el Palacio de San José, el Gral. J.J. de Urquiza.
Ambos hermanos integraban la Guardia de ese Palacio. Nada pudie-
ron hacer para salvarle la vida a Urquiza, según manifestó varios años
después, porque fueron aprehendidos por una parte de los asesinos
que penetraron furtivamente en el Palacio. Luego, Carlos Anderson
se pasa a las filas del ejército de López Jordán, combatiendo junto a
este general. (9)
En 1880 el movimiento revolucionario que estalló en Buenos Aires
tenía por bandera al Dr. Carlos Tejedor quien estaba postulado a pre-
sidente de la República. Carlos Anderson junto al Coronel Gaurum-
ba, restablecieron la calma a los habitantes de Concordia entrando
con miles de lanceros de este caudillo de Federación.
Carlos Anderson era muy cercano a Presidente del país, Gral. Julio A.
Roca, habiendo recibido numerosas invitaciones al despacho presi-
dencial. Entre los años 1882 y 1884, fue expedicionario al Chaco. Ter-
minada esta campaña, regresó a su Estancia “San Diego”, alejándose
de los amasijos políticos. A sus estancias llegaban muchas personas
con escaso control y se marchaban de la misma manera, llevando los
caballos que necesitasen. Por eso, muchos se sorprendían al ver caba-
llos de propiedad del Coronel Anderson en Brasil, Paraguay, Bolivia
y Uruguay. Su comportamiento respondía a una honradez ejemplar.
15. 26 27
Figura 1.1.
Localización geográfica del ANP ‘El Carayá’: distrito Atencio,
departamento Feliciano y provincia de Entre Ríos.
1.4
Antecedentes
de importancia
En los años 2002 a 2003, se buscaron diversas alternativas
para frenar los procesos de enmalezamiento, entre ellas, se
iniciaron prácticas de pastoreo rotativo sobre una prueba
piloto de 474 ha divididas en 6 potreros, bajo la asistencia
técnica de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNER (Saba-
ttini et al., 2003).
Posteriormente, en 2012, se plantearon esquemas de manejo basa-
dos en el ordenamiento territorial de bosques nativos a nivel predial,
efectuándose la zonificación del campo y estableciéndose ambientes
de bosques nativos relacionados con las series de suelo. El conoci-
miento de los tipos de montes y sus estados de conservación, permi-
tieron establecer potreros con la caracterización del nivel de enmale-
zamiento y, por ende, la evaluación de la receptividad y carga animal
que soporta el sistema productivo.
Estos lineamientos y la posibilidad de conservar las unidades de am-
biente y vegetación típicos del centro norte de Entre Ríos, más preci-
samente del Espinal ubicado al sur del departamento Feliciano sobre
la cuenca del Arroyo Feliciano, motivaron al desarrollo del presente
plan de manejo del Área Natural Protegida Reserva de Usos Múlti-
ples “El Carayá” sobre una superficie de 10.402 ha.
Es así que el campo, a partir de dos Convenios de Asistencia Técnica
(2012-2016) celebrados con la Facultad de Ciencias Agropecuarias
de la UNER, inició una serie de estudios pioneros sobre la limpieza
química aérea de áreas degradadas para la recuperación de montes
nativos, las unidades de ambiente y vegetación y el impacto de las
hormigas cortadoras de hojas sobre los componentes del ecosiste-
ma, entre otros aspectos. Esta estrategia de la empresa basada en la
conservación de los bosques nativos y de la recuperación de las áreas
degradadas planteó, además, la posibilidad de integrar la produc-
ción pecuaria con la preservación de los recursos naturales, basado
en unidades de ambiente y vegetación (ver Capítulo III), conformado
por la dominancia de tipos de montes y suelo.
16. 28 29
Figura 1.3. Distribución de los potreros,
instalaciones y mensuras cortafuego del
ANP ‘El Carayá’.
vista de la avifauna, se observó que la ubicación del ANP coincidiría
con parte del Área N°8 del AICA, declarada para la conservación del
patrimonio ornitológico (Di Giacomo, 2007).
Por último, se realizó un proyecto de represamiento en el sector de
chacras (aprobado por la Secretaría de Ambiente Sustentable en
2012) con el objetivo de almacenar agua de lluvia para el riego de
arroceras, fundamentalmente.
Figura 1.2. Sector del ANP Reserva de
Usos Múltiples dentro de la Estancia
‘El Carayá’
Trabajos realizados en el área destacan la vulnerabilidad de la Cuen-
ca del Arroyo Feliciano y, en el caso particular del proyecto ANP “El
Carayá”, por la cercanía del Arroyo Puerto (Díaz et al., 2009).
Otro elemento de consideración en la decisión de plantear un plan
de manejo del ANP, fue la extensa superficie de bosques nativos que
permitiría mantener una riqueza florística y su fauna asociada, im-
portante para las diversas unidades ambientales.
A su vez, en 2004, se inició una serie de estudios ligados a la con-
servación de la fauna, mamíferos, anfibios y aves dirigidos por el Dr.
Hernán Povedano y por la UNC. Recientemente, desde el punto de
17. 30 31
CAPÍTULO 2
/1: Profesor Titular Cátedra Ecología de los Sistemas Agropecuarios, Facultad de Ciencias
Agropecuarias. Asesor Privado, Responsable Técnico del ANP El Carayá.
e-mail: rsabatti@fca.uner.edu.ar, rsabatti@outlook.com
/2: Ingeniera Agrónoma, Asesora Privada, Responsable Técnica del ANP El Carayá.
e-mail: bongio.susy@hotmail.com
Caracterización del medio
natural y socioeconómico
Sabattini Rafael Alberto 1} / Bongiovanni Susana Nélida 2}
18. 32 33
El ANP El Carayá se encuentra dentro de la “Cuenca del
Arroyo Feliciano” que comprende territorio de la zona agro-
económica homogénea de “Feliciano” – ZAHs Feliciano-
(Engler et al. 2008) basado en la zonificación ecológica y las
fracciones censales del INDEC. La principal vía de comunicación de
la estructura productiva es la Ruta Provincial Nº 1 que comunica la
ciudad de San José de Feliciano con La Paz. En tanto que la Ruta
Provincial N° 28 (de ripio) comunica la zona hacia el norte con Co-
rrientes y al sur con el departamento Federal. Por su parte, la Ruta
Provincial Nº 2 (de ripio) vincula a Feliciano con Federal (Engler et
al. 2008). En esta zona se encuentra instalada una Agencia de Exten-
sión Rural del INTA y un proyecto Minifundio.
Según Engler et al. (2008) las principales producciones agropecua-
rias del ZAHs Feliciano, son la ganadería bovina -representando
la zona de cría más tradicional de la provincia- y ovina, aunque en
los últimos años se observa un importante avance de la agricultu-
ra. Villanova y Díaz (2013) estiman que hay aproximadamente entre
400.000 y 450.000 cabezas bovinas, de las cuales el 78% correspon-
de a ganado bovino y el 22% a ovino, siendo las zonas donde se en-
cuentra la mayor cantidad de ganado ovino de la provincia.
Según el Proyecto SIBER (Sistema Integral de la Bolsa de Entre
Ríos), en la zona se sembraron cultivos agrícolas anuales por 35.000
ha, de las cuales el 52% correspondió a soja con un rendimiento de 25
qq/ha, el 22% arroz con un rendimiento de 79 qq/ha y el resto de los
cultivos participa con valores menores al 10%: maíz 8%, girasol 7%,
trigo 6%, sorgo 5% y lino 1% (Villanova y Díaz, 2013).
Respecto a los canales de comercialización, los productores ganade-
ros lo realizan por medios habituales en toda el área ganadera de la
pampa húmeda. Se vende en forma directa en estancia o en remates
y ferias zonales (Villanova y Díaz, 2013).
La zona se caracteriza por la concentración de unidades productivas
en los estratos menores a 100 ha, los que reúnen el 53% de EAPs
(explotaciones agropecuarias) y ocupan el 5% de la superficie. Cabe
destacar que las EAPs del estrato de 500 ha o más, que representan el
2.1
Descripción del
entorno socioeconómico
18% del total, ocupan el 81% de la superficie de esta zona y poseen
una superficie media de 734 ha y 3.142 ha en los estratos de 500 a
1.199 o más de 1.200 ha respectivamente (Engler et al. 2008).
El régimen de tenencia que predomina es el de propiedad ocupando
el 83% de la superficie censada de la zona. Al considerar las distintas
formas de tenencia por EAPs, el 72% de las mismas están en forma
exclusiva bajo el régimen de propiedad, ocupando el 77% de la super-
ficie, mientras que solo el 8% de las EAPs presentan superficie propia
y arrendada, ocupando el 10% del área censada en la zona (Engler y
otros, 2008). Los sistemas de producción de la zona se caracterizan
por contar con EAPs con orientación predominantemente ganadera
en el 97% de los casos y de la superficie censada. Los sistemas predo-
minantes son el ganadero de bovinos de carne y ovinos. Ambos tota-
lizan el 87% de las EAPs y el 71% de la superficie censada de la zona.
Según Engler et al. (2008), las formas de organización social del tra-
bajo mayoritariamente están basadas en una organización social de
tipo familiar con orientación ganadera, tanto las EAPs con mano de
obra familiar como las no familiares corresponden a esta orientación
productiva en un 97 y 96% respectivamente.
2.1.1 Personal del establecimiento
El factor social en el ANP El Carayá refleja una situación preponde-
rante en el manejo y control del Área Natural Protegida. La Estancia
“El Carayá” cuenta con una dotación de 19 personas que, en su gran
mayoría, viven en el campo (Figura 2.1), garantizando el cuidado del
ambiente y ejerciendo su rol de custodia ante el ingreso de personas
no autorizadas y que ocasionan daños sobre la flora y la fauna del
lugar. Por otra parte, el personal de campo realiza periódicamente ca-
pacitaciones y entrenamientos específicos sobre el cuidado del medio
ambiente, siguiendo la política de capacitación y mejora continua de
los recursos humanos de la empresa.
19. 34 35
Figura 2.1. Organigrama del ANP El Carayá en 2019.
DE A PIÉ ADMINISTRACIÓN PASTURAS CARAYÁ YATEBURÍ SAN DIEGO TRACTORISTAS
Coordinador
Víctor Dopazo
Especializado
Damián
Hidalgo
Administrativa
Miriam
Stivanello
Capataz
Esteban
Aguirre
Tractorista
Heriberto
Almada
Capataz
Horacio
Juárez
Peón General
Alcides
Juárez
Peón General
Luis Miguel
Juárez
Peón General
José María
Quintana
Capataz
Pascual
Bargas
Capataz
Ramón
Alegre
Peón General
Luis
Valdez
Peón General
Leonardo
González
Peón General
William
Ojeda
Peón General
Ramón
Juárez
Peón General
César
Juárez
Peón General
Oscar
Ojeda
Encargado Tractorista
Gabriel Aguilar
La provincia de Entre Ríos se encuentra ubicada dentro de
los climas de Dominio Atlántico caracterizado por la exis-
tencia de gradientes térmicos con marcadas diferencias
hídricas. Está dividida en dos regiones climáticas: una pe-
queña franja al norte de la provincia que corresponde al clima Sub-
tropical Húmedo de Llanura, y otra que cubre el resto de su territorio
y corresponde al clima Templado Húmedo de Llanura (Rojas y Sa-
luso, 1987). Según la clasificación climática de Daus y García Gache
(1955), la parte norte de Entre Ríos corresponde al clima subtropical
sin estación seca, que se caracteriza por su escasa oscilación anual de
temperatura y abundancia de precipitaciones que no faltan en nin-
gún mes.
El ANP El Carayá se encuentra en una posición intermedia por su
condición geográfica, pero corresponde a la región Subtropical Hú-
medo de Llanura (Figura 2.2). Es una planicie que se encuentra con-
dicionada por los vientos húmedos del anticiclón del Atlántico Sur
y temporalmente por el Pampero provocando lluvias y descensos de
temperatura en su frente de avance, o bien por la Sudestada, que in-
2.2
Caracterización
climática
troduce aire frío saturado de humedad, que da lugar a períodos pro-
longados de lluvias y temperaturas muy estables. Por la suavidad y
ausencia de situaciones extremas, tiene una muy buena aptitud para
el cultivo de secano de cereales y forrajeras y la cría de ganado.
La temperatura media anual de la provincia, por su posición geográ-
fica intermedia entre el ecuador y el polo, aumenta latitudinalmente
de Sur a Norte de 17 a 20,5º C, siendo enero el mes más cálido con
temperaturas promedio de 25 a 27° C, y julio el mes más riguroso con
una temperatura media de 12 a 14º C, respectivamente (Figura 2.2).
En la zona de Feliciano (LS 30º 37’ – LO 58º 49’), la temperatura
media anual es de 18,9º C, mientras que la temperatura máxima
promedio es de 24,8º C. En las épocas invernales el promedio de
la temperatura mínima es de 12º C, lo que indica la poca amplitud
térmica anual (aproximadamente de 12° a 14° C), característica que
corrobora el clima subtropical (Plan Mapa de Suelos, 1986). La fe-
cha promedio de la primera helada para el norte de la provincia es el
11 de julio y de la última helada el 11 de agosto, aunque se han
20. 36 37
Figura 2.2. Caracterización climática de Entre Ríos (Templado Húmedo y Subtropical Húmedo); Isotermas; Isohietas (Pp) y Evapotraspiración anual (ETP). Tomado
de Rojas y Saluso (1987). Figura 2.3. Evolución de las precipitaciones históricas anuales de la Estancia “El Ca-
rayá” (1982-2018). En línea verde se muestra el promedio anual del período (1.401
mm).
Figura 2.4. Distribución de las precipitaciones mínimas, medias y máximas
promedio de la Estancia “El Carayá” durante el período 1982 a 2018.
registrado algunas extremas en mayo y septiembre.
La precipitación media anual disminuye en forma gradual de NE a
SO y oscila entre 1.000 y 1.300 mm en años normales, sin las influen-
cias de los fenómenos de La Niña o El Niño, concentradas entre octu-
bre y marzo (Figura 2.2). Además de la regularidad de las precipita-
ciones, la gran cantidad de ríos y arroyos que atraviesan la provincia,
brindan su cuota de humedad al suelo y al aire.
Teniendo en cuenta la cercanía del área de estudio y la faltante de in-
formación de la precipitación histórica, se considera más cercano con
la localidad de Federal, donde se registraron precipitaciones medias
de 1.130 mm anuales durante el período 1934-1970 con un prome-
dio de 72 días anuales con precipitación según el INTA (Plan Mapa
de Suelos, 1986). En el mismo período se registraron precipitaciones
máximas absolutas de 1915,8 mm anuales y 776,3 mm anuales de pre-
cipitaciones mínimas absolutas.
En la Estancia “El Carayá” en el período 1988 a 2018, se registró un
aumento del 7,6% en las precipitaciones promedio anuales (1.401
mm), comparadas con los años 1950 a 1981 (1.301 mm). Además, se
observa que, en los últimos 25 años, solo 11 de ellos registraron pre-
cipitaciones anuales mayores a la media, mientras que las restantes
están por debajo (Figura 2.3). Es importante destacar que en 2004 se
registró el año con menores precipitaciones (762 mm anuales) mien-
tras que en 2002 se registró la precipitación máxima anual del perío-
do (2.409 mm anuales).
La distribución mensual concentra la mayor pluviometría en Prima-
vera-Verano, durante los meses de octubre hasta fines de abril, mien-
tras que en épocas invernales existe un marcado descenso de las preci-
pitaciones. En la Figura 2.4 se observa que la variación mensual de las
precipitaciones mínimas y máximas promedio son mayores durante
los meses de enero, febrero, marzo, octubre, noviembre y diciembre;
mientras que en los restantes se describe una tendencia constante y
de menor variación.
1982
1984
1986
1988
1990
1992
1994
1996
1998
2000
2002
2004
2006
2008
2010
2012
2014
2016
2018
25. 46 47
Por último, cercano al arroyo El Puerto, se presentan suelos poco
evolucionados, formados por capas aluviales pertenecientes al Sub-
grupo Haplacuentes del Complejo Arroyo Feliciano. Estos suelos se
caracterizan por presentar una disposición en capas de texturas va-
riables, siendo común que los superficiales sean más limosos y que en
los profundos, el contenido de arcilla aumente. Son imperfectamente
bien drenados y se inundan con cada crecida del arroyo, aunque sólo
por corto tiempo. Presentan mala estructuración en superficie siendo
intensa la lixiviación en este sector del perfil (INTA Plan Mapa de
Suelos, 1986).
Considerando el análisis de Sabattini et al. (2015) en la Figura 2.7
se sintetiza el perfil topográfico del ANP El Carayá relacionando las
unidades cartográficas de suelo descriptas precedentemente y su ve-
getación asociada (ver descripción en Capítulo III).
Figura 2.7. Esquema del perfil topográfico, suelos y estratos vegetales Estancia “El Carayá”. Tomado de Sabattini et al (2015).
El ANP El Carayá se encuentra en la cuenca A° Feliciano
perteneciente a la Cuenca del Plata. La misma presenta un
área de 8.199,4 km2, y según Díaz et al. (2009) está afectada
por una intensa agriculturización y cambio repentino en el uso del
suelo, pasando de una ganadería extensiva bajo monte natural, a un
uso arrocero y sojero.
El campo está limitado al Sur por el A° Puerto que desemboca en el
A° Feliciano, ubicado a 8,5 km al Oeste. El A° Feliciano nace en la Lo-
mada del Mocoretá al Este de San José de Feliciano, y fluye del Oeste
al Sudoeste atravesando Entre Ríos hasta desembocar en un brazo
del río Paraná denominado riacho Alcaraz, cerca de Puerto Algarro-
bo (Figura 2.8). En su curso de 198 km recibe el agua de numerosos
arroyos, entre los que se encuentran: Víboras, Atencio, Quebrachos,
Puerto, Estacas Este, Banderas, De Las Achiras, Del Yeso, Estacas,
Chimango, Don Gonzalo, Las Palmitas, Grande y Alcaraz. La mayo-
ría de los arroyos nace en las faldas de la cuchilla de Montiel.
Estudios realizados por Díaz et al. (2009) y Romero et al. (2010) so-
bre la cuenca A° Feliciano, analizaron la vulnerabilidad de ésta a la
contaminación de los acuíferos destinados a suministrar agua para
consumo humano, abastecimiento para riego y abrevado de anima-
les. En tal sentido, el ANP El Carayá presenta en zonas de media
loma a lomas planas una vulnerabilidad baja a moderada, mientras
que adyacente al A° Puerto, es alta. Esto indica la importancia de pre-
servar estas áreas utilizadas como protectores de cuencas naturales.
2.4
Hidrología
26. 48 49
Referencias
DAUS FA, GARCÍA GACHE R. 1955. Geografía física de la Argentina. Buenos Aires, Estrada. (Original no consultado, citado en CHIOZZA, E.M. y GONZALEZ van DO-
MSELAAR, Z. Clima. Cap. 1, pág. 94 en APARICIO, F. de la Argentina suma de geografía. Tomo II, Buenos Aires, Peuser, 1958).
DIAZ EL, ROMERO EC, BOSCHETTI NG, DUARTE OC. 2009. Vulnerabilidad del agua subterránea en la cuenca del Arroyo Feliciano. Entre Ríos, Argentina. Boletín
Geológico y Minero ISSN:0366-0176, 120(4):533-542.
ENGLER P, RODRIGUEZ M, CANCIO R, HANDLOSER M, VERA L. 2008. Zonas AgroEconómicas Homogéneas Entre Ríos: Descripción ambiental, socioeconómica y
productiva. Estudios socioeconómicos de la sustentabilidad de los sistemas de producción y recursos naturales. ISSN 1851-6955. EEA Paraná N°6. 150 pp.
IRIONDO MH. 1980. El Cuaternario de Entre Ríos. Revista Asociación Ciencias Naturales del Litoral 11:125-141
Plan Mapa de Suelos Provincia de Entre Ríos. 1984. Suelos y Erosión de la Provincia de Entre Ríos. Serie Relevamiento de recursos naturales Nº1. Tomo I. Convenio INTA
Gobierno de Entre Ríos. 3º edición. 109 pp. ISSN 0325-9099
Plan Mapa de Suelos Provincia de Entre Ríos. 1986. Carta de Suelos de la República Argentina. Departamento Feliciano, Provincia de Entre Ríos. Serie Relevamiento de
recursos naturales Nº3. Convenio INTA Gobierno de Entre Ríos. 96 pp.
ROJAS A, SALUSO JH. 1987. Informe Climático de la Provincia de Entre Ríos. INTA EEA Paraná, Publicación Técnica Nº 14. Entre Ríos, Argentina. 20 pp.
ROMERO EC, DIAZ EL, BOSCHETTI NG, DUARTE OC. 2010. Aplicación de un SIG para estimar la vulnerabilidad del agua subterránea a los pesticidas en la Cuenca
del Arroyo Feliciano. Entre Ríos. Argentina. Revista Científica Agropecuaria 14(1):15-25.
SABATTINI JA, BOSCHETTI NG, SABATTINI RA, QUINTERO C, BEFANI R, HERNANDEZ JP. 2015. Unidades de vegetación de un bosque nativo según condiciones
edáficas (Entre Ríos, Argentina). Revista científica de investigación y difusión científica agropecuaria, 19(2):79-96.
SABATTINI RA, BOSCHETTI NG, QUINTERO CE, HERNANDEZ JP, BEFANI R, SABATTINI I, CIAN JC, SABATTINI JA, KRUGER A, ARBELLO P. 2013. Zonificación:
Diagnóstico estado de los montes nativos y tipos de suelo. Informe Técnico Final. Estancia El Carayá. Convenio Asistencia Técnica Las Taperitas SA y FCA-UNER. 40 pp.
Soil Survey Staff. 1992. Keys to Soil Taxonomy. United States Department of Agriculture Soil Conservation Service. Sixth Edition. 306 pp.
VILLANOVA G, DIAZ R. 2013. Capítulo 18: Caracterización socioeconómica de la región denominada “Cuenca del Arroyo Feliciano” 371-400. En: Bases conceptuales
y metodológicas para el ordenamiento territorial en el medio rural. Compiladores: Giayetto O, Plevich J, Lallana VH, Pilatti M. 1° Edición – Editorial Libroclic. Río Cuarto,
Córdoba. ISBN: 978-987-29233-0-3. 672 pp.
Figura 2.8. Red hidrográfica del ANP El Carayá.
27. 50 51
CAPÍTULO 3
/1: Cátedra Ecología de los Sistemas Agropecuarios, Facultad de Ciencias Agropecuarias
(UNER). Asesor Privado, Responsable Técnico del ANP “El Carayá”.
e-mail: rafael.sabattini@fca.uner.edu.ar
/2: Cátedra de Edafología, Facultad de Ciencias Agropecuarias (UNER).
e-mail: gboschet@fca.uner.edu.ar
/3: Ingeniero Agrónomo, Colaborador Cátedra Ecología de los Sistemas Agropecuarios
(FCA-UNER).
e-mail: juancarloscian@hotmail.com
/4: Cátedra de Estadística y Diseño Experimental, Facultad de Ciencias Agropecuarias
(UNER).
e-mail: afuomar@yahoo.com.ar
Caracterización de la vegetación, unidades
ambientales y asociaciones edáficas
Sabattini Rafael Alberto 1} / Sabattini Julián Alberto 1} / Boschetti Norma Graciela 2} /
Quintero César 2} / Cian Juan Carlos 3} / Befani Romina 3} / Hernandez Juan Pablo 3} /
Urteaga Omar Florencia 4} / Sabattini Iván Alberto 3}
28. 52 53
Según Cabrera (1976), el área de estudio corresponde a la
provincia fitogeográfica del Espinal, que se caracteriza por
bosques xerófilos -también denominados montes nativos
por lugareños- del distrito Ñandubay dominados por Pro-
sopis nigra Griseb. “algarrobo negro”, P. affinis Spreng. “ñandubay”
y Vachellia caven Molina “espinillo o aromo”; todas especies de la
comunidad clímax. La misma presenta un solo estrato arbóreo que
raramente supera los 10 metros de altura, acompañada de un estrato
arbustivo y herbáceo. En este sentido, el ñandubay es un árbol de
altura no mayor a 10 metros con tronco de 40 cm de diámetro y flo-
res amarillentas. La madera es utilizada para postes de alambrados,
carbón o directamente como leña. Por otra parte, el algarrobo negro
presenta fustes de hasta 1 metro de diámetro con una copa muy an-
cha y su madera tiene usos variados, desde aplicaciones en carpinte-
ría hasta fabricación de carbón. Sus frutos son excelentes forrajeras
para ganado e incluso se utilizan para la alimentación humana. Otros
elementos del estrato arbóreo abundantes en la comunidad son el
espinillo o aromo, pero también acompañan Geoffroea decorticans
Burkart “chañar”, Schinus molle L. “molle”, Scutia buxifolia Reissek
“coronillo”, Sideroxylon obtusifolium Roem. & Schult. “guaranina”,
Zanthoxylum fagara (L.) Sarg. “tembetarí”, Aspidosperma quebra-
cho-blanco Schltr. “quebracho blanco”, entre otros. Además, puede
hallarse Trithrinax campestris Drude & Griseb. “palma caranday” en
forma aislada o en colonias más o menos extensas. Además, presenta
una altura escasa de entre 2 y 4 metros, las hojas son utilizadas para
la fabricación de canastas, abanicos y otros objetos, y sus fibras se
usan en el yute para la fabricación de bolsas. El estrato arbustivo está
dominado por especies del género Baccharis spp., Eupatorium spp.,
y Aloysa spp., e integrado por Senna corymbosa H.S.Irwin & Bar-
neby, Tabernaemontana catharinensis A. DC., Eugenia uniflora L.,
Buddleja stachydioides Cham. & Schltdl., entre otras. Las cactáceas
están representadas por Cereus repandus (L.) Mill. “cardón” y varias
especies de Opuntia spp. y Harrisia spp. Por otro lado, el estrato her-
báceo de la comunidad clímax, es rico en gramíneas del género Stipa,
Setaria, Bothriochloa, Arístida, Paspalum, Briza, entre otras.
3.1
Descripción de la
vegetación y su entorno
Bosques nativos típicos del Espinal entrerriano con dominancia de algarrobo negro, acompañado de ñandubay, espinillo y, eventualmente, palma caranday.
32. 60 61
Durante el año 2012 se realizó un relevamiento de la vegetación,
para conocer el estado de conservación del bosque nativo. Para ello
se recolectó información por medio de 85 puntos de muestreo geo-
rreferenciados con GPS durante los meses de abril a julio y con el
apoyo de imágenes satelitales. En cada punto de muestreo se ca-
racterizó el bosque nativo según Sabattini et al. (2010) en el cual se
registran las especies arbóreas (nativas y exóticas) y arbustivas más
conspicuas. Además, se determinó su posición en la sucesión vege-
tal, el tipo de bosque nativo y su degradación según Sabattini et al.
(1999, 2013) y Sabattini et al. (2015), evaluándose el sobrepastoreo,
entresaca, suelo desnudo, fuego y desmonte. El nivel de arbustiza-
ción se cuantificó a través de una escala de cobertura vegetal: Clase
+ (menos del 5 % de cobertura de arbustivas), Clase 1 (5-15% de
cobertura de arbustivas), Clase 2 (16-25% de cobertura de arbus-
tivas), Clase 3 (26-50% de cobertura de arbustivas) y Clase 4 (más
del 50% de cobertura de arbustivas). En cada punto de muestreo se
registró si se encontraba en pastoreo o descanso, teniendo en cuen-
ta la visualización de la hacienda en el mismo o bien la presencia de
estiércol y rastros de pisadas de poco tiempo.
Según la Ley Provincial 10.284 que informa sobre el estado de con-
servación de los bosques nativos de Entre Ríos realizado en el año
2009, el ANP “El Carayá” (Figura 3.1) presenta bosques nativos en
la Categoría I (Clase Roja) 6.713 ha de alto valor de conservación,
3.942 ha de la Categoría II – Categoría Amarilla de mediano valor
de conservación que amerita recuperación y Categoría III – Cla-
se Verde con 137 ha de bajo valor de conservación. Sin embargo, a
través del relevamiento realizado se obtuvo la zonificación a nivel
predial utilizando los mismos criterios de clasificación (Figura 3.2).
Las categorías de conservación representan 6.047 ha y 4.952 ha
para la I y II, respectivamente (Sabattini et al., 2013).
Figura 3.1. Estado de conservación de los montes nativos en ANP “El Carayá”
según Ley 10.284 del estudio de zonificación de nivel departamental (escala
1:250.000). Tomado del III Informe de Zonificación Feliciano, 2009.
Respecto a la categorización de bosques nativos según la Ley Na-
cional 26.331, Ley Provincial 10.284 y su decreto reglamentario, se
entiende por Categoría I aquellas zonas en las que el bosque nativo
se mantiene a perpetuidad, dado que, por su alto valor, no podrá
transformarse. Además, es necesario destacar la importancia des-
de el punto de vista productivo de los bosques nativos de Entre Ríos
ya que son el sustento de la producción ganadera, por la calidad
y diversidad de especies forrajeras nativas. Estos sistemas fueron
moldeados desde la colonización española a la fecha por el gana-
do doméstico (vacuno, ovino, equino, caprino), de modo tal que el
bosque nativo que hoy observamos depende del ganado para su es-
tabilidad. Por lo expuesto, el uso racional ganadero (manejo de la
carga animal) no es incompatible con el mantenimiento del estra-
to arbóreo sino que, por el contrario, la falta de pastoreo conduce
a la degradación de los ecosistemas por el enmalezamiento de las
arbustivas, situación que es observable en gran parte de los mon-
tes nativos del departamento y en todo el territorio provincial, en
campos abandonados y clausurados al pastoreo. Por otro lado, en
la Categoría II se incluyen bosques vírgenes y sucesionales con alto
nivel de alteración (degradado: cobertura de arbustivas superior al
50%) que exigen realizar planes de manejo para su recuperación
y sustentabilidad. Sin embargo, la Categoría III corresponde a los
renovales con alto y bajo nivel de alteración, por lo cual será facti-
ble su transformación parcial o totalmente, a través del desmonte
(Sabattini et al., 2009).
Figura 3.2. Estado de conservación de los montes nativos en la Estancia “El
Carayá”. Tomado del Estudio predial de zonificación (Sabattini et al., 2013).
33. 62 63
Según la posición en la sucesión vegetal, los bosques nativos están
representados por un 53% de bosques vírgenes en etapa clímax, un
16% como sucesionales, mientras aquellos al inicio de la sucesión,
comúnmente denominados renovales, representaron el 1% (Sabat-
tini et al., 2013). Es importante destacar la presencia de un estado
intermedio que presenta un grado avanzado en la sucesión, pero
aún no se consolida como virgen (26% de los muestreos). Estos úl-
timos corresponden a situaciones de alteración, en donde el des-
monte y la entresaca de varios años atrás fueron los condicionantes
(Figura 3.3). En términos ecológicos, un bosque virgen se define
como aquel que se encuentra en la etapa final de la sucesión vegetal
(clímax) caracterizado por presentar estabilidad y equilibrio entre
los aspectos florísticos, estructurales y fisonómicos. Sin embargo,
un bosque sucesional es aquel que se encuentra en las etapas in-
termedias de la sucesión vegetal, y aún no presenta la estabilidad
propia del bosque nativo clímax. Por último, el bosque inicial ‘re-
noval’ es aquel bosque juvenil que comúnmente está dominado por
una sola especie, y se lo observa luego del abandono de actividades
agrícolas sobre áreas desmontadas. Si no se recurre a prácticas de
limpieza (extracción de leñosas en forma manual y/o tratamientos
químicos), los renovales con el tiempo pueden tender hacia montes
bajos cerrados. Presentan un aspecto característico de homogenei-
dad y baja productividad, debido a que la diversidad del pastizal es
baja y de poca accesibilidad, siendo afectado por factores meteoro-
lógicos: radiación excesiva en verano y fríos intensos en invierno
(Sabattini et al., 1999).
Los resultados obtenidos en esa investigación indicarían que el
ANP “El Carayá” presenta un nivel de conservación muy elevado,
considerando la posición de los bosques nativos en la sucesión ve-
getal y en consecuencia los niveles tróficos asociados (productores
secundarios, terciarios y descomponedores). El ecosistema boscoso
va evolucionando hacia una madurez tal donde el equilibrio de sus
componentes permite la optimización y el aprovechamiento de los
recursos materia y energía. Como consecuencia de esto, los nive-
les tróficos van aumentando y ganando en complejidad, mejorando
así las redes tróficas. Asimismo, estas comunidades maduras pre-
sentan mayor grado de amortiguación y tolerancia a los cambios
producidos por los fenómenos naturales, mientras que una comuni-
dad joven -como son los renovales-, es más susceptible a cambios y,
además, puede ser fácilmente alterada en su composición florística,
fisonómica y estructura.
Figura 3.3. Estados sucesionales de los bosques nativos del ANP “El Carayá”.
Tomado del estudio predial de zonificación (Sabattini et al., 2013).
4%1%
53%
26%
16%
Virgen
Sucesional - Virgen
Sucesional
Sucesional - Renoval
Renoval
Desde el punto de vista estructural, el estudio realizado en 2012
indica que dominan los bosques nativos bajos (67%), de los cuales
el 36% fueron abiertos mientras que los cerrados representaban el
31% (Figura 3.4). Los bosques bajos se caracterizan por presentar el
estrato arbóreo, una altura inferior a los 6 m, superado únicamente
por individuos aislados de A. quebracho blanco y cobertura inferior
al 50%, de baja densidad e individuos en su mayoría maduros. Se
originan por limitaciones edáficas para el crecimiento de las es-
pecies (encharcamiento, compactación, salinidad, alcalinidad) o
por la extracción selectiva de especies de valor maderero. Normal-
mente presentan un pastizal de aceptable calidad forrajera y bue-
na accesibilidad, disminuida por enmalezamiento por arbustivas y
herbáceas (Sabattini et al., 1999).
Sin embargo, el 32% de los bosques del ANP “El Carayá” responden
a la definición de altos, debido a que presentan un estrato arbóreo
dominante mayor a 6 m de altura, que cubre menos del 50% de la
superficie del suelo. Generalmente está representado por especies
del género Prosopis (ñandubay y algarrobo), elementos que pueden
faltar parcialmente debido a la tala selectiva y en otros casos suelen
ser reemplazados por leñosas espontáneas. Puede presentar con-
junto de árboles de menor altura dominada por V. caven o Acacia
atramentaria. El estrato herbáceo se presenta continuo, con do-
minancia de pastizales cespitosos, conformada por especies de los
géneros Piptochaetium, Paspalum y Stipa.
Los estudios realizados indican que el 50% de los bosques se cate-
gorizan como cerrados (Figura 3.4). Estos presentan una cobertura
de especies arbustivas mayor al 50%, pero además, pueden estar
acompañadas por abundantes individuos de especies arbóreas na-
tivas o exóticas en estado juvenil (Sabattini et al., 2013). Un arbusto
es una planta leñosa que, a diferencia de los árboles, se ramifica
desde la base y puede tener varios metros de altura. A nivel mun-
dial, la invasión de plantas leñosas y semi-leñosas ha sido motivo de
preocupación por mucho tiempo por parte de los productores ga-
naderos debido al previsible impacto negativo sobre la producción
secundaria (Scholes y Archer 1997), por lo que se han implementa-
do técnicas para su control (Anadóna et al. 2014). En la actualidad,
más del 70% del territorio argentino se encuentra invadido por
estas especies, caracterizadas por tener un gran poder de adapta-
ción al medio ambiente y un efecto selectivo sobre los animales en
pastoreo. Estas malezas compiten con las especies del estrato her-
báceo por luz, agua y nutrientes, provocando una rápida invasión
dentro de un potrero e impidiendo el manejo del rodeo (Böker et al.
1989). En particular, el proceso de arbustización de los bosques del
Espinal Argentino se verifica mediante la invasión del complejo de
chilcas (Baccharis spp. L. y Eupatorium spp. L.), Aloysia gratissi-
ma (Gillies & Hook.) Tronc., Eryngium horridum Malme, Melica
macra Nees, entre otras especies (Sione et al. 2006). Sabattini et
al (2009 a,b,c,d) han registrado que el 66,35% de los bosques na-
tivos del departamento Villaguay presentan alto grado de enma-
lezamiento, al igual que un 50,28% en el departamento Federal,
un 56% en el departamento La Paz y un 18,7% en el departamento
Feliciano, siendo las especies arbustivas más importantes: Baccha-
ris punctulata L., A. gratissima, B. coridifolia DC., E. bunifolium
R.M.King & H.Rob., Trithrinax campestris Drude & Griseb., B.
notosergilla L., Senecio grisebachii Baker, y Opuntia ficus indicus
(L.) Mill. Además, se destaca la presencia de otras especies de ma-
lezas que compiten con el crecimiento del pastizal natural como el
E. horridum y M. macra.
34. 64 65
Figura 3.4. Distribución de los tipos de bosques nativos del ANP “El Carayá”.
Tomado del estudio predial de zonificación (Sabattini et al., 2013).
4%
1%
31%
36%
19%
13%
Alto y Abierto
Alto y Cerrado
Bajo y Abierto
Bajo y Cerrado
Bosque Selva
Sabana
En menor medida se registraron bosques denominados “Selvas”,
ubicados sobre el Arroyo Puerto (Figura 3.4), con características
de la provincia Paranaense descripta anteriormente. En términos
ecológicos este ecosistema presenta una altura del estrato arbóreo
superior a 6 m, con alta abundancia y riqueza de especies. En el
ANP “El Carayá” se observaron componentes de la selva marginal
y de leñosas exóticas en función de su grado de deterioro. Por otra
parte, el tapiz herbáceo es discontinuo, con zonas de matorrales
muy densos y suelo cubierto por una capa de hojarasca de espesor
variable. El ANP cuenta con una superficie aproximada de 1.500 ha
de esos ecosistemas, que además presentan una importancia des-
tacada sobre la conservación de los suelos adyacentes a los arroyos,
evitando el inicio de los procesos erosivos. Además, por su longitud
de casi 21 km en sentido Este-Oeste, permite garantizar corredores
biológicos de alto valor con el resto del territorio en el cual se vincu-
lan e interrelacionan las poblaciones y el flujo de especies. En estos
sectores se contribuye, desde el ANP “El Carayá”, a proporcionar
conectividad entre paisajes, ecosistemas y hábitat, de modo tal de
asegurar el mantenimiento de la biodiversidad, los procesos ecoló-
gicos y evolutivos de las especies.
Desde el punto de vista florístico, Sabattini et al. (2013) realiza-
ron un inventario de las especies de árboles más representativas
que ocupan el ANP “El Carayá”. La riqueza total registrada fue de
19 especies de árboles nativos, agrupadas en 3 clases según su fre-
cuencia (Figura 3.5): Grupo I: alta frecuencia (80%) AC, PN y PAF;
Grupo II: frecuencia intermedia (30-50%) MC, quebracho blanco
(AQB) y chañar (GD); y el Grupo III: Inferior al 20% (13 especies).
Figura 3.5. Frecuencia de las especies estrato arbóreo ANP “El Carayá” (Sabattini et al., 2013 y Sabattini et al., 2015). Referencias: Prosopis nigra PN, Prosopis alba
PA, Prosopis affinis PAF, Acacia caven (actual Vachellia caven) AC, Acacia atramentaria AA, Aspidosperma quebracho-blanco AQB, Schinus longifolius SL, Sapium
haematospermun SA, Celtis tala CT, Geoffroea decorticans GD, Parkinsonia aculeata PAK, Scutia buxifolia SB, Myrcianthes cisplatensis (actual Eugenia cisplatensis)
MC, Erythrina crista-galli EG, Sebastiana klotzchiana SK (actual Sebastiania commersoniana), Rapanea laetevirens (actual Myrsine laetevirens) RL, Bumelia obtusi-
folia BO (actual, Sideroxylon obtusifolium), Butia yatay (Mart.) Becc. BY, Copernicia alba CA.
90
80
70
60
50
40
frecuenciaabsoluta
PN
AC
PAF
MC
GD
AOB
BO
CT
BY
SB
PAK
AA
SA
SK
PA
CA
SL
RL
EG
30
20
10
0
PAF GROUP I
GROUP II
GROUP III
Average linkage. Distance: Euclidea
Cophenetic Correlation = 0,933
PN
AC
MC
GD
AQB
SB
BY
CT
BO
SL
RL
EG
SA
SK
PA
CA
PAK
AA
0,00 0,21 0,61 0,92 1,23 1,34 1,54 2,15 2,48