El documento discute posibles vías para renovar la izquierda. Sugiere que la izquierda debería centrarse en políticas de reconocimiento que permitan a los individuos desarrollarse plenamente y luchar contra la humillación. También debería defender la democracia, la justicia social a través de una renta básica, y orientar el cambio social hacia una mayor igualdad en lugar de dejarse llevar por los ricos y poderosos.
El libro empieza con una historia de la evolución de la democracia, empezando en la Grecia antigua y pasando por la Inglaterra de Cromwell y las revoluciones de Francia y los Estados Unidos. Después hay una sección que presenta un análisis estructural de la democracia actual, hablando de derechos, leyes electorales y civismo. Nombran qué políticos controlan qué empresas y qué grupos de inversores son propietarios de medios de comunicación. Para acabar, hablan de reivindicaciones para democracias alternativas y alternativas horizontales y descentralizadas a la democracia.
Editado y firmado en 2013 por los «Grupos Anarquistas Coordinados », una organización pública que posteriormente el Estado decidió que era un grupo terrorista. Detenidos durante la Operación Pandora. Desde aquí un apoyo y un saludo.
El libro empieza con una historia de la evolución de la democracia, empezando en la Grecia antigua y pasando por la Inglaterra de Cromwell y las revoluciones de Francia y los Estados Unidos. Después hay una sección que presenta un análisis estructural de la democracia actual, hablando de derechos, leyes electorales y civismo. Nombran qué políticos controlan qué empresas y qué grupos de inversores son propietarios de medios de comunicación. Para acabar, hablan de reivindicaciones para democracias alternativas y alternativas horizontales y descentralizadas a la democracia.
Editado y firmado en 2013 por los «Grupos Anarquistas Coordinados », una organización pública que posteriormente el Estado decidió que era un grupo terrorista. Detenidos durante la Operación Pandora. Desde aquí un apoyo y un saludo.
Para la larga tradición política del autonomismo, participar significa que a quienes no se les reconoce poder logren conquistar la capacidad para definir y aplicar nuevas reglas del juego. Las posiciones radicalmente antiestatistas de ese legado defienden que participar no tiene nada que ver con ascender individualmente a costa de la desposesión social, pero tampoco con delegar poder de mando a un ente burocrático que promete reducir no ya las asimetrías de partida, sino sus consecuencias ¿La democracia existente distribuye poder o incrementa su asimetría?, ¿qué forma de organización hace posible la igualdad en el poder? Sin tener respuestas cerradas, mi intención es recuperar el debate sobre poder, organización y democracia.
Francisco José Contreras Peláez, Defensa del Estado social. Resumen y reseña.Marcelo Vásconez Carrasco
1. Francisco Contreras, Defensa del Estado social. Resumen de las ideas principales, con palabras del autor.
2. Reseña del libro por Marcelo Vásconez. Se comparan el Estado neoliberal y el social por lo que respecta a sus concepciones del hombre, la sociedad, y el Estado.
Estudiantes, parlamento y clase politica pedro davis-en cooperativapedro_davis
Pedro Davis, concejal de La Reina, comenta que el 17 de noviembre de este año, postularán al parlamento varios dirigentes que encabezaron las movilizaciones estudiantiles del 2011, marcando un punto de inflexión en la relación entre la ciudadanía y la institucionalidad política.
Ideas y paradigmas para una nueva sociedad: La aldea del tercer milenio, Parte VIII
La presente estructura social, el tejido de base que hoy nos rige, ya no cubre las expectativas de una mayoría de la población, aunque por cierto, es muy difícil cambiar hábitos, reglamentaciones, formas de comportamiento, que por años han gobernado nuestras relaciones sociales, familiares, laborales, y económicas.
Es bastante fácil criticar, pues para ello basta con ser un buen observador, y/o basta con señalar lo que ha perjudicado a gente que conocemos o a nosotros mismos.
Por cierto, es bastante más difícil expresar en detalle de qué forma deberíamos cambiar nuestras instituciones sociales y nuestras normativas, en la seguridad de que ello realmente mejoraría nuestras relaciones de convivencia y de supervivencia.
El “Consenso de Barcelona” pretende ser una respuesta a las inquietudes recién expresadas. Este proyecto se desarrolla con fuerza desde principios del año 2010, y en él participan una serie de redactores y de técnicos, entre los cuales se incluye el autor de estas líneas.
Aprovechando mi especial relación con el citado proyecto, e inspirándome por cierto en recomendaciones formuladas por los organizadores de la anteriormente citada iniciativa, así como por ideas propuestas por otros distinguidos participantes, he ido dando forma y redactando una serie de recomendaciones y de proposiciones, que por el momento no pretende ser un trabajo acabado y coherente de lo que correspondería tener en cuenta y aplicar por parte de Gobiernos y de Organismos Internacionales, para la construcción de un nuevo Orden Económico-social Internacional.
Más bien los textos que hasta el presente he ido acumulando y que aquí enumeraré, son más un insumo para mi propio trabajo que un documento final ya acabado, y como tal es que lo presento a los interesados.
Obviamente, muy bueno sería elaborar un texto final relativamente corto, que fuera un decálogo de recomendaciones o que se acercara a este ideal. Mucho me temo que la actual situación económica y social es demasiado compleja como para que se pueda llegar a tal síntesis, así que el lector sabrá disculpar la extensión que tiene este propio documento, así como otros con similar orientación que le seguirán.
Recomposicion de la estructura de poder en la pazGobernabilidad
Síntesis de la investigación del politólogo Diego Ayo sobre la Recomposición de estructuras de poder en el departamento de La Paz. Democracia, modelo de Estado y gestión pública, que apoya en Programa de Fortalecimiento Democrático de Organizaciones Políticas de Bolivia.
Para la larga tradición política del autonomismo, participar significa que a quienes no se les reconoce poder logren conquistar la capacidad para definir y aplicar nuevas reglas del juego. Las posiciones radicalmente antiestatistas de ese legado defienden que participar no tiene nada que ver con ascender individualmente a costa de la desposesión social, pero tampoco con delegar poder de mando a un ente burocrático que promete reducir no ya las asimetrías de partida, sino sus consecuencias ¿La democracia existente distribuye poder o incrementa su asimetría?, ¿qué forma de organización hace posible la igualdad en el poder? Sin tener respuestas cerradas, mi intención es recuperar el debate sobre poder, organización y democracia.
Francisco José Contreras Peláez, Defensa del Estado social. Resumen y reseña.Marcelo Vásconez Carrasco
1. Francisco Contreras, Defensa del Estado social. Resumen de las ideas principales, con palabras del autor.
2. Reseña del libro por Marcelo Vásconez. Se comparan el Estado neoliberal y el social por lo que respecta a sus concepciones del hombre, la sociedad, y el Estado.
Estudiantes, parlamento y clase politica pedro davis-en cooperativapedro_davis
Pedro Davis, concejal de La Reina, comenta que el 17 de noviembre de este año, postularán al parlamento varios dirigentes que encabezaron las movilizaciones estudiantiles del 2011, marcando un punto de inflexión en la relación entre la ciudadanía y la institucionalidad política.
Ideas y paradigmas para una nueva sociedad: La aldea del tercer milenio, Parte VIII
La presente estructura social, el tejido de base que hoy nos rige, ya no cubre las expectativas de una mayoría de la población, aunque por cierto, es muy difícil cambiar hábitos, reglamentaciones, formas de comportamiento, que por años han gobernado nuestras relaciones sociales, familiares, laborales, y económicas.
Es bastante fácil criticar, pues para ello basta con ser un buen observador, y/o basta con señalar lo que ha perjudicado a gente que conocemos o a nosotros mismos.
Por cierto, es bastante más difícil expresar en detalle de qué forma deberíamos cambiar nuestras instituciones sociales y nuestras normativas, en la seguridad de que ello realmente mejoraría nuestras relaciones de convivencia y de supervivencia.
El “Consenso de Barcelona” pretende ser una respuesta a las inquietudes recién expresadas. Este proyecto se desarrolla con fuerza desde principios del año 2010, y en él participan una serie de redactores y de técnicos, entre los cuales se incluye el autor de estas líneas.
Aprovechando mi especial relación con el citado proyecto, e inspirándome por cierto en recomendaciones formuladas por los organizadores de la anteriormente citada iniciativa, así como por ideas propuestas por otros distinguidos participantes, he ido dando forma y redactando una serie de recomendaciones y de proposiciones, que por el momento no pretende ser un trabajo acabado y coherente de lo que correspondería tener en cuenta y aplicar por parte de Gobiernos y de Organismos Internacionales, para la construcción de un nuevo Orden Económico-social Internacional.
Más bien los textos que hasta el presente he ido acumulando y que aquí enumeraré, son más un insumo para mi propio trabajo que un documento final ya acabado, y como tal es que lo presento a los interesados.
Obviamente, muy bueno sería elaborar un texto final relativamente corto, que fuera un decálogo de recomendaciones o que se acercara a este ideal. Mucho me temo que la actual situación económica y social es demasiado compleja como para que se pueda llegar a tal síntesis, así que el lector sabrá disculpar la extensión que tiene este propio documento, así como otros con similar orientación que le seguirán.
Recomposicion de la estructura de poder en la pazGobernabilidad
Síntesis de la investigación del politólogo Diego Ayo sobre la Recomposición de estructuras de poder en el departamento de La Paz. Democracia, modelo de Estado y gestión pública, que apoya en Programa de Fortalecimiento Democrático de Organizaciones Políticas de Bolivia.
El presente libro recoge las ponencias más representativas del
Foro Internacional Los nuevos retos de América Latina: socialismo y
sumak kawsay. La organización del Foro estuvo a cargo de la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (SENPLADES),
del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN) y del Ministerio Coordinador de la Política (MCP). Los criterios vertidos en la
obra son de responsabilidad de sus autores, y no necesariamente
reflejan la opinión de estas instituciones. Los contenidos del libro
se pueden citar y reproducir, siempre que sea sin fines de lucro, y
con la condición de reconocer los créditos correspondientes refiriendo la fuente bibliográfica
La libertad siempre es libertad para los que piensan de manera diferenteECUADOR DEMOCRATICO
La libertad siempre es libertad para los que piensan de manera diferente
Alberto Acosta
Ex –presidente de la Asamblea Constituyente
Frente Montecristi Vive
EL BUEN VIVIR COMO ALTERNATIVA AL NEOLIBERALISMOMoises Logroño
EL PODER MUNDIAL Y CRIOLLO ESTÁ VINCULADO A PARTIDOS POLÍTICOS, A GOBIERNOS Y A LA BUROCRACIA QUE DEPENDEN DE LA FINANCIACIÓN DE LOS BANCOS Y DE LOS GRUPOS DE PODER ECONÓMICO.
Intervención de Alejandro Encinas en el lanzamiento de “Por México Hoy”Roberto Reyes
México enfrenta la peor crisis humanitaria y de violación de los derechos humanos de su historia. A la violencia e inseguridad; la corrupción y la impunidad, se suma la descomposición y el descrédito del Estado mexicano, de las instituciones públicas y de los partidos políticos.
Presentación del I taller de Economía Verde ofrecido por el grupo de trabajo sobre Economía Verde (www.economiaverde.org) en la I Universidad de Verano de los Verdes.
Entre las novedades introducidas por el Código Aduanero (Ley 22415 y Normas complementarias), quizás la más importante es el articulado referido a la determinación del Valor Imponible de Exportación; es decir la base sobre la que el exportador calcula el pago de los derechos de exportación.
Guía para hacer un Plan de Negocio para tu emprendimiento.pdfpppilarparedespampin
Esta Guía te ayudará a hacer un Plan de Negocio para tu emprendimiento. Con todo lo necesario para estructurar tu proyecto: desde Marketing hasta Finanzas, lo imprescindible para presentar tu idea. Con esta guía te será muy fácil convencer a tus inversores y lograr la financiación que necesitas.
La Norma Internacional de Contabilidad 21 Efectos de las variaciones en las t...mijhaelbrayan952
La Norma Internacional de Contabilidad 21 Efectos de las variaciones en las tasas de Cambio de la Moneda Extranjera (NIC 21) está contenida en los párrafos 1 a 49. Todos los párrafos tienen igual valor normativo, si bien la Norma conserva el formato IASC que tenía cuando fue adoptada por el IASB.
El análisis PESTEL es una herramienta estratégica que examina seis factores clave del entorno externo que podrían afectar a una empresa: políticos, económicos, sociales, tecnológicos, ambientales y legales.
1. Sábado, 21/6/2008
Opinión
TRIBUNA: JOSEP RAMONEDA
¿Hay una vía a la izquierda?
La derecha desea más poder para los poderosos y más dinero para los ricos.
Eso da un amplio campo de acción a la izquierda: la defensa del Estado de
bienestar, los derechos civiles, la privacidad, la renta básica...
JOSEP RAMONEDA 20/06/2008
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La buena sociedad. "La buena sociedad es aquella en que el entorno social y político
permite a los individuos desarrollar una identidad autónoma o una relación positiva
consigo mismos". La frase es de Axel Honneth, quizás la voz más interesante que
tiene hoy la vieja Escuela de Frankfurt. O sea, que en la buena sociedad los
ciudadanos deben poder ser lo que quieran ser, sin pasar por las experiencias
dolorosas del desprecio y de la negación del reconocimiento.
Resulta insoportable que la izquierda se apunte a la humillación de los inmigrantes
La izquierda tiene que preguntarse: crecimiento, ¿para qué?; competitividad, ¿para
que? Resulta insoportable cuando la izquierda se apunta a la humillación de los
inmigrantes
Los partidos de izquierdas se siguen llamando socialistas cuando a los ojos de la
mayoría de los ciudadanos esta palabra representa hoy una idea de sociedad que ni
es viable ni es siquiera deseable. Lo primero que tiene que hacer la izquierda, si quiere
renovarse, es saber explicar en qué tipo de sociedad piensa. La definición de Honneth
me parece un buen punto de partida que pone el énfasis en la plena realización
personal. Como recuerda otro filósofo, Kwame Appiah, el cosmopolitismo moderno se
basa en que "cada individuo lleva la carga de la responsabilidad definitiva de su propia
vida", es decir, de autogobernarse. Crear las condiciones para que esto sea posible y
asegurar que seguimos siendo una sola humanidad, debe ser el ideal regulador de las
políticas de izquierdas. Dice Avishai Margalit que una sociedad decente es aquella en
la que las instituciones no humillan a los ciudadanos. La tarea de la izquierda empieza
por aquí: por gobernar para el reconocimiento de todos y con el respeto para todos
que exige la más elemental noción de servicio público.
- El liderazgo del cambio. La idea de izquierda sólo tiene sentido si va unida a la idea
de progreso y cambio social. La izquierda se vuelve conservadora cuando pierde el
pulso del sentido de la historia y siente pánico ante los cambios tecnológicos y
científicos. Responde reactivamente y, a menudo, confunde frenarlos con gobernarlos.
De modo que la izquierda necesita saber dónde está el progreso, en un doble sentido:
¿qué cambio social es el que nos acerca más a la idea de sociedad que opera como
idea regulativa? ¿Cuáles son los agentes sociales de este cambio? La izquierda no
puede confundir los instrumentos con los fines. El crecimiento o la competitividad
pueden ser el horizonte ideológico insuperable para la derecha, no para la izquierda.
La izquierda tiene que preguntarse: crecimiento, ¿para qué?; competitividad, ¿para
qué?
La estructura social ha cambiado mucho. Hemos asistido al declive de la noción de
clase como factor identitario. Al mismo tiempo, la clase obrera ha dejado de ser una
fuerza homogénea capaz de actuar como motor del cambio social. Las mutaciones del
capitalismo han pillado a la izquierda a contrapié. Y ésta se mueve hoy en un terreno
doblemente ambiguo. En lo social, siente que su suelo es movedizo: las élites urbanas
más preparadas para las exigencias del progreso le abandonan a menudo. En lo
2. ideológico, se mueve entre la aceptación incondicional del paradigma liberal y la
defensa de su herencia más sólida: el Estado de bienestar. Construir una vía nueva a
partir de estas dos bases significa recuperar la iniciativa del cambio, sintonizando con
los sectores sociales que pueden devolver a la política la capacidad normativa que
ahora está en manos del dinero.
- El reconocimiento. Si el ideal es la plena autonomía del individuo, el reconocimiento
debe sustituir a la lógica de la política asistencial. La asistencia es unidireccional, el
reconocimiento es transitivo y mutuo y exige políticamente el compromiso de luchar
contra todo aquello que obstaculiza la autorrealización individual, es decir, contra los
abusos de poder, tanto en las relaciones entre ciudadanos como en las relaciones de
los ciudadanos con el Estado y las instituciones.
Las políticas de reconocimiento son esenciales para la izquierda: de ahí la importancia
de la ley de matrimonios homosexuales, la legislación de género o las regulaciones
masivas de inmigrantes, tres ejemplos del tipo de decisiones de los que la izquierda no
se debería avergonzar nunca.
La izquierda ha buscado siempre la manera de encontrar equilibrios sostenibles entre
Estado, trabajo y capital. Pero esta contracción del espacio y aceleración del tiempo
que llamamos globalización ha generado una sensación extendida de vulnerabilidad,
fruto de un desplazamiento masivo de dinero, mercancías, ideas y, en menor medida,
personas a través del mundo. Reconocer al ciudadano su derecho a ser como quiera
es otorgarle un cierto amparo tanto ante los vértigos de cambio como ante los intentos
comunitaristas de determinar su identidad por la vía de la pertenencia a un grupo. Es
cierto que la izquierda ha tenido dificultades para entender la complejidad de la
economía humana del deseo y, por tanto, para decodificar fenómenos como los
nacionalismos o las religiones. También en este terreno tienen que ser efectivas las
políticas de reconocimiento, sobre la base del pluralismo y de la crítica a la fractura
multiculturalista. Pero la izquierda tendrá siempre inevitablemente una dimensión
cosmopolita.
- La radicalidad democrática. Anthony Giddens plantea la renovación de la tercera vía
del laborismo inglés a partir de la idea de seguridad. Naturalmente, la sensación de
vulnerabilidad que amenaza hoy las distintas condiciones de un ciudadano de
identidad polivalente, requiere políticas de seguridad. Pero la izquierda no puede caer
en la trampa de explotar el miedo de los ciudadanos convirtiendo la seguridad en
ideología como hace la derecha. La seguridad forma parte de las condiciones de
desarrollo de una vida autónoma. Y, por tanto, no puede reducirse a la seguridad en
sentido policial y militar. Se necesita seguridad jurídica, en el trabajo, para moverse,
para asociarse, para la libre expresión, es decir, seguridad de que hay un marco de
garantías comunes. La seguridad no puede ser la coartada para un sistema de control
social cada día más invasivo.
Años atrás, decíamos que era un régimen totalitario aquél en el que no hay espacio
para lo privado. La vida privada está hoy expuesta a la visibilidad, con el
consentimiento de los parlamentos democráticos, hasta tal punto que algunos teóricos
hablan ya de tiempos posdemocráticos. La izquierda debe ser radical en la defensa de
la democracia. Al fin y al cabo, la ley de base democrática es la mejor arma que tienen
los ciudadanos para defenderse de los abusos de poder.
- La renta básica. Pero la izquierda, además, no puede abandonar la idea de
justicia social. Sin ella, su razón de ser quedaría limitada, convertida en una simple vía
complementaria para el proceso de selección de las élites gobernantes. De la idea de
justicia social derivan los principios básicos de la tradición socialdemócrata: la igualdad
política, de oportunidades, la justicia distributiva. La izquierda no puede hacer
seguidismo de la derecha desacreditando el papel del Estado y convirtiendo la
reducción de los impuestos en mito ideológico.
Los impuestos no son un fin, son un instrumento. La calidad de servicios y la
distribución de la carga impositiva -que no puede pesar sólo sobre los asalariados- es
lo que determina el sentido de una política. En este horizonte, el derecho a un mínimo
3. social garantizado, la renta básica, parece la última defensa para que la idea de
igualdad tenga todavía sentido.
- El reformismo. Desde que vivimos en un presente continuo, el pasado tiene una
función estrictamente mítica y el futuro se ha desdibujado, la izquierda encuentra
enormes dificultades para actuar como proyecto de renovación integradora. Cada vez
acepta más resignadamente el papel de una de las dos caras de la alternancia en la
sociedad democrática, como si su función fuera de actor invitado al juego de las
apariencias del cambio para que nada cambie. En este principio de siglo XXI, el
espejismo de las aguas tranquilas, que nos dibujaron los discursos de fin de la historia
y de la posmodernidad, se ha desvanecido. Estamos en una dinámica de cambio y la
izquierda debe intentar orientarla, procurando que ésta no signifique la marginación
definitiva de millones de personas. Y haciendo del reconocimiento de todos y cada uno
de los ciudadanos su razón política. Por eso, resulta insoportable cuando la izquierda
se apunta a las políticas de humillación en materia de inmigración.
El premio Nobel de Economía Robert Solow, analizando las políticas de Reagan, decía
que la derecha siempre defiende más poder para los más poderosos y más dinero
para los más ricos. En la desorientación actual de la izquierda, a menudo, da la
impresión de que esto mismo se podría predicar de ella. Y si seguir hablando de
izquierda tiene algún sentido es precisamente para contrarrestar esta tendencia. No
hay que confundir liderar el cambio social con entregarse en manos de los ricos y
poderosos.