Cada año se consumen entre 500 billones y un trillón de bolsas plásticas en todo el mundo, pero menos del 1% se recicla. Las bolsas plásticas terminan contaminando los océanos, ríos y suelos, afectando negativamente a numerosas especies marinas que las confunden con comida. Diversos países y ciudades han prohibido o gravado las bolsas plásticas para reducir su impacto ambiental y fomentar el uso de bolsas reutilizables.