El caballo criollo argentino desciende de los caballos importados por los conquistadores españoles en el siglo XVI. Se utilizaron ampliamente en las guerras de independencia de Argentina debido a su rusticidad. Tras la independencia en 1816, la raza casi se extingue al mezclarse con otras razas, pero fue recuperada a finales del siglo XIX por criadores como Emilio Solanet, quienes lo convirtieron en un caballo versátil y económico. El caballo criollo argentino tiene características