El documento discute las teorías de Freud sobre las fuerzas sexuales y agresivas, y cómo Edward Bernays aplicó estas ideas para manipular a las masas y promover el consumismo. Bernays creía que podía dirigir el pensamiento de las personas estimulando sus deseos internos y asociándolos a productos, efectivamente convirtiéndolas en "máquinas de felicidad" impulsadas por el consumo. Esto llevó a un auge del consumismo en los Estados Unidos hasta la crisis de 1929.