Cenicienta es tratada con desprecio por su madrastra y sus dos medias hermanas, quienes la obligan a hacer las tareas más sucias. Sin embargo, ella mantiene su dulzura y serenidad. Cuando el príncipe organiza un baile para buscar esposa, la madrastra impide que Cenicienta asista, pero su hada madrina la transforma en una princesa para ir al baile, advirtiendo que el hechizo se romperá a medianoche. Cenicienta y el príncipe se enamoran en el baile pero ella