Este documento analiza la dolarización de la economía ecuatoriana en el año 2000 como respuesta a una profunda crisis. Explora tanto los beneficios como los costos de adoptar el dólar estadounidense como moneda oficial y eliminar el sucre ecuatoriano. Concluye que aunque la dolarización ha traído estabilidad económica, también ha creado obstáculos para el desarrollo humano sustentable debido a la pérdida de autonomía monetaria.