La propuesta crea una comisión especial compuesta por los vicepresidentes del organismo central y los presidentes de las asociaciones de cada facultad, así como un representante estudiantil de cada directiva de curso. La comisión tiene como objetivo dar solución a los problemas surgidos con el Departamento de Idiomas, consultar a los estudiantes sobre los libros y satisfacer sus necesidades, y actuar como enlace entre los estudiantes y la directora del departamento para proponer inquietudes sobre el aprendizaje de idiomas.