Para desarmar y limpiar un teclado, se necesitan destornilladores, una bayetilla, paciencia y una brocha gruesa. El proceso implica desatornillar cada lado del teclado, quitar la tapa, observar los componentes internos como la membrana, el chip de mandos y la placa de circuito, y luego limpiar y remover la polución antes de volver a armar el teclado.