El conflicto armado en Medellín ha puesto a los jóvenes entre la espada y la pared, obligándolos a abandonar sus barrios para salvar sus vidas o unirse a bandas criminales. El 15% de la población de Medellín son víctimas del conflicto, la tasa más alta del país. Algunos se preguntan si los gobiernos local y nacional han perdido el control sobre los grupos armados ilegales debido al aumento de la violencia. Estados Unidos está considerando una intervención militar.