Un logo debe ser memorable. Luego del principio de sencillez está el de memorabilidad. Un logo efectivo debe ser memorable y esto se logra al tener un logo simple pero apropiado.
2. Evita clichés
• No robes, copies o “tomes prestado” otros diseños. Aunque, no
debería decir eso, pasa muy a menudo. Un diseñador ve una idea que
le gusta, la copia, le cambia los colores o las palabras y luego la llama
su idea.
3. Investiga tú audiencia
• Crear un logo no se trata de crear algo visualmente bonito. Lo que
estés haciendo es desarrollar una marca y comunicar una posición.
4. Sumérgete en la marca
• Antes de empezar a dibujar nuestras ideas de un logo, pasa tiempo
compilando lo equivalente a un archivo de los servicios secretos sobre
la marca de tu cliente: quién es, qué hace y cuál es su demografía.
5. Lucha contra a tentación de imitar
• Todos tenemos nuestros héroes del diseño y, a veces, lo amamos
tanto que queremos imitar sus estilos.
• Pregúntate si el estilo que estás usando es apropiado para las
necesidades del cliente.
6. Crea vectores
• Luego de comenzar con un bosquejo, algunos diseñadores pasan a
dibujos más técnicos en papel cuadriculado. Pero la forma más
segura de evitar cualquier frustración con futuras iteraciones de tu
diseño de logo es producirlo usando vectores.
7. No exageres
• Trata de usar estos principios para añadir valor a tu logo, pero, como
siempre, no añadas formas y elementos pictóricos en espacios
negativos solo porque puedes.
8. Experimenta
• No te sientas reprimido por nociones formales sobre lo que un logo
es o hace.
9. Crea una versión con lema
• Con frecuencia, un logo viene con un eslogan (o un titular) que
transmite un mensaje de marca.
10. Formula preguntas específicas al cliente
• Las preguntas que debes formular incluyen: “¿Logra lo acordado en el
informe?” y “¿Representa los valores de tu empresa?” Si evaden estas
preguntas y solo dicen que no les gusta, pregunta cosas específicas.