Las plagas de hormigas pueden transmitir enfermedades y causar mala imagen, por lo que es esencial prevenirlas y controlarlas. Se realiza un estudio previo del local para identificar la especie de hormiga y diseñar un plan de acción, priorizando medidas estructurales y de limpieza sobre el uso de hormiguicidas. El control se logra de forma rápida y eficiente para evitar la propagación, y se monitorea posteriormente para mantener el local libre de plagas.