Este documento describe los siete dolores de María, la madre de Jesús. Detalla cada uno de los sufrimientos que experimentó María, incluyendo la profecía de Simeón, la huida a Egipto, la pérdida de Jesús en el templo, encontrar a Jesús camino al Calvario, estar junto a la cruz durante la crucifixión, recibir el cuerpo de Jesús después de su muerte, y acompañar a Jesús a la sepultura. El documento también menciona las siete gracias que María concede a quienes la vener

1. “Corona de los
siete dolores de
Nuestra Señora la
Santísima Virgen
María.”

2. 1.-María acoge en la fe la profecía del anciano
Simeón
Lc. 2,34-35
“Una espada te
atravesará el alma.”
Virgen Dolorosa
Ruega por nosotros

3. 2.-María huye a Egipto con Jesús y José
Mt. 2,13-14
“Herodes busca al niño
para matarlo”
Virgen Dolorosa
Ruega por nosotros.

4. 3.-María busca a Jesús perdido en
Jerusalén
Lc.2,43-45
“Su amado hijo se
quedó en Jerusalén.”
Virgen Dolorosa
Ruega por nosotros.

5. 4.- María encuentra a su Hijo camino al
Calvario.
Lc. 23,25-27
“Lleva una pesada
cruz sobre sus
hombros”
Virgen Dolorosa
Ruega por nosotros.

6. 5.-María está junto a la cruz de Jesús
.
Jn. 19, 25-27
“Junto a la cruz de
Jesús estaba su
Madre …y junto a ella
el discípulo que tanto
amaba …
Virgen Dolorosa
Ruega por nosotros.

7. 6.-María acoge en sus brazos el cuerpo muerto
de Jesús.
Mc.15,42-45
“María lo recibe
muerto en sus
brazos.”
Virgen Dolorosa
Ruega por nosotros.

8. 7.-María acompaña a Jesús a la sepultura en
espera de la resurrección.
Jn.19,40-42
“Acompaña a Jesús a
la sepultura.”
Virgen Dolorosa
Ruega por nosotros.

9. La Santísima Virgen concede siete gracias a las almas
que la veneran diariamente, mediante lágrimas y dolor
con siete Avemarías:
1.- Pondré paz en sus familias.
2.- Serán iluminados en los misterios
de Dios.
3.- Los consolaré en las penas y los
acompañaré en los trabajos.
4.- Les daré aquello que me pidan en
tanto no se oponga a la Voluntad
adorable de mi Divino Hijo y a la
santificación de sus almas.

10. 6.- Los asistiré visiblemente en el momento
de la muerte: verán el rostro de su Madre.
7.- Conseguiré de mi Divino Hijo que aquellos
que propaguen esta devoción a mis lágrimas
y dolor serán trasladados de esta vida
terrenal a la felicidad eterna, directamente,
pues quedarán borrados todos sus pecados y
mi Hijo y yo seremos “su eterno consuelo y
alegría”.
5.- Los defenderé en los combates espirituales con el enemigo
infernal y los protegeré en todos los instantes de su vida.