La leyenda cuenta que Inti, el dios Sol, envió a sus hijos Manco Cápac y Mama Ocllo desde el Lago Titicaca para fundar una ciudad. Manco Cápac recibió una vara de oro que se hundió en el cerro Huanacaure, lugar donde fundaron la ciudad del Cusco. Manco Cápac enseñó agricultura y arquitectura a los hombres, mientras Mama Ocllo enseñó tejido y cocina a las mujeres.