La bancada progresista del Parlamento del Sur emitió este lunes un comunicado en el que saludan el retiro de Uruguay de las conversaciones del TISA, apoyan a Argentina en su lucha contra los fondos buitres, entre otros temas.

1. Declaración de la Bancada Progresista del PARLASUR
21 de septiembre de 2015
Reunida en el marco del Plenario del Parlamento del Mercosur, la Bancada
Progresista debatió sobre los desafíos que están enfrentando nuestros países a nivel político,
económico e internacional. Volvemos a identificar ante la situación de crisis global del
capitalismo, la necesidad de reformular la actual estructura financiera internacional para
poner al capital al servicio de la producción, desalentando los ataques especulativos y que a
su vez se preserve el principio de inmunidad de jurisdicción y ejecución, como derechos de los
Estados nacionales, ante los tribunales internos extranjeros.
En el plano multilateral, queremos destacar la reciente aprobación de la Resolución
por parte de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), de la
Resolución que establece los "Principios básicos para la reestructuración de las deudas
soberanas". Estamos convencidos que este es un paso fundamental en la búsqueda de una
solución oportuna, eficaz, completa y duradera al problema de la deuda en países en
desarrollo, tal como los había expresado esta Bancada Progresista, en la Declaración emitida
el 23 de junio de 2015 en la Ciudad de Buenos Aires.
Saludamos al pueblo y al gobierno argentino por este logro político y diplomático que
ratifica la soberanía de los Estados para fijar su propia agenda de desarrollo, incluida la
reestructuración de su deuda.
Saludamos la retirada de Uruguay y Paraguay de las negociaciones del Acuerdo de
Libre Comercio de Servicios (TISA), y llamamos a mantener y fortalecer la estrategia de
negociar como bloque con otros actores globales los acuerdos comerciales que sean
necesarios.
Manifestamos nuestro apoyo al gobierno brasileño y a su Presidenta Dilma Rousseff,
en defensa de su mandato legítimamente conquistado con el apoyo de la mayoría del pueblo
brasileño, y nos colocamos frontalmente en contra de las tentativas de golpe institucional que
buscan perpetrar sectores de oposición y las clases dominantes.
Manifestamos nuestra profundo rechazo a la vigencia del Decreto del Presidente
Obama que declara a Venezuela como una “amenaza extraordinaria” a su seguridad exterior.
En este sentido, vemos con preocupación como se han activado y promovido conflictos para
desestabilizar la región a partir del desconocimiento de la institucionalidad democrática de
República Bolivariana de Venezuela que afecta su soberanía, integridad territorial y unidad
nacional, y representa una clara intromisión en sus asuntos internos.
Que se han revivido acciones neocolonialistas promovidas por intereses económicos
transnacionales con el propósito de socavar la unidad latinoamericana. Nos preocupa la
decisión de la República Cooperativa de Guyana de conceder permisos de explotación

2. petrolera en el Esequibo, región bajo disputa fronteriza con la República Bolivariana de
Venezuela, en desconocimiento de acuerdos internacionales suscritos.
Seguimos con preocupación la situación fronteriza entre Colombia y Venezuela, y
hacemos un llamado a resolver el diferendo por vía del diálogo y el entendimiento, por los
canales que nos hemos dado los países sudamericanos para mantener nuestra región como
una zona de paz.
El contrabando de productos, el acaparamiento y el ataque a la moneda venezolana
constituyen graves ataques a la economía venezolana, los cuales en el marco de un proceso
electoral, buscan desestabilizar las instituciones democráticas de la República Bolivariana de
Venezuela.
Hacemos un llamado a respaldar todos los procesos electorales en nuestra región y la
voluntad popular expresada en las urnas, alertando que ningún poder constituido o de facto
puede desconocer la voluntad popular. Saludamos las gestiones de UNASUR y CELAC en
términos de resolver los diferendos que surgen en nuestra región.
Expresamos nuestra profunda preocupación frente a la tragedia humanitaria que se
cierne miles de desplazados, refugiados y migrantes que procuran llegar a los países de la
Unión Europea, provenientes de África y Oriente Próximo como resultado, entre otras
razones, de las propias contradicciones e irresponsabilidades políticas en las que han
incurrido los propios países desarrollados.
Las desigualdades, la falta de oportunidades, las guerras, la violencia y las
permanentes crisis políticas y económicas están en la raíz de estos movimientos forzados
poblacionales que degradan vergonzosamente a miles de seres humanos que han perdido su
lugar en el mundo.
Instamos entonces a los estados miembros de la Unión Europea, a honrar sus
compromisos internacionales, actuando de forma solidaria y responsable , coordinando una
respuesta estructural, integral para con los refugiados y colocando, por encima de cualquier
otra consideración, la dignidad y la protección los derechos humanos que le asisten a de cada
persona y su familia. Para ello es urgente que se instrumente una política migratoria común
consistente, flexible y capaz de canalizar el flujo migratorio, alejando la tentación de una
estrategia selectiva, represiva y xenófoba.
Saludamos la decisión de los gobiernos de Brasil y Uruguay de posibilitar la radicación
de refugiados provenientes de Siria, e invitamos a los estados partes del Mercosur a
instrumentar mecanismo que permitan la radicación en forma expedita, y en el marco de sus
propias legislaciones, de refugiados provenientes de las zonas en conflicto.
Finalmente, queremos destacar el importante hecho político que supone la visita del
Papa Francisco a la República de Cuba, lo cual fortalece el diálogo entre los pueblos y la
supresión del bloqueo económico que limita el pleno desarrollo de la producción y el bienestar
del pueblo cubano.