El documento identifica las zonas de Medellín más propensas a sufrir deslizamientos de tierra, incluyendo las laderas nororientales, occidentales, y parte de El Poblado y Envigado. Los investigadores de la UN concluyeron que los movimientos en masa serán más frecuentes y fuertes en el Valle de Aburrá, y cien kilómetros presentan peligros preocupantes. El documento también presenta un enlace a un artículo relevante sobre el tema.