La cultura es lo que identifica a cada comunidad humana. La globalización ha llevado a un mayor consumismo de elementos culturales de otros países. El proceso de globalización puede llevar a la enajenación de las personas al verse inmersas en modos de vida impuestos por intereses supranacionales. El desarrollo de las telecomunicaciones y la tecnología han permitido una mayor integración global pero también plantean retos éticos y medioambientales.