1. Ensayo de Filosofía y Ética<br />Autor: Alberto Mendieta<br />El Perú es un país donde la minería tiene la particularidad de ser una de las actividades económicas con mayor relevancia. Debido a la paupérrima ejecución de medidas en contra de la contaminación ambiental por parte de las mineras, éstas hacen con sus relaves lo que mejor les parece; siendo uno de los mayores problemas las emisiones de plomo (siendo Perú el cuarto país productor de plomo en el mudo) que éstas ocasionan; pues, el plomo es muy pernicioso para la salud humana. En el siguiente ensayo, se evaluará el dilema de un gerente de producción, a quien llamaremos Carlos. <br />Éste dilema consiste en que Carlos /tiene a su madre postrada en una cama, necesitando urgentemente un trasplante de corazón; ya que, sin él, ella dejaría de existir. En consecuencia, él necesita una alta suma de dinero para poder costear el gasto médico que el trasplante significa; lo cual podría ser cubierto si le aumentaran el sueldo en el monto que él ya ha solicitado. Por otro lado, está pensando en comprar una máquina que disminuye en un 60% las emisiones de plomo, con la cual podrá cooperar con el bienestar de la salud de las personas que habitan alrededor de la mina; sin embargo, ha recibido grandes pedidos de plomo para el extranjero, lo cual significa tener que producir más de lo acostumbrado y usar el dinero que sería invertido en la máquina, sin volver a contar con éste sino hasta los próximos dos años. Carlos conoce las externalidades negativas que genera la minera y las consecuencias que pagan las personas que viven cerca a la mina; así como, es consciente que si él llegara a concretar dicha venta, sus jefes lo bonificarían y así, él podría financiar lo necesitado para con la salud de su madre.<br />Carlos, semanas antes, había visto el informe del Centro Nacional de Alimentación y Nutrición de septiembre del 2005, en el cual se mencionaba una serie de problemas que ocasionaban a las personas, las emisiones de plomo en las zonas cercanas a las minas. Donde, se sostenía que los relaves ocasionaban disminución en la función cognitiva, baja estatura, anemia, disminución de audición, problemas de comportamiento, y del desarrollo neuropsicológico. Además, bajo estudios estadísticos, se concluyó que los más afectados eran los niños, mediante la ingestión de tierra y polvo contaminado con plomo.<br /> Por este motivo, Carlos necesitaba determinar si sus acciones serian correctas o incorrectas en proporción a la felicidad o infelicidad que éstas producirían; pues, según Mill, todo individuo tiene por la felicidad y el placer propios al interés de la colectividad que se ve afectada por sus acciones (Bacigalupo, 2006, p.6). Para Carlos, tomar esta decisión es de suma importancia; ya que, por un lado está el placer que le generaría a él comprar la máquina para reducir las emisiones porque de ésta forma generaría felicidad a los pobladores de los lugares cercanos a la mina y contribuiría, en lo personal, a no seguir perjudicando la salud de estas personas, las cuales ya se encuentran bastante deterioradas; además, le preocupa mucho el futuro de los niños, los cuales serían los más involucrados con su decisión. Por otro lado, le daría mucho placer y satisfacción, tener el reconocimiento laboral y profesional por parte de sus jefes; ya que de esta forma le aceptarían su solicitud por el aumento de sueldo con el cual podría pagar el trasplante de corazón que tanto necesita su madre; si es que llegara a concretar la venta de las cuantiosas toneladas de plomo. Tomando como argumento lo planteado por Mill anteriormente, Carlos deberá considerar que las consecuencias de sus acciones tengan como objetivo el bienestar y felicidad de los demás; pues, en sus manos estará la felicidad propia; ya que, el compromiso con la felicidad de los demás es la mejor garantía de la felicidad propia (el principio pragmático del principio de la utilidad); además de tener en cuenta la “regla de oro”, trabajar por la felicidad de los demás o, considerar el dicho “haz al otro lo que quieres que te hagan a ti”. Por lo que la acción de Carlos tendrá como fin en lo que según Mill concluye es el utilitarismo, el patrón de corrección no es, pues, la mayor felicidad del agente, sino la mayor felicidad en conjunto.(Bacigalupo, 2006, p.5); bajo este enfoque, Carlos optará por satisfacer el placer del mayor numero de involucrados con su acción; por lo tanto, utilizará el dinero de las reservas para adquirir la nueva máquina, con la cual reducirá las emisiones de plomo; esto tendrá como desenlace la felicidad de todos las comunidades que se encuentran alrededor de la mina; en especial el profundo placer de los niños ; quienes siempre se han visto afectados en gran magnitud por la externalidad. Sin embargo, esta decisión tendrá la respectiva parte perjudicada, que en este caso será la madre de Carlos, quien ya no podrá ser atendida quirúrgicamente con el fin de realizar el trasplante; pues, de seguro, la anciana madre morirá. <br />La función y prioridad de Carlos en esa empresa es trabajar por el beneficio de los accionistas y es algo que lo tiene bien claro; pues, este punto está estipulado en su contrato laboral. Viendo el caso con ojo Homérico, se puede señalar que Carlos debe cumplir con la empresa, que sería la sociedad a la cual él pertenece; ya que, de no ser así, él estaría traicionando a las personas de su sociedad, siendo una acción no aceptada y castigada dentro de sociedad Homérica. <br />Carlos está considerando que la acción o decisión que él realice sea ético; por lo tanto, considerará la visión kantiana de la moralidad, para poder obrar de manera moral. Él no sabe si seguir su razón, el cual seria de ayudar a las personas de los pueblos, basándose en el razonamiento anterior propuesto por Mill; o, seguir sus instintos, lo cual significaría ayudar y contribuir con el desarrollo de la empresa donde trabaja; o, mejor dicho, contribuir con la sociedad a la cual él pertenece. Sin embargo, Carlos necesita sentirse feliz con lo que haya tomado como decisión; es por ello que vale considerar que “ …en realidad, encontramos que cuanto más se preocupa una razón cultivada del propósito de gozar de la vida y alcanzar la felicidad, tanto más se aleja el hombre de la verdadera satisfacción, por lo cual muchos, y precisamente los más experimentados en el uso de la razón, acaban por sentir, con tal de que sean suficientemente sinceros para confesarlo, cierto grado de misología u odio a la razón, porque tras hacer un balance de todas las ventajas que sacan, no digo ya de la invención de todas las artes del lujo vulgar, sino incluso de las ciencias (que al fin y al cabo les parece un lujo del entendimiento), hallan, sin embargo, que se han echado encima más penas que felicidad hayan podido ganar, y, más que despreciar, envidian al hombre común, que es más propicio a la dirección del mero instinto natural y no consiente a su razón que ejerza gran influencia en su hacer y omitir….” (Kant, Fundamentación de la metafísica de las costumbres, 1785). <br />Es por ello que Carlos elegirá actuar basándose en sus instintos y no en su razón. Pues, la razón no es lo suficientemente apta para dirigir de un modo seguro a la buena voluntad; nuestros instintos naturales son mejores directores. Sin embargo, aún tiene que determinar si es que la acción que realizará será por deber o por inclinación; ya que, para que la acción tenga un verdadero valor moral, la acción debe basarse en la carencia total de inclinaciones y realizarlo sólo por deber, pues dicha persona encontraría en sí mismo mayor valor que una persona con temperamento bueno, porque el verdadero valor moral estriba en el carácter que hace el bien, no por inclinación sino por deber.<br />Considerando que la empresa funciona como un sociedad Homérica, Carlos, tiene que obedecer a su deber y actuar de acuerdo a ello; por lo que optará por vender al extranjero y cumplir con los requerimientos de la empresa. Dado que la empresa equivale a la sociedad Homérica, la acción ejecutada por Carlos no será por intención egoísta, que es cuando la persona tiene inclinación inmediata y tiene como medio el deber. Dada esta conclusión kantiana, la madre será salvada; ya que, en consecuencia de la venta de plomo, su hijo será recompensado con el aumento de sueldo que había solicitado. Pues, claro está, que esto último no estaba considerado al momento de que Carlos tomara su decisión.<br />Vistos estos dos puntos de vista, totalmente diferentes y con sus respectivas restricciones del caso, se puede concluir que cada persona tiene su verdad, como sostuvo Protágoras. Así como, se puede determinar también que existen personas con diferentes costumbres, pensamiento, hábitos, etc.; en los cuales influenciarán dichos puntos al momento de tomar una decisión; lo cual puede ser visto de diferente forma dependiendo a través de qué lentes se vea.<br />Tomando en cuenta las dos salidas de Carlos y viéndolo desde un punto de vista contemporáneo, se puede concluir que ambas situaciones lo encontraríamos erradas; ya sea, por el medio o por el fin. De acuerdo a la primera conclusión, visto desde el enfoque de Mill, estaría totalmente equivocado; ya que, se consideraría que la primera prioridad es la madre y no personas que consideramos ajenas y extrañas. Por otro lado, evaluando la solución kantiana, se puede determinar que el fin estaría mal usado contemporáneamente, ya que el medio sería cooperar con la empresa, pero siempre teniendo como fin la idea de ayudar a la madre.<br />En conclusión, con este ensayo se ha querido mostrar la evolución del pensamiento de las personas, mostrando, ante una misma situación, dos diferentes salidas; tomando en cuenta diferentes pensamientos, los cuales, se dieron en diferentes periodos de la historia ética-filosófica. Por último, se concluye con una visión contemporánea, fortaleciendo esta idea y dando una pequeña visión de cómo se resolvería dicho dilema hoy en día.<br />Bibliografía:<br />Bacigalupo, Luis. (2006). El utilitarismo según Jhon Stuart Mill. Recuperando el 4 de Diciembre de 2010, de https://sites.google.com/a/ue.edu.pe/biblioteca-digital/administracion-y-finanzas/filosofia-y-etica.<br />Kant, Immanuel. (1785). Fundamentación de la metafísica de las costumbres. . Recuperando el 4 de Diciembre de 2010, de https://sites.google.com/a/ue.edu.pe/biblioteca-digital/administracion-y-finanzas/filosofia-y-etica.<br />Kant, Immanuel. (1784). ¿Qué es la ilustración?. En: Emmanuel Kant. Filosofía de la Historia. . Recuperando el 4 de Diciembre de 2010, de https://sites.google.com/a/ue.edu.pe/biblioteca-digital/administracion-y-finanzas/filosofia-y-etica.<br />Santuc,Vicente. (2005). El topo en su laberinto. . Recuperando el 4 de Diciembre de 2010, de https://sites.google.com/a/ue.edu.pe/biblioteca-digital/administracion-y-finanzas/filosofia-y-etica.<br />Aristoteles. Libro1. Sobre la felicidad. . Recuperando el 4 de Diciembre de 2010, de https://sites.google.com/a/ue.edu.pe/biblioteca-digital/administracion-y-finanzas/filosofia-y-etica.<br />