Este documento presenta cuatro leyes para lograr el éxito: 1) Vivir con un objetivo y propósito definido, 2) Hacer planes concretos y un programa para alcanzar las metas, 3) Trabajar duro y formar el carácter a través de la disciplina y el esfuerzo, 4) Aprender de los errores e intentarlo de nuevo si se falla. Siguiendo estas cuatro leyes se puede comenzar una nueva forma de vivir y alcanzar el éxito.

1. EL ÉXITO SE LOGRA CON CUATRO LEYES
POR MELIDA ANTONIA AMAYA
“¡Amigos, y compañeros tengan muy buenas tardes!"
Muchas gracias licenciada Isabel Torres por concederme la palabra a distinguido grupo y es
mediante su magnánima persona que me dirigiré a este honorable cuerpo de estudiantes.
Como es bien sabido para obtener el éxito se debe tener en cuenta algunas reglas que sirven de
guía en nuestra senda de la vida.
Uno de los fundamentales cimientos del éxito es Vivir con un objetivo y es Tener un propósito
definido proporciona una energía incalculable en la vida; pero concentrar en ese propósito todas
las fuerzas es, ni más ni menos, hacerse invencible.
Acerca del autor:
La búsqueda del éxito personal, familiar, profesional, es predominante en el pensamiento del
género humano. Millones de personas se preguntan: “¿Qué puedo hacer?” Quisieran que alguien
les revelara el secreto para tener éxito en su trabajo, en su carrera, en su profesión, en su negocio,
en su matrimonio. Aquí está el secreto. El autor presenta cual es la clave para triunfar, el heroísmo
para vencer y la valentía para luchar Cómo defender los ideales y convertir los sueños en
realidad. Cuáles son las leyes del verdadero éxito. Cómo descubrir lo que distingue a los hombres
y las mujeres de carácter.
Hacer planes concretos para alcanzar el éxito: es necesario realizar una agenda diaria, y tener un
plan a corto o largo plazo, si es preciso a cinco años aunque la vida esta llena de sorpresas y no se
sabe como se estará en cinco años, sin embargo es importante crear un programa que especifique
las cosas que se puedan cumplir, cosas que sean fáciles de realizar. Esto hará que nuestro esfuerzo
no se vea frustrado en el futuro y los resultados sean satisfactorios.
“Tu éxito puede comenzar con pluma y papel, es decir, con la acción de fijar claramente tus
metas, definir de modo preciso tus ideales, y trazar un plan para alcanzarlos. Los grandes logros
humanos no son fruto de la casualidad.” Escribir y plantearse que se quiere lograr en la vida.
Trabajo y carácter
El carácter se forma con la disciplina, el esfuerzo, el trabajo rinde beneficios si se realiza con una
actitud positiva ante la vida. Y con la voluntad de hacer las cosas bien y de una manera rápida.
El trabajo debe hacerse bien, no sólo para conseguir un salario honradamente, sino por nuestra
dignidad. Al cumplir bien con nuestras tareas estamos fortaleciendo nuestro carácter. La

2. laboriosidad, la diligencia, el trabajo duro, son los elementos máximos que abonan el terreno de la
vida. “La ociosidad es la madre de todos los vicios”.
Intentarlo una vez
A veces la vida hace que uno caiga una y otra vez, se debe aprender a levantarse con la frente en
alto, cada día enfrentar la vida como si fuera el ultimo día, y hacer las cosas en el aquí y ahora.
Dejar el pasado atrás. Y aprender de los errores y es importante conocerse a si mismo para poder
hacer mejor las cosas cada día, se debe hacer una FODA para entender donde fallamos y donde
debemos trabajar más
Si quieres triunfar, inténtalo de nuevo… hasta que lo consigas. Las personas que alcanzan la
cumbre del éxito no son las que nunca fallan, sino las que están dispuestas a aprender de sus
propios errores. Equivocarse no es fracasar. El fracaso consiste en no saber rectificar.
Por eso les invito a que tomemos estos cuatro principios como propios y que apliquemos cada uno
a diario. Vivir con un objetivo,
Muchas gracias Licenciada Isabel Torres y Compañeros presentes les aseguro que estas cuatro
leyes son la base del comienzo a una nueva forma de vivir. “Las cuatro leyes del éxito”
Reprender a los demás es muy fácil, pero es muy difícil mirarse bien a sí mismo.
San Francisco de Sales
No esperes por el momento preciso. Empieza ahora. Hazlo ahora. Si esperas por el momento
adecuado, nunca dejarás de esperar. (Jasmine Gillman)