Una empresa japonesa ha creado un prototipo de dispositivo que convierte calor en electricidad generando casi 40 miliwatios por centímetro cuadrado. El dispositivo usa dos semiconductores cerámicos a diferentes temperaturas que crean una corriente eléctrica cuando se conectan. El dispositivo podría usarse para aprovechar el calor generado por otros aparatos como ordenadores portátiles para recargar sus baterías y alargar su autonomía, o para convertir calor de fuentes como el sol en energía eléctrica.