El efecto invernadero es un proceso natural que mantiene la temperatura media de la Tierra en torno a los 15°C, y que se produce por la acción de los gases de efecto invernadero como el vapor de agua, el dióxido de carbono y el metano presentes en la atmósfera. El aumento de las emisiones de estos gases debido a la actividad humana ha intensificado el efecto invernadero y provocado un calentamiento global que amenaza el equilibrio del planeta.