La familia Herrera se muda de Buenos Aires a Las Flores, un pequeño pueblo en la Patagonia, luego de que el padre pierde su trabajo como médico. A los hijos no les gusta vivir en el pueblo, que carece de entretenimientos modernos. Sin embargo, un grupo de residentes planea un complot para evitar que el pueblo se extinga, convenciendo a un rico terrateniente de donar dinero para construir un camino pavimentado haciéndole creer que la hija del médico y su nieto son novios. El plan tiene