El poema describe al agua como la historia, el rumbo y el mundo del hombre. Compara al hombre con un gesto, sueño o pueblo, y al agua con la memoria, la vida y París. Exhorta al lector a cuidar el agua, ya que ella cuida de nosotros, y la describe con varios términos como río, espuma, lluvia, nube y mar. Finalmente, enfatiza que el agua es un precioso tesoro y la fuente de la vida, por lo que debemos cuidarla.