La película se centra en una escuela donde los estudiantes enfrentan discriminación racial y problemas familiares como pobreza y drogas. La profesora Erín nota la división entre estudiantes blancos y negros y les da libros en blanco para que escriban sobre sus experiencias. Al desahogarse a través de la escritura, los estudiantes comienzan a superar sus conflictos y convertirse en una familia unida, demostrando que la libertad se logra a través de la comprensión y el respeto mutuo.