Desde “¿Quién se ha llevado mi queso?” el autor nos enseña que, en la vida, uno puede alcanzar su queso (entendiéndose este término como todo aquello que el ser humano anhela para progresar en el ámbito personal, laboral y hasta económico) pero, para llegar a él, deberá sortear los obstáculos que pueden aparecer en nuestro camino. En otras palabras, puede decirse que, a través de esta parábola, Johnson nos demuestra no sólo la importancia de aceptar y afrontar