APORTES Y CARACTERISTICAS DE LAS OBRAS DE CORBUSIER. MIES VAN DER ROHE
Ensayo unidad uno
1. Por qué y para qué se hacen balances o informes de DD.HH. y DIH
APLICABILIDAD DE LAS ESTRATEGIAS DE MANIPULACION MEDIATICA
(Noam Chomsky) a casos concretos en Colombia
Y
(Respuesta a las preguntas de Autoevaluación)
Actividad 1
Ensayo académico
Presentado a: Edgar Calderón Sanín.
Curso: Seminario Optativo: Balances nacionales conducentes a la defensa de
los DD.HH.
MARTIN RESTREPO METAUTE
Maestrante de Educación
UNIVERSIDAD CATÓLICA DE ORIENTE EN CONVENIO CON
LA FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CATÓLICA DEL NORTE
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
LÍNEA DERECHOS HUMANOS
MEDELLÍN
2014
2. Contenido
1. APLICABILIDAD DE LAS ESTRATEGIAS DE MANIPULACION MEDIATICA
(Noam Chomsky) a casos concretos en Colombia _________________________4
2. AUTOEVALUACION (Respuesta a las preguntas de Autoevaluación) ______4
2.1 ¿Qué pretenden los medios de información o comunicación cuando
trasmiten su visión de los hechos? ____________________________________13
2.2 ¿Qué buscan los balances en DD.HH y DIH cuando son presentados al
público? ________________________________________________________13
2.3 ¿Cómo los medios de información como los balances en DD.HH y DIH
pueden crear imaginarios sociales que beneficien o perjudiquen ciertas visiones,
sectores sociales o estructuras?______________________________________14
2.4 ¿Cómo los medios de información pueden configurar imaginarios sociales
convirtiendo a las personas en acríticas?_______________________________15
2.5 ¿Cómo los medios de información pueden configurar imaginarios sociales
convirtiendo a las personas en acríticas?_______________________________15
2.6 ¿Cómo se relaciona la teoría de los filtros sociales con la versión oficial a
cerca de la situación de DD.HH en Colombia?___________________________16
Bibliografía ______________________________________________________19
3. 1. APLICABILIDAD DE LAS ESTRATEGIAS DE
MANIPULACION MEDIATICA (Noam Chomsky) a casos
concretos en Colombia
Plantearnos un estudio en lo referente a la situación nacional y la participación
que tienen los medios de comunicación, con su objetivo de informar y dar a la
opinión pública los argumentos necesarios para cuestionar, aprobar o reprochar
acciones Estatales o sociales que ocurran y que por alguna u otra manera nos
compete como seres pensantes integrantes de esa sociedad en la cual convivimos,
puede ser complejo. Los matices que se pueden generar a partir de este
planteamiento pueden ser muchos, sin contar la polémica que se puede generar al
respecto y que, por supuesto, no puede excluir la discusión en torno a los
movimientos políticos u organizaciones sociales a las que pertenece los medios de
comunicación en cuestión. Caso evidente de lo anterior, parece ser nuestro país
vecino Venezuela, en donde las noticias internas son diferentes a las observadas
en el exterior; los impases o disturbios acaecidos entre las fuerzas gubernamentales
y los grupos estudiantiles, generan abismos ideológicos entre la clase obrera y la
estudiantil que luchan por un bienestar socio-económico, mientras el gobierno
intenta asegurarse el poder y mantener al margen a la oposición.
Lo anterior es un claro planteamiento de la disparidad entre el Gobierno y el
pueblo; pero no lejos de esta realidad social nos encontramos los colombianos, en
atropellos entre la fuerza pública y los mal llamados los grupos de izquierda, cuya
disidencia armada no reconoce al gobierno legítimo. Al respecto de esto último,
haré una reflexión por lo demás cuestionada, pero aun sin tener una respuesta
satisfactoria que permita hacer equitativo el hombre por el hombre, espejo del cual
Levinas de manera acertada plantea el manejo del Yo y el Ser, el individuo
participativo frente al yo racional; para aclarar este punto, merece la pena afirmar
que estamos en un estado de derecho y la participación ciudadana es necesaria
para contrarrestar acciones desiguales, sin embargo, el gobierno es injustamente
criticado cuando ejerce su pleno derecho de poder e interviene en las acciones
delictivas; para idealizar lo anterior, se me viene un recuerdo de un soldado que se
4. encontraba evidenciando la extorción de un ciudadano, increíblemente el Estado es
enjuiciado por la baja de un facineroso que está haciendo mal a la sociedad, sin
embargo el mismo Derechos Internacional Humanitario (DIH) ataca con crueldad al
soldado que estaba realizando su acción de protección a favor de los derechos
protección de la vida y vienes del ciudadano en cuestión.
En Colombia podemos decir que la injusticia hace su aparición ante una
supuesta democracia participativa a favor de delincuentes que desangran al país.
Claro ejemplo de lo anterior, es la siguiente historia que viví mientras era asistente
técnico veterinario en el municipio de Frontino Antioquia, donde trabajaba para la
Cooperativa lechera COLANTA y atendía un grupo de campesinos asociados en
una zona rural, fui llamado para asesorar una finca de más de 100 hectáreas la cual
tenía un inmenso lago con peces en regular estado, una construcción en concreto
con todos las normatividades para procesar la caña de azúcar y extraer panela, una
sólida instalación para el beneficio y proceso del café, un tanque de enfriamiento de
leche con capacidad para 1200 litros y un equipo de ordeño tecnificado con puesto
para ordeñar 6 vacas a la vez de las 120 que tenían en producción, construcciones
que se encontraban en las más lamentables condiciones de mantenimiento; todo
este predio pertenecía a un grupo de 4 guerrilleros desmovilizados y a los cuales el
Estado Colombiano le había “donado” para que produzcan y se mantengan en la
sociedad –quiero aclarar que los propietarios vivían en Medellín y pagaban a un
administrador para que les manejara su propiedad, sin que ellos estuvieran al frente
del negocio de forma directa-.
Al salir del lugar, me encontré con un grupo de campesinos a los cuales también
atendía y que en promedio tenían 20 vacas cada uno; la actitud de rechazo hacia
mí fue evidente, pues manifestaron no entender el por qué se atendía a un montón
de bandoleros que no hacían sino desangrar a la sociedad, no pude más que
quedarme callado ante el argumento “ignorante” de uno de ellos: “mire doctor”, me
dijo mi interlocutor, “estos señores han asesinado no sé a cuántos campesinos y
soldados, han violentado mujeres y ultrajado niños y ahora, sólo por la entrega de
un fusil, el Gobierno les recompensa con la entrega de una de las mejores tierras
5. de esta región para que ni siquiera la usen y aprovechen, ¿no cree doctor que es
injusto que de los impuestos que me saca el Estado por cada litro que produzco, se
le pague a estas personas en representación de sueldos, tierras e instalaciones
mientras que mis hijos no tienen más que comer que lo que puedo llevarles,
mientras la educación de ellos se deteriora cada vez más?” esta misma pregunta la
trasmito a quien lee mi caso y pregunto adicionalmente que hace los DDHH y las
asociaciones para esta realidad social.
Esta situación, que ahora trabajando en el Cauca me entero no es atípica de la
Antioquia, sino que parece ser común el resto del territorio nacional, se ha
mantenido acallada por los medios de comunicación, que no parecen mostrar
interés en publicarla y responden a ella con un silencio sepulcral, permitiendo que
el tiempo pase sin que la sociedad en general conozca lo que se vive en cada rincón
de nuestra nación. Esta situación parece estar soportada en las palabras de Noam
Chomsky (Chomsky & Timsit, 2013) en referencia a las estrategias de los medios,
quien habla de cómo las grandes cadenas noticiosas, tan sólo para mencionar un
aspecto, difieren la comunicación, circunstancia que parecer marcar la historia de
los últimos 50 años, donde la desviación de los hechos reales adormece las mentes
de la población y distorsiona la realidad que vive el pueblo colombiano, provocando
lo que Eduardo Galeano ha denominado realidad virtual y realidad real (Galeano,
2007).
Analizando la problemática planteada bajo algunos de los 10 tópicos que
plantea Chomsky podríamos decir lo siguiente: La estrategia de la distracción impide
que el público piense razonadamente, pues por medio de ésta se realiza un control
social de carácter estratégico puesto que desvía la atención del pueblo de los
problemas importantes que conlleven a amenazar la estabilidad de un poder político
o económico; como lo dice Chomsky, este táctica se realiza mediante la técnica de
distracciones continúas, de las que hacen parte, y tan sólo por citar un ejemplo, las
noticias de entretenimiento y la sección de deportes de los noticieros televisivos.
Aunado a lo anterior, está la táctica de crear problemas y ofrecer soluciones,
también conocida como “problema-reacción-solución”, con la cual se mantiene en
6. hipnosis al público puesto que no se concreta una solución que perdure en el
tiempo; este táctica puede generar procesos irresponsables y acarrear
consecuencias graves como la que viven los campesinos vecinos del grupo
desmovilizado del caso mencionado inicialmente, donde la cólera y la impotencia
de una justicia ciega incrementa el odio y repudio hacia las acciones equivocas del
Estado.
Paralelo a lo anterior, encontramos la estrategia de la gradualidad, donde se
impulsa la repetitividad de las acciones a ser aprobadas, cuyo objetivo es la
aceptación de medidas que en principio fueron rechazadas y se aplican a cuenta a
gotas para que se acepten; en el caso propuesto como ejemplo en este escrito, sin
lugar a dudas se mantiene en pleno silencio y se realizan acciones distanciadas
unas de otras, las cuales si se aplican de manera radical y continua, conllevaría a
huelgas populares. Así mismo, Chomsky estudia el mantener a la sociedad
sumergida en la ignorancia, que para la historia traída a colación aquí consistiría en
unos campesinos que sólo ven el resultado de una medida Gubernamental, sin
ahondar en las consecuencias, un paño de agua tibia a un proceso que se
manifiesta doloroso para el Estado y es difícil de llevar ante la comunidad
internacional.
Ante este panorama, es válido preguntarse: ¿Qué pretenden los medios de
información o comunicación cuando trasmiten su visión de los hechos? A modo de
respuesta Freidenberg (Freidenberg, Revista de pensamiento iberoamericano,,
2007) argumenta que los medios de comunicación también son una industria o una
empresa, un poder importante en el espacio individual, familiar y social, mediadores
políticos que canalizan y crean opinión pública; En el caso expuesto, la no publicidad
de la realidad real que sucede en el país, no sólo evita comunicar una acción, sino
mantenerse vigente como industria generadora de opinión y “educación”. Y
entonces, ¿Dónde están los DDHH y Qué buscan los balances sobre éstos y DIH
cuando son presentados al público? Podríamos decir en este punto, que en
numerosas ocasiones parece que los Derechos Humanos (DDHH) desconocen la
realidad concreta de nuestro país y sus delegados son ciegos ante el panorama de
7. una nación en conflicto como la nuestra, utilizando métodos pocos asertivos para
levantar un plano real de una situación político-social en la que se encuentra
inmerso el país; sin embargo, es claro que estos documentos buscan publicar una
realidad mediante la publicación de evidencias que comprueben la veracidad de los
hechos y su respectiva solución social; el Gobierno da participación y promueve la
desmovilización de grupos armados, ofreciendo recursos en sacrificio de otros
asuntos sociales; esta acción le permite fortalecerse ante la comunidad
internacional; el Estado entonces hace uso los acuerdos internacionales en materia
de DDHH, así lo hace saber la Red de Seguridad Humana al referirse a la acción
propia de los DDHH adoptada por las Naciones Unidas en 1948, instaurando los
pilares del sistema de derechos los cuales son la libertad, igualdad y solidaridad
(Waldner, COMPRENDIENDO LOS DERECHOS HUMANOS, 2013).
Sin embargo, es bien claro que los balances en DDHH y DIH puede, al ser
emitido con un sector concreto de la comunidad, ya sea nacional o internacional,
pueden crear imaginarios sociales que beneficien o perjudiquen ciertas visiones,
sectores sociales o estructuras, retomando nuevamente a Chomsky (Chomsky &
Timsit, 2013), a través de estas estregáis, los medios de comunicación pueden
alterar los conceptos sociales frente a un tema o acto en particular; si los medios
reaccionan de manera alienante o sutil, los balances se verán envueltos en una
realidad ficticia o sospechosa de realidad social. En este sentido Mac Luhan, citado
por Freidenberg, establece que los medios deben cumplir determinadas funciones,
entre las cuales se encentran la vigilancia social y política, que permite el control de
los poderes públicos y gubernamentales; de tal suerte que se permita evidenciar lo
que sucede, como actos de corrupción, de abuso de autoridad y demás;
permitiéndole a la opinión pública condenar el hecho y actuar (Freidenberg, Revista
de pensamiento iberoamericano,, 2007).
Adicional al planteamiento anterior, el poder de los medios es particular y
alcanza con efectividad objetivos sobre otros actores a voluntad de quien los dirige,
poseen o controlan, y quienes se valen de ellos para canalizar sus mensajes. Sobre
esto, Castillo hace una reflexión sobre el tema y nos dice que en su forma moderna,
8. el juego político se organiza y estructura, de manera creciente, sobre la opinión
pública y la contienda política de aspecto simbólico tiende a reducirse
significativamente en la batalla por conquistar la opinión, lo cual sugiere los alcances
y pretensiones que los grupos pueden llegar a obtener de ellos (Castillo Esparcia,
LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN COMO ACTORES SOCIALES Y POLITICOS,
2011).
Retomando todo lo anterior, no es descabellado decir que entonces los medios
de información pueden configurar imaginarios sociales convirtiendo a las personas
en acríticas, pues se encuentran preparados para desvirtuar la información y diferirla
a la opinión publica de acuerdo a unos intereses de los grupos de poder económico
y político. Esta situación no es nueva y a lo largo de la Historia se ha observado
cómo los diferentes regímenes se han apoyado en información, e incluso
propaganda, distribuida de forma masiva entre la población, para que se sienta
inclinada a apoyar o repudiar determinada ideología y/o accionar. Este tipo de
fenómeno, ha sido estudiado por pensadores no sólo de la talla Chomsky en su
estudio sobre medios de comunicación, sino también filósofo René (Girard, 2002) ,
en donde establece la efectividad de “demonizar” al contrario para generar repudio
hacia él y hacer que la población lo ataque y siga la causa contraria a la que
representa.
Un claro ejemplo (Chomsky & Timsit, 2013) , cuando establece cómo la
Comisión Creel convence la población Estadounidense de la necesidad de
participar en la I Guerra Mundial, cuando seis meses antes se habían mostrado
totalmente apáticos ante la idea y se mostraban partidarios de una actitud mas
pacifista; la forma de lograrlo estuvo marcada por una amplia propaganda mediática
que incluía fotos de niños mutilados, mujeres violadas y poblaciones enteras
arrasadas por los alemanes, haciendo que éstos encarnaran todo lo que significara
la “inhumanidad” y la antidemocracia. Siguiendo con este último pensador, un caso
evidente del proceso de configurar imaginarios sociales a través de los medios de
comunicación, lo podemos observar en la Guerra Fría, cuando tanto la Unión
Soviética como Estados Unidos emitieron propaganda para ganar adeptos a sus
9. respectivas causas. Para el caso de la URSS, acusaron a occidente de enajenar la
conciencia de los individuos, acaparar la riqueza y explotar al resto del mundo en
su beneficio, mientras USA recalcaba la idea de los rusos y sus aliados como
símbolos de la antidemocracia y la coacción de las libertades civiles, entre otros
aspectos.
Para el caso de Colombia este fenómeno no es nuevo, a lo largo de la Historia
de nuestro país se pueden situar varios casos. Por ejemplo, en varios documentos
fuente de información lo acaecido en el país en la primera mitad del siglo XX, es
común encontrar alusión a sacerdotes conservadores que establecía que los
liberales eran la encarnación del mal, la inmoralidad e incluso, Malcolm dice que
San Exequiel Moreno obispo de Pasto, promulgó que matarlos no era pecado e
instaba a los conservadores a salir en defensa de lo que él y varios dirigentes
políticos consideraban el buen curso de la sociedad, discurso que no sólo se daba
desde el púlpito de las iglesias, sino que abarcaba emisoras y periódicos de la época
(Malcolm, 1993).
Por otra parte, y si analizamos el uso de los filtros sociales con la versión oficial
a cerca de la situación de DD.HH en Colombia, es evidente que las noticias que
circulan a nivel nacional por los diferentes medios de comunicación nacional, pasan
por diferentes filtros, ya sean gubernamentales o empresariales. Estos filtros
determinan, en gran medida, los temas de actualidad que se discuten en el país y
la relevancia que opinión pública da a los mismos. En este sentido, las noticias
relacionadas con los Derechos Humanos no son la excepción, prueba de lo anterior
parecen ser varias noticias sobre desplazamientos forzados, causados por grupos
de extrema derecha y extrema izquierda que se dan en diversas regiones del país
y que, en muchos casos, solo circulan brevemente en emisoras locales, puesto que
en varias ocasiones van en contravía de políticas estatales mostrando una
perspectiva de la realidad diferente a la que se emite de forma masiva en los medios
de circulación nacional.
10. Sin embargo este fenómeno no es una particularidad específica de los medios
de comunicación actuales. Haciendo un recorrido por la Historia nacional, en 1985
en un periodo reconocido por un amplio accionario guerrillero y los carteles del
narcotráfico, se da la toma del Palacio de Justicia los días 6 y 7 de noviembre
efectuada por el grupo guerrillero M-19, con una complicidad aún no comprobada
con el Cartel de Medellín quien al parecer contribuyó con armas y dinero a cambio
de que fueran destruidos expedientes que los implicaban. De esta forma, una célula
de dicho movimiento insurgente desarrolla la “operación Antonio Nariño por los
Derechos del Hombre” y logra hacerse con el control de dicha edificación, diferentes
cadenas de televisión y radio interrumpieron su programación para cubrir la noticia
paso a paso, siendo así como la mayoría del país se enteró de los hechos y empezó
a seguir los eventos que se emitían en directos desde el lugar de los hechos.
A medida que la toma avanzaba, la situación se hacía cada vez más
preocupante: los magistrados de la Corte Suprema de Justicia habían sido tomados
como rehenes, al igual que los demás empleados de la edificación, mientras el
grupo insurgente amenazaba con tomar medidas más drásticas si el presidente del
momento, Belisario Betancurt, no se hacía presente y se sometía a un juicio político.
Por su parte el mandatario citó al Palacio de Nariño a todo su gabinete ministerial y
a los altos mandos militares, actualmente se desconoce lo que ocurrió de forma
exacta al interior de dicha reunión, incluso se ha hablado de un golpe de Estado
momentáneo en donde el Presidente de la República se convirtió en convidado de
piedra de las decisiones que se tomaron, lo cierto es que el Ejército Nacional
organizó la retoma de la edificación, que dio como resultado la muerte de varios
civiles, entre ellos la mayoría de los magistrados y la desaparición de varias
personas que se observa salen vivas en custodia del Ejército Nacional y de los
cuales aún no se tiene reporte de su paradero.
En este punto vale la pena resaltar que si bien, y tal como lo he mencionado, en
un principio el país tuvo la oportunidad de seguir la noticia, posteriormente el
gobierno a través de la Ministra de Comunicaciones del momento, Noemí Sanín,
ordenó suspender el cubrimiento de la noticia y trasmitir en su lugar el partido de
11. fútbol entre los equipos Unión Magdalena y Millonarios, que no estaba programado
para ser emitido en vivo. En vista del caso omiso que hicieron varios periodistas de
la petición de la ministra, ésta amenazó con clausurar cadenas de televisión y
emisoras que continuaran con la trasmisión en vivo de los eventos suscitados en la
Plaza de Bolívar de Bogotá los mencionados días, bajo el argumento de
salvaguardar la democracia, el orden público y evitar que los insurgentes se
enteraran del accionar del Ejército. Sin embargo, ante estos hechos 29 años
después la opinión pública aún sigue sin conocer exactamente qué pasó con los
desaparecidos puestos en custodia por el Ejército, entre otros hechos graves, que
fueron opacados por la Avalancha de Armero, ocurrida el 17 de noviembre del
mismo año, que fue utilizada como cortina de humo distractora para apaciguar a la
opinión pública y hacer que los eventos del Palacio de Justicia fueran “olvidados”
por los colombianos.
Sin embargo, a pesar de lo anterior, los medios de comunicación siguen
ocultando información a la opinión pública para favorecer a un sector específico. A
modo de ejemplo, citaré el caso del reconocido periodista Enrique Santos Calderón,
hermano del actual Presidente de la República, quien recientemente publicó su libro
“Así Empezó Todo”, en donde confiesa, al igual que lo ha hecho en algunas
entrevistas radiales y televisivas sobre el tema, que se enteró del inicio de los
diálogos del proceso de paz actual mucho antes que la gran mayoría de los
colombianos, pero que decidió callar para favorecer los planes del gobierno y evitar
posibles sabotajes (Davila, 2014).
Para concluir, después de exponer todos los argumentos anteriores, es evidente
el papel que ha jugado los medios de comunicación como creadores de realidad y
conciencia en la población, proceso que es anterior incluso anterior a la declaratoria
de los DDHH de 1948, la cual permanece en nuestra Constitución política. Donde
diariamente observamos como el decálogo de Chomsky se cumple a cabalidad en
especial a lo referente a la problemática social que sufre nuestro país.
12. 2. AUTOEVALUACION (Respuesta a las preguntas de
Autoevaluación)
Con el fin de dar claridad a este proceso, daré respuesta a las preguntas
utilizando el ejemplo claro que expuse; no sin antes aclarar que los DDHH
desconocen de la realidad de nuestro país o sus delegados son ciegos ante una
realidad de un país en conflicto o utilizan métodos pocos asertivos para levantar un
plano real de una situación político-social que tienen el país.
2.1 ¿Qué pretenden los medios de información o
comunicación cuando trasmiten su visión de los hechos?
Ante esta pregunta, Freidenberg (Freidenberg, 2007) argumenta que los medios
de comunicación también son una industria o una empresa, un poder importante en
el espacio individual, familiar y social; mediadores políticos que canalizan y crean
opinión pública. En el caso expuesto en el capítulo uno de este ensayo, la no
publicidad de lo que sucede en el país, no solo se evita comunicar una acción, sino
mantenerse vigente como industria generadora de opinión y “educación”.
2.2 ¿Qué buscan los balances en DD.HH y DIH cuando son
presentados al público?
busca publicar una realidad mediante la publicación de evidencias que
comprueben la veracidad de los hechos y su respectiva solución social; el Gobierno
da participación y promueve la desmovilización de grupos armados, ofreciendo
recursos en sacrificio de otros asuntos sociales; esta acción le permite fortalecerse
ante la comunidad internacional; el Estado entonces hace uso los acuerdos
internacionales en materia de DDHH, así lo hace saber la Red de Seguridad
Humana al referirse a la acción propia de los DDHH adoptada por las Naciones
Unidas en 1948, instaurando los pilares del sistema de derechos los cuales son la
libertad, igualdad y solidaridad (Waldner, 2013).
13. 2.3 ¿Cómo los medios de información como los balances en
DD.HH y DIH pueden crear imaginarios sociales que
beneficien o perjudiquen ciertas visiones, sectores sociales
o estructuras?
Recordemos de nuevo a Chomsky (Chomsky & Timsit, 2013) en su decálogo; a
través de estas estregáis, los medios de comunicación pueden alterar los conceptos
sociales frente a un tema o acto en particular; si los medios reaccionan de manera
alienante o sutil, los balances se verán envueltos en una realidad ficticia o
sospechosa de realidad social; para Mac Luhan citado por Freidenberg, los medios
deben cumplir determinadas funciones, entre las cuales se encentran la vigilancia
social y política, que permite el control de los poderes públicos y gubernamentales;
de tal suerte que se permita evidenciar lo que sucede, como actos de corrupción,
de abuso de autoridad y demás; permitiéndole a la opinión pública condenar el
hecho y actuar (Freidenberg, 2007).
Adicional al planteamiento anterior, el poder de los medios es particular y
alcanza con efectividad objetivos sobre otros actores a voluntad de quien los dirige,
poseen o controlan, y quienes se valen de ellos para canalizar sus mensajes,
Castillo hace una reflexión sobre el tema y nos dice que en su forma moderna, el
juego político se organiza y estructura, de manera creciente, sobre la opinión pública
y la contienda política de aspecto simbólico tiende a reducirse significativamente en
la batalla por conquistar la opinión, lo cual sugiere los alcances y pretensiones que
los grupos pueden llegar a obtener de ellos (Castillo Esparcia, 2011).
14. 2.4 ¿Cómo los medios de información pueden configurar
imaginarios sociales convirtiendo a las personas en
acríticas?
La respuesta nos la da el mismo Chomsky en su decálogo de manifestación de
los medios de comunicación, los cuales están preparados para desvirtuar la
información y diferirla a la opinión publica de acuerdo a unos intereses de los grupos
de poder económico y político.
2.5 ¿Cómo los medios de información pueden configurar
imaginarios sociales convirtiendo a las personas en
acríticas?
A lo largo de la Historia, los diferentes regímenes se han apoyado en
información, incluso propaganda, distribuida de forma masiva entre la población,
para que se sienta inclinada a apoyar o repudiar determinada ideología y/o accionar.
Este tipo de fenómeno, ha sido estudiado por pensadores de la talla de Noam
Chomsky (Chomsky & Timsit, 2013) en su estudio sobre medios de comunicación e
incluso el filósofo René Girard establece la efectividad de “demonizar” al contrario
para generar repudio hacia él y hacer que la población lo ataque y siga la causa
contraria a la que representa (Girard, 2002) .
Un claro ejemplo de esto no lo muestra Chomsky en El Control de los Medios
de Comunicación, cuando establece cómo la ComisiónCreel convence la población
Estadounidense de la necesidad de participar en la I Guerra Mundial, cuando seis
meses antes se habían mostrado totalmente apáticos ante la idea. La forma de
lograrlo estuvo marcada por una amplia propaganda mediática que incluía fotos de
niños mutilados, mujeres violadas y poblaciones enteras arrasadas por los
alemanes, haciendo que éstos encarnaran todo lo que significara la “inhumanidad”
y la antidemocracia.
Siguiendo con este último pensador, un caso evidente del proceso de configurar
imaginarios sociales a través de los medios de comunicación, lo podemos observar
15. en la Guerra Fría, cuando tanto la Unión Soviética como Estados Unidos emitieron
propaganda para ganar adeptos a sus respectivas causas. Para el caso de la URSS,
acusaron a occidente de enajenar la conciencia de los individuos, acaparar la
riqueza y explotar al resto del mundo, mientras USA recalcaba la idea de los rusos
y sus aliados como símbolos de la antidemocracia y la coacción de las libertades
civiles, entre otros aspectos.
Para el caso de Colombia este fenómeno no es nuevo, a lo largo de la Historia
de nuestro país se pueden situar varios casos. Por ejemplo, en varios documentos
fuente de información lo acaecido en el país en la primera mitad del siglo XX, es
común encontrar alusión a sacerdotes conservadores que establecía que los
liberales eran la encarnación del mal, la inmoralidad e incluso, San Ezequiel Moreno
obispo de Pasto, promulgó que matarlos no era pecado, discurso que no sólo se
daba desde el púlpito de las iglesias, sino que abordaba emisoras y periódicos de
la época (Malcolm, 1993).
2.6 ¿Cómo se relaciona la teoría de los filtros sociales con la
versión oficial a cerca de la situación de DD.HH en
Colombia?
Las noticias que circulan a nivel nacional por los diferentes medios de
comunicación en Colombia, pasan por diferentes filtros, ya sean gubernamentales
o empresariales. Estos filtros determinan, en gran medida, los temas de actualidad
que se discuten en el país y la relevancia que opinión pública da a los mismos. En
este sentido, las noticias relacionadas con los Derechos Humanos no son la
excepción, prueba de lo anterior parecen ser varias noticias sobre desplazamientos
forzados, causados por grupos de extrema derecha y extrema izquierda que se dan
en diversas regiones del país y que, en muchos casos, solo circulan brevemente en
emisoras locales, puesto que en varias ocasiones van en contravía de políticas
estatales mostrando una perspectiva de la realidad diferente a la que se emite de
forma masiva en los medios de circulación nacional.
16. Sin embargo este fenómeno no es una particularidad específica de los medios
de comunicación actuales. Haciendo un recorrido por la Historia nacional, en 1985
en un periodo reconocido por un amplio accionario guerrillero y los carteles del
narcotráfico, se da la toma del Palacio de Justicia los días 6 y 7 de noviembre
efectuada por el grupo guerrillero M-19, con una complicidad aún no comprobada
con el Cartel de Medellín quien al parecer contribuyó con armas y dinero a cambio
de que fueran destruidos expedientes que los implicaban. De esta forma, una célula
de dicho movimiento insurgente desarrolla la “operación Antonio Nariño por los
Derechos del Hombre” y logra hacerse con el control de dicha edificación, diferentes
cadenas de televisión y cadenas de radio interrumpieron su programación para
cubrir la noticia paso a paso, siendo así como la mayoría del país se enteró de los
hechos y empezó a seguir los eventos que se emitían en directos desde el luchar
de los hechos.
A medida que la toma avanzaba, la situación se hacía cada vez más
preocupante: los magistrados de la Corte Suprema de Justicia habían sido tomados
como rehenes, al igual que los demás empleados de la edificación, mientras el
grupo insurgente amenazaba con tomar medidas más drásticas si el presidente del
momento, Belisario Betancurt no se hacía presente y se sometía a un juicio
político. Por su parte el mandatario cito al Palacio de Nariño a todo su gabinete
ministerial y a los altos mandos militares, actualmente se desconoce lo que ocurrió
de forma exacta al interior de dicha reunión, incluso se ha hablado de un golpe de
Estado momentáneo en donde el Presidente de la República se convirtió en
convidado de piedra de las decisiones que se tomaron, lo cierto es que el Ejército
Nacional organizó la retoma de la edificación, que dio como resultado la muerte de
varios civiles, entre ellos la mayoría de los magistrados y la desaparición de varias
personas que se observa salen en custodia del Ejército Nacional y de los cuales
aún no se tiene reporte de su paradero.
En este punto vale la pena resaltar que si bien, y tal como lo he mencionado,
en un principio el país tuvo la oportunidad de seguir la noticia, posteriormente el
gobierno a través de la Ministra de Comunicaciones del momento, Noemí Sanín,
17. ordenó suspender el cubrimiento de la noticia y trasmitir en su lugar el partido de
fútbol entre los equipos Unión Magdalena y Millonarios, que no estaba programado
para ser emitido en vivo. En vista del caso omiso que hicieron varios periodistas de
la petición de la ministra, ésta amenazó con clausurar cadenas de televisión y
emisoras que continuaran con la trasmisión en vivo de los eventos suscitados en la
Plaza de Bolívar de Bogotá los mencionados días, bajo el argumento de
salvaguardar la democracia, el orden público y evitar que los insurgentes se
enteraran del accionar del Ejército. Sin embargo, ante estos hechos 29 años
después la opinión pública aún sigue sin conocer exactamente qué pasó con los
desaparecidos puestos en custodia por el Ejército, entre otros hechos graves, que
fueron opacados por la Avalancha de Armero, ocurrida el 17 de noviembre del
mismo año, que fue utilizada como cortina de humo distractora para apaciguar a la
opinión pública y hacer que los eventos del Palacio de Justicia fueran “olvidados”
por los colombianos (Chomsky & Timsit, 2013).
Sin embargo, a pesar de lo anterior, los medios de comunicación siguen
ocultando información a la opinión pública para favorecer a un sector específico. A
modo de ejemplo, citaré el caso del reconocido periodista Enrique Santos Calderón,
hermano del actual Presidente de la República, quien recientemente publicó su libro
“Así Empezó Todo”, en donde confiesa, al igual que lo ha hecho en algunas
entrevistas radiales y televisivas sobre el tema, que se enteró del inicio de los
diálogos del proceso de paz mucho antes que la gran mayoría de los colombianos
pero que decidió callar para favorecer los planes del gobierno; ante lo cual me
pregunto si es pertinente o no ocultar detalles que compromete a la sociedad en
general que se dice participativa en opinión (Davila, 2014).
18. Bibliografía
Castillo Esparcia, A. (Febrero Abril de 2011). Los Medios de Comunicación como
actores Sociales y Políticos. RAZÓN Y PALABRA(75). Obtenido de RAZÓN
Y PALABRA.
Chomsky, N., & Timsit, S. (13 de Mayo de 2013). Doctrina del Shock, Noam
Chomsky y Las 10 estrategias básicas de manipulación mediática ¡Difunde!
Obtenido de 10 Estrategias de Manipulación Mediática:
http://disenosocial.org/las-10-estrategias-de-manipulacion-mediatica/
Davila, V. (19 de Noviembre de 2014). Radio en vivo La FM. Obtenido de Radio en
vivo La FM: http://www.lafm.com.co/audios/asi-empezo-todo-el-libro-de-en-
172284
Freidenberg, F. (28 de noviembre de 2007). Revista de pensamiento
iberoamericano,. Los Medios de Comunicación de MasasS: ¿También son
Actores?, 8, pp. 165-176,. Alcala, España: verano.
Galeano, E. (7 de Octubre de 2007). YouTube. Obtenido de Eduardo Galeano
medios de comunicacion como engañan pueblo:
https://www.youtube.com/watch?v=VtGKLR2E0LE
Girard, R. (2002). Veo a Satán caer como el relámpago. Madrid, España:
Anagrama.
Malcolm, D. (1 de Octubre de 1993). San Ezequiel Moreno : El liberalismo es
pecado ; El santo del V Centenario no aprendió que la esencia de la política
es la concesión. CREDENCIAL HISTORIA. NO 46, 3. Obtenido de San
Ezequiel Moreno : El liberalismo es pecado ; El santo del V Centenario no
aprendió que la esencia de la política es la concesión:
http://www.banrepcultural.org/node/32898
Waldner, B. F. (2013). Comprendiendo los Derechos Humanos. Manual Sobre
Educación de los Derechos Humanos . Viena, Austria: Res de Seguridad
Humana.