La esclavitud en el Perú comenzó con la llegada de europeos que exportaron africanos en grandes cantidades para ser explotados. Los esclavos eran transportados en barcos en condiciones insalubres e inhumanas, lo que causó muchas muertes. Aunque los movimientos abolicionistas surgieron en el siglo XVIII, la esclavitud continuó hasta el siglo XIX y sus efectos sociales y económicos persisten.