El documento describe los cuatro tipos principales de huesos que componen el sistema óseo humano: huesos largos, cortos, planos e irregulares. Los huesos largos son más largos que anchos y actúan como palancas en el movimiento, como el fémur y la tibia. Los huesos cortos son más anchos que largos y transmiten fuerza, como los huesos carpales. Los huesos planos actúan como protectores de órganos o para la inserción muscular, como los huesos del cráneo. Finalmente, los