La Guerra Fría (1947-1991) fue un período de tensión entre Estados Unidos y la Unión Soviética que no involucró un conflicto militar directo, pero sí una carrera armamentista y enfrentamientos indirectos a través de guerras en países aliados. Se caracterizó por la división del mundo en bloques liderados por la OTAN y el Pacto de Varsovia, y concluyó con el colapso de la Unión Soviética y el fin de la ideología comunista.