El documento describe la contaminación del río Moche por metales pesados procedentes de la industria minera local. Explica que los relaves mineros, que son desechos tóxicos de la minería, han contaminado el agua y dañado la fauna de los ríos, así como han reducido la producción agrícola y causado enfermedades en las personas. Finalmente, concluye que los análisis de la calidad del agua mostraron niveles excedidos de varios contaminantes en comparación con los estándares ambientales.